13 | « Tranquila, fiera»

18K 1.1K 83
                                    

TRECE


MADYSON GREY


Gruñí molesta mientras tiraba el abrigo a la cama sin importarme dónde caía. Me dediqué a quitarme los pendientes pesados que hace unas horas me habían parecido hermosos, y justo en ese momento entró en la habitación Colton dando un portazo.

—¡No puedes entrar así a mi habitación! —gruñí mirándole a través del espejo del tocador.

—Yo entro cómo se me pegue la gana —espetó con la vena de su cuello brotada.

—¿Cómo no? Tú haciendo lo que se te da gana sin importarte lo que los demás opinan —rodé los ojos mientras quitaba mis tacones para después ponerme de pie e ir hacia el baño.

Tiré la puerta para cerrarla pero él la abrió haciendo que retroceda.

—No me hables así —ordenó.

Levanté ambas cejas.

—Salte —ordené esta vez yo, sin mirarle— Salte ahora mismo del baño, Colton.

—¡No!

—¿A qué mierda has venido? ¿A seguir discutiendo? —pregunté encarándose.

—He venido porque me importas —respondió y bufé.

—Pues no pareciera antes —me crucé de brazos.

—Ay, Madyson —entrecerró los ojos, estando en desacuerdo.

—¿Qué? ¿Ahora yo estoy haciendo un drama de esto?

—No pero...

—Salte ahora mismo de mi habitación. No quiero verte ahora —ordené.

—No me da la maldita gana.

.

El cielo y el sol no son nada comparados con tu belleza, amor. Espero que aceptes venir a una fiesta con este humilde vasallo tuyo. Te quiero. —Colton.

Sonreí al leer la nota. No lo había podido ver en toda la mañana porque había estado atareada poniendome al día con algunas responsabilidades que me había estado explicando Travis y luego él había estado con Dylan.

—Todavía no me puedo creer que haya pasado una semana desde que os hicisteis pareja —hizo comillas en la última palabra— Mira, te ha dejado bastantes opciones.

Me acerqué a Travis y observé las opciones de ropa que había dejado Colton sobre la cama. Un vestido rojo ajustado corto con un pequeño escote y de mangas largas; una falda dorada y una camisa de seda negra; y un vestido de satén color perla.

—Obvio el de satén —aseguré y Travis sonrió estando de acuerdo— ¿Tú sabes de qué trata lo de la fiesta?

—Sí, un viejo amigo del Alpha hace una fiesta en una de las discotecas más famosas de Silver —contestó— Tranquila, esta fiesta no es de etiqueta.

—Entonces, tu vienes ¿no? —pregunté revisando los tacones negros de aguja que estaban junto al vestido— Solo he estado en una fiesta y terminó con dos personas en el hospital. Claro que eran licántropos y estaban bien en un par de horas pero igual tampoco he nombrado bueno... —dudé en decirle algo sobre la muerte del príncipe Erick.

—La muerte del príncipe. Lo puedes decir, tranquila —ladeó la cabeza— Bueno, yo no iba a salir hoy pero pensando que será tu segunda fiesta en toda tu vida y que nunca has ido sin un amigo, iré. Pero a saber si tu noviecito lo acepta —asentí con la cabeza, aliviada— Dame las gracias cuando te esté sujetando el pelo mientras vomitas.

SOLO ELLA.Where stories live. Discover now