Del Más Fuerte a la esperanza de la humanidad

19. ¡No sueltes mi mano!

- ¡Capitán! ¡Capitán!

Abrí los ojos confundido, mi propio rostro me miraba preocupado...¿Eh?

- ¿Eren?- mi cabeza estaba hecha un lío, pero recordé lo que había pasado.- ¡El titán!

- Va camino a la ciudad.- explicó Eren.- Usted nos salvó Levi-san, se convirtió en un titán acorazado y detuvo el derrumbe, pero Reiss logró escapar.

Ahora que regresaba a la normalidad, me di cuenta que estaba en una carreta junto con Eren y con... ¡Hanji!

- ¡Oi! ¿Qué pasó contigo cuatro ojos?- le pregunté preocupado al verla tan herida.

- Descuida Levi, no fue gran cosa.- dijo para quitarle importancia.- Ahora debemos planear algo pronto antes de que ese titán destruya a la humanidad.

- ¡El Comandante!- gritó Armin sonriendo como un idiota señalando al grupo que venía a caballo.

Me levanté y vi a lo lejos (Aunque era imposible no verlo) al enorme titán de más de cincuenta metros se arrastraba hacia la muralla quemando todo a su alrededor, era mucho más grande que el Colosal, de ahí supongo que por eso no puede ni levantarse.

- ¡Se dirige a la muralla!- escuché la voz de Erwin.- Debemos detenerlo, pero no hay manera que podamos cortarle la nuca con semejante temperatura.

- Esa asquerosa cosa es Reiss.- le expliqué.- No sé de qué manera funciona esa inyección titán pero no creo que sea así.- vi que parte del grupo que seguía al titán pertenecía a la policía militar.- Si ellos nos están ayudando ¿Significa que ya no nos persiguen?

- Para nada, pero me temo que si le devolvemos a Reiss la coordenada para que vuelva a su forma humana todo nuestro esfuerzo no servirá de nada.- explicó Erwin antes de dirigirse a Historia.- ¿Entiendes a lo que me refiero?

-.....Sí.- susurró.- Al final esa fue su intención desde el principio, pero quería que yo cargara con esa maldición...

- Ya luego pensaremos en eso.- dijo Eren.- Por ahora debemos deternerlo a como de lugar.

- Creo que tengo una idea...pero no estoy seguro.- dijo Erwin pensativo.- No podemos cortar su nuca, tal vez si le volamos la cabeza

- ¡Yo puedo ayudar!- intervino Armin haciendo que el rubio mayor sonriera.- ¡Con una temperatura tan elevada podemos hacerlo explotar!

- Como lo esperaba de ti, mi pequeño estratega.

El chico se sonrojó pero sonrió decidido, en el camino Hanji no dudó en felicitarlos por su boda y decía cosas como que debían organizar un gran festejo para ellos y la futura pareja (y cuando decía eso nos miraba a Eren y a mi)

- Maldita cuatro ojos, hasta herida es imposible calmarla.

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(Pv Eren)

- ¿Así que el poder de controlar titanes es algo que sólo pueden hacer los Reiss?

- Si lo que dijo ese tipo es cierto, entonces si.

Estaba confundido con lo que decía Levi-san, si la coordenada funciona así, entonces ¿Por qué los titanes me obedecieron cuando ataque a la que se comió a mi madre?

- ¡La muralla Shina justo al frente!

- ¡Eren!- gritó el comandante.- ¡Intentemos usar ese poder para distraerlo mientras preparamos los explosivos!

- ¡Entendido!- dije saltando al caballo que me prestaron.- ¿Estás lista, Historia?

- Sí.- dijo saltando detrás de mí y sujetándome la espalda.