𝙏𝙝𝙚 𝙅𝙚𝙖𝙡𝙤𝙪𝙨𝙮 𝙤𝙛 𝙔𝙪𝙧𝙞 𝙋𝙡𝙞𝙨𝙚𝙩𝙨𝙠𝙮.

12

Yuuri pensaba que todo parecía ser una broma, se sentía tan indefenso y débil que suspiraba quitándose los lentes por lo empañados que se ponían.
Cada vez que recordaba la foto apretaba sus nudillos y su mandíbula se tensaba de ver al amor de su vida en un apasionado beso con quien era su entrenador.
— Yuuri, vamos ábreme — Insistió nuevamente Pichit intentando obtener una respuesta positiva de su mejor amigo.
— No, no quiero. — Susurro con su voz entrecortada
— Vamos, ¿quien te ayudo a salir prácticamente del closet y ahora no quieres ni abrirme — Se quejó del otro lado de la puerta — Está bien, tú ganas sólo estaré a lado por si necesitas... algo. —

El japonés odiaba sentirse así, indefenso y dependiente de el ruso. Tal vez él le daba la suficiente confianza o el amor que necesitaba.
— Basta, basta. — se dijo a sí mismo pero escuchó nuevamente la puerta — ¡PICHIT POR FAVOR DÉJAME! —
Un silencio sepulcral lo hizo voltear hacia la puerta

— Se qué tal vez piensas que tengo la culpa pero... Yuuri yo te amo y jamás me sentí tan estúpidamente enamorado de alguien —
Su voz pareció quebrar su corazón, ahí estaba tan aturdido y confundido
— Déjame repararlo —
Se había tragado sus sentimientos apretando sus nudillos golpeando el suelo ( aunque se quejó sobándose esta ).
— Te estaré esperando —

Pequeños pasos le hicieron voltear dejando escapar un suspiro gruñendo un poco.
— Ugh. —
Todo parecía ser tan doloroso tanto que jamás pensó en sus pocas posibilidades de ser traicionado. Tal vez debía cegarse el corazón y ser menos amoroso pero todo parecía ir en su contra.
Todo.

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Los pasos en la habitación de Viktor hicieron despertar al rubio
— ¿Por que eres tan obsesivo y pedófilo? —
— Porque tal vez lo amo — Subió sus bóxers ajustando después su pantalón dejando escapar un carraspeo — Ahora Yurio no será un obstáculo —
Chris miraba con confusión, ¿Porque alguien que podría tenerlo todo estaba tan obsesionado por un amor qué tal vez ni siquiera había empezado?
— Estas loco, Mon amour —
Y lo estaba, Viktor había perseguido a Yuuri desde que las finales habían terminando y aún más cuando inició una relación con quien creía su aprendiz.
— Es el momento perfecto —
— Lo que tú digas solamente te diré que no seas un pedofilo a tú edad es súmante raro — Murmuró haciendo su boca de pez burlándose un poco tomando un poco de la comida que había encargado mientras escuchaba un azoton en la puerta
— Pobre viejo —

El hotel parecía una tumba y los fríos pasos de Nikiforov eran los únicos que se escuchaban.
— Serás mío — Ronroneo lamiendo sus labios mientras sonreía aunque al ver a Yurio se detuvo.
— Nunca te das por vencido — Frunció el ceño. ¿Porque todo parecía ser difícil ?
Se acercó pero se detuvo tomando las rosas del pasillo tocando con sus nudillos la puerta
— Yuuri —
— Yurio basta... Vete no quiero verte —
— ¿Rechazarás a tu entrenador? —

Esperaba un abrazo cuando abriera la puerta. Tal vez era obsesión o un amor puro y pleno.
Tal vez era un amor obsesivo y estaba seguro que Yuuri no parecía ser competencia.

Metido en sus pensamientos no sintió como abría la puerta y al verlo volvió a cerrar la puerta.
Apretó sus nudillos volviendo a tocar con desesperación, ¿había fallado?

¿Nikiforov había fallado por tercera vez?

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Yuri Plisetsky ha enviado un mensaje:
Aunque no te guste... Volveré a enamorarte.