Del Más Fuerte a la esperanza de la humanidad

6. ¿Puedo Tomar Tu Mano?

(Pv Eren)

¡Eren toma a Mikasa y váyanse!

¡No te voy a dejar!

¡¿Por qué no puedes hacerme caso por una vez?!

¡Eren dame tu brazo!

¡Detente padre! ¡Me asustas!

¡No pierdas esta llave! ¡Tienes que ir al sótano! ¡Ahí descubrirás la verdad!

¡EREN PERDONAMEEE!

- ¡Detente!

Desperté respirando con dificultad

- Otra vez.- dije con tristeza.- Esos recuerdos...de nuevo

Me levanté de la cama abrazándome a mi mismo, cada vez que tengo pesadillas termino llorando como un idiota. No importa cuanto llore, mi madre no volverá a mi lado...nunca podré disculparme por las cosas que dije ese día...Nunca podré decirle que la quería con todas mis fuerzas...Nunca podré decirle que amo a un hombre.

- Estoy todo sudado.- dije limpiando mi frente

- ¡Ah!

Miré hacia la cama (aun estaba en el cuerpo del Capitán) y pude verme a mi mismo apretando los dientes y sudando.

- ¿Capitán?

- No...vayan...

- ¿Eh?- se estaba retorciendo en la cama, corrí hasta la cómoda y tomé la jarra de agua asustado.

- Vuel..van...- gemía entre ¿lágrimas?- Far...lan...Isa..bel...no vayan...

¿Farlan? ¿Isabel? ¿Quienes eran? Por su expresión y la forma en que los llamaba debían ser muy importantes para él ¿Serán acaso su familia?

- No...se enfrenten...a..ese titan...

Lo comprendí de inmediato...ellos murieron por culpa de un titán.

- ¡NOOOOO!

Me quedé en shock al verlo despertar ¿Qué podía hacer? Su familia...el también perdió a su familia....por un maldito titán.

------

- Ya veo...supongo que no debe ser fácil.

El capitán desvió la mirada, pero podía sentir su tristeza y su comprensión. Ambos habíamos perdido alguien muy valioso de la misma forma.

- También estás sudando.- me dijo.- Quítate la camisa, te ayudaré

Normalmente me hubiera puesto muy nervioso, pero ahora después de conocer algo tan privado del Capitán, no sé cómo reaccionar mas que quitarme la camisa y darme la vuelta.

Podía sentir su mano (bueno mi mano) pasar suavemente por mi espalda, mi corazón latía rápidamente pero mi mente tenía otras cosas.

¿Puedo preguntarle al Capitán sobre su pasado?

¿Puedo decirle que lo apoyo en lo que sea?

¿Puedo decirle que siempre estaré a su lado?

Tal vez si le decía sobre mi vida....pero realmente no hay nada que ya no sepa él o el Comandante o Hanji....¿Qué puedo hacer para que confíe en mi?

- Debo verme patético ¿cierto?

No esperaba esas palabras de él.

- El más fuerte de la humanidad llora por una pesadilla.- dijo sentándose en la cama.- Debe ser una gran decepción para tí. 

- ¡De eso nada!- me senté a su lado.- Usted es humano después de todo, perder a alguien muy querido debió ser horrible.- me miró sorprendido.- Ha luchado tanto y perdido a tantas personas, no tiene que avergonzarse de sus lágrimas ¡Son la muestra de que esas personas fueron muy importante para usted y nunca los olvidará!

Ver su lado humano fue algo que permanecerá en mi memoria para siempre, no era sólo un héroe o un soldado poderoso, también era alguien con sangre en las venas que sufre y llora como cualquiera, ese lado era igual de valioso que todos los demás, estaba más enamorado de él.

- Eren.- su mirada perpleja me pareció de lo más adorable.

Tomé un pañuelo y limpié su rostro, él no dijo nada ni se opuso, estaba tan feliz de verlo así, saber que esa mirada (aunque fuera mi cara) la dedicaba sólo a mi.

- Ya es tarde.- le dije.- Deberíamos dormir un poco.

Me acerqué y lo besé suavemente, por suerte no opuso resistencia pero no quería aprovecharme de la situación, esperaba que con ese beso entendiera que contaba con mi apoyo sin importar las circunstancias.

Nos pusimos una camisa limpia y nos acostamos en silencio. Le di la espalda para que no viera mi cara completamente roja mientras él miraba el techo.

- Eren.- escuché su voz.- Si necesitas hablar....también puedes contar conmigo. No necesitas hacerte el héroe.

Sonreí agradecido, ver el lado humano del Capitán y saber que me apoyaba era algo muy importante para mi.

- Esto...Capitán.- le dije muy nervioso.- ¿P-Podemos tomarnos de la mano?

- ¿Ah?

- B-Bueno...así si tenemos pesadillas...podemos despertarnos mutuamente y apoyarnos.

No sé de dónde saqué el valor de decir eso, pero mi corazón latía a máxima potencia.

- Esta bien, dame tu mano.

Me di la vuelta sorprendido, el Capitán me miraba tranquilamente ofreciendo su mano. Sonreí emocionado mientras la tomaba agradecido. Su tacto cálido y suave, su mirada sincera. Una vez más lo veía a él y no a mi, con sus ojos negros tan brillantes y su expresión serena. ¿Cómo no podía amarlo?

Nos dormimos rápidamente sin soltarnos las manos.

Por primera vez en mucho tiempo, no tuve ninguna pesadilla.