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Moscú, Rusia era el país donde los mejores patinadores provenían como: Mila Babicheva, Georgi Popovich, Viktor Nikiforov y Yuri Plisetsky. Esos fueron unos​ de los mejores patinadores rusos sin embargo con el paso del tiempo Viktor Nikiforov quedó un poco atrás debido a los logros y esfuerzos que el joven Yuri Plisetsky lograba. Después de su periodo de descanso entrenando con paciencia a Yuuri Katsuki se decidió que volvería a el podio contra sus nuevos y cambiados contrincantes. El día transcurría y las manillas del reloj marcaban las 06:30 P.M el duro entrenamiento que Yuri recibía era algo que siempre quiso tener siempre le tomaban como un chico que debía quedarse atrás pero esta vez sorprendió más a su entrenador Yakov.

—¡¡Yuri!! Te dije que hicieras un Salchow— Le regaño Yakov gritándole desde afuera de la pista. Al oír sus quejas del mayor el rubio solo rodó los ojos deseaba llegar a casa y volver a hablar con Yuuri quien se había vuelto su distracción

Cuando salió de inmediato agarro su maleta sacando su móvil pero un mensaje le hizo torcer la boca y dejar salir un gruñido desde lo profundo de su garganta.

Viktor Nikiforov:

Oh, Yurio te haz creído el gracioso con quitarme a Yuuri pero quisiera ver si controlas tu enemigo mortal. . Los celos

Ese mínimo y simple mensaje le hizo prender la mecha. Se cambió sus patines a sus típicos tenis deportivos y salió de ahí sintiendo el vibrar de su teléfono en su bolsillo derecho, con esperanza lo saco pero no era más que otro mensaje “fastidioso” de Jean-Jacques Leroy apodado como JJ.

JJ:
¡Hey! Yurio te parecería ir a el banquete del GP. Irá Yuuri😏

El canadiense sabía de esa fuerte atracción del ruso al japonés las mejillas de Yurio se pusieron carmesí y solo suspiro

—Estúpido JJ— Murmuró aún caminando hacia su hogar. Tenía y debía estar ahí después de todo el era el ganador del GPF y sería descortés no ir además tenía tiempo o más bien menos de una semana de no ver al azabache quien ya era un hecho que fueran pareja.

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Yuuri Katsuki ganador de la medalla de plata trotaba una vez más se adaptó al duro entrenamiento que el ruso peliblanco le había dejado pero algo no salía de su mente, algo que le perturbaba miles de horas

¿Porque Yurio se habrá fijado en mi?. Pensó

Un millón de teorías llegaban a su cabeza haciéndole tener aún más confusión pero aún tenía otro obstáculo y ese era Viktor desde su partida a Rusia todo su mundo cambio, al menos sí una semana después, que fue la mismísima llegada de Yurio y su declaración. Sin duda o más bien con horas de duda termino aceptando porque el mismo sentía ese sentimiento a Yurio aunque era llamado “El delincuente Ruso” o “El Tigre de Hielo” Yuuri lo quería por igual porque todo corazón reservado tiene algo blando que mostrar y estaba algo deseoso de saber que era en realidad lo que ese Ruso de 16 escondía.

Al estar nublado de sus pensamientos le hicieron chocar contra uno de los postes dejándolo en el suelo con una marca roja en su frente

—¡A-Auch!— Se quejó sobando la zona afectada pero un mensaje llego a su móvil haciéndolo alarmarse y sacarlo.

Phichit Chulanont:

¡Hola Yuuri! ¿Te haz enterado de que habrá un enorme banquete en honor a los ganadores, ¿irás?

Un suspiro de alivio salió de sus labios pues Yurio aún no contestaba y Viktor hacia igual sabía de esos duros entrenamientos que Yakov les dejaba.

Yuuri Katsuki:

Estaré ahí Pichito.

Contesto.

Volvió nuevamente a levantarse para seguir trotando. El clima que ofrecía Hasetsu era algo frío pues eso era una de las partes donde el frío daba más en Japón. Cuando llegó a el dichoso Hotel de sus padres su madre le recibió con una sonrisa

—¡Mi niño! Te he preparado tu platillo favorito— Esa emoción recorrió cada parte del azabache —¡Tazón de Cerdo!— Hiroko era la que más consentía a Yuuri pues aunque no supiera gran cosa de lo que se dedicaba lo apoyaba como toda madre haría

—¡Mamá gracias!— Dió un brinquito para quitarse sus zapatos y entrar a comer. El anochecer estaba llegando y la gente iba y venía pues el periodo vacacional había llegado a su fin.

Yuri Plisetsky ha dejando un mensaje:

Yuuri. . Sé que es algo tarde pero. . ¿Quieres ir conmigo a el banquete como mi pareja?

𝙏𝙝𝙚 𝙅𝙚𝙖𝙡𝙤𝙪𝙨𝙮 𝙤𝙛 𝙔𝙪𝙧𝙞 𝙋𝙡𝙞𝙨𝙚𝙩𝙨𝙠𝙮.Where stories live. Discover now