No Te Pertenece

La verdad salió a la luz

Capítulo 47

La verdad salió a la luz

–Andrea no daba crédito a quien veía enfrente de ella y aunque no lo conocía personalmente sabía que era él, Miguel estaba frente a ella–

MIGUEL – necesito que me ayudes –Andrea no reaccionaba, ese hombre se veía sucio golpeado– por favor Andrea –suplico tocándose el estómago–

ANDREA – ¿Qué te paso? –pregunto nerviosa no sabía realmente que hacer–

MIGUEL – déjame entrar y te explico –Andrea suspiro y asintió–

ANDREA – ¿Qué te paso? –Le ofreció un vaso de agua y él lo bebió con desesperación–

MIGUEL – escape –pudo decir mientras fruncía el ceño–

ANDREA – ¿qué pasa? –lo miro–

MIGUEL – solo algunos golpes y el cansancio, Andrea necesito –Andrea lo miro impresionada–

ANDREA – ¿cómo sabía que estaba aquí? –se sentía desconfiada–

MIGUEL – no sabías que estaba aquí de echo no venía a buscarte a ti, si no a Samuel

ANDREA – ¿Qué tiene que ver Samuel contigo? –pregunto con miedo se tocó el pecho esperando la respuesta–

MIGUEL – conmigo nada, pero solo él o Irina puede ayudarme

ANDREA – ¡Irina! –Miguel asintió–

MIGUEL – Andrea yo tengo que contarte muchas cosas pero –Andrea lo observo–

ANDREA – ¿tú sabes quién mato a Aranza? –Miguel bajo la mirada– exijo que me lo digas

MIGUEL – si te lo digo tú vida puede correr riesgo

ANDREA – que estés aquí también debe de poner mi vida en riesgo –Miguel asintió– ¿Dónde estabas? ¿Por qué hasta ahora apareces?

MIGUEL – son demasiadas preguntas

ANDREA – y quiero que me contestes todas Miguel necesito una maldita explicación, tú sabias que Aranza estaba embarazada –Miguel negó–

MIGUEL – no lo sabía me lo dijo –guardo silencio–

ANDREA – ¿cuándo? –Grito desesperada– dime con un carajo cuando te lo dijo, dime como murió

MIGUEL – Aranza murió por mi culpa –su voz se cortó– nunca la quise meter en esto

ANDREA – meterla ¿en qué? carajo dime todo lo que sabes, tengo derecho a saberlo

MIGUEL – no sé si sea conveniente –Andrea lo miro con coraje–

ANDREA – claro que es necesario llevo meses intentando saber que paso con mi hermana y ahora que te tengo enfrente necesito todas las explicaciones

–Natalia se separaba lentamente del abrazo de Saúl con los ojos llenos de lágrimas y la emoción de haber escuchado por primera vez ese te amo que tanto deseaba de los labios de Saúl–

NATALIA – no puedo creer esto –se miró su mano sonriendo mientras las lágrimas le escurrían por sus mejillas–

SAÚL – entonces si te quieres casar –Natalia sonrió incrédula–