T r e i n t a y o c h o

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"¿Cuál es tu pasado?"

Al fin me bajo, yo seguía sin idea de donde estábamos.

-¿Llegamos?- pregunté. Él soltó lentamente la venda de mis ojos, yo aún los mantenía cerrado.

-Ábrelos- me susurró. Al abrirlos me sorprendí al ver un Globo Aerostático frente a nosotros.

-Calum...- estaba muy asombrada, me había quedado sin aliento.

-¿Aún confías en mí?

-Esto debe ser una broma- dije sonriendo. Él sonrió aun más hermoso. Tomó mi mano y me dirigió hacia los globos. Ahí estaba un hombre.

-¿Están listos, Cal?- dijo él. Ahora que dijo eso, tenía que preguntarle de que se trataba eso de ''Cal'' y bueno, tenía muchas preguntas más, pero estaba tan sorprendida que lo olvidé todo en ese momento.

-Claro- respondió Calum.-Ven- me cargó sobre sus brazos y me introdujo dentro del globo.- Listo, Charles ya puedes soltarlo.

-¿Qué? ¡No!.-grité desesperada. Ambos rieron.

-Eres un despiadado- le dijo Charles a Calum.

-Me encanta jugar con ella...-dijo subiéndose al globo. Me dio un beso en la frente. A los segundos sentí como le globo de iba elevando, inmediatamente me sostuve en los brazos de Calum y me aferré a él con un miedo impresionante.

-Calum, ¿cómo bajaremos luego?- dije atemorizada.

-No te preocupes por eso, sólo desfruta de lo que te da la vida hoy- sonrió mi me abrazó por la espalda. Era cuestión de un minuto y ya estábamos viendo todo desde muy Alto.

Morí de pánico.

-Calum ¡estamos muy lejos!- dije preocupada.

-Lejos de donde quiero llevarte- dijo Calum abrazándome.

-¿A donde?

-Al cielo- dijo uniendo sus labios con los míos haciendo que mi pánico se convirtiera en una tranquilidad completa, sentir sus labios húmedos hizo que me sintiera mentalmente donde estaba físicamente; en las nubes. Su boca se movía al compás de la mía, su lengua se adaptaba perfectamente a mi cavidad bucal, era una danza perfecta que me mantenía en un trance incontrolable. Sentí la densidad del aire y me estremecí. Calum y yo nos separamos.

-¿Tienes frío?- dijo con esa voz sensual que me derretía a sólo centímetros de mi cara. Yo asentí, él tomo un abrigo que había en la base del globo y me lo puso encima, era de él, tenía su aroma y su calor, me sentí la chica más protegida del planeta.


El tomó mis manos y me puso frente a él, les dio un intenso beso y me miró a los ojos.

-Harley necesito decirte algo- dijo tiernamente.

-Dime- dije débil. Me miraba con ternura, sus rizos bailaban ligeramente con el viento y sus ojos brillaban más de lo normal.

-Harley- pausó-...Harley...yo...-sonrió-...yo te amo.

Mis sentidos se agudizaron, mi piel se erizo, mi corazón se detuvo, mi mente se desvaneció y mi cuerpo quedó paralizado. Moría por escuchar esas palabras salir de esa boca perfecta pronunciado por esos labios muy bien tallados y de esa voz que era como el canto de los mismísimos ángeles. Reaccioné unos segundos después. Sonreí.

-Calum...-todavía no podía creerlo- yo también te amo...como a nadie- dije suspirando.

Él sonrió y me tomó de la cintura, me dio un beso dulce, romántico intenso pero delicado, era el beso más perfecto y único que había probado, él era mi vida, su presencia mi ilusión, sus ojos mi delirio y sus besos mi trago predilecto. No había duda, estaba perdidamente enamorado del chico de cabello castaño. 

Luego de unos intensos minutos nos separamos, pasamos hablando, dándonos mimos y suaves besos durante unas horas, no estaba segura de cuantas, y la verdad, no me importaban. Al momento volví en mí y me di cuenta que debía volver a las 11:00 p.m. miré que eran las 9:30 p.m. suspiré aliviada, en el cielo las horas se volvían mas estrechas.

-Harley hay un lugar al que quiero llevarte, otro de mis escondites secretos.- dijo tierno

¡Maldita sea, Calum! ¡Llévame donde tu quieras! A la luna, a las estrellas, al infinito. Llévame lejos de este mundo, llévame al paraíso, llévame donde no existan terceras personas, dónde la única población seamos tú y yo para siempre, llévame lejos. Ráptame, róbame, secuéstrame y no me regreses nunca. Gritaba internamente.

-Llévame donde tu quieras- me limité a decir.

Calum sonrió y empezó a quitarle intensidad a la llama que mantenía el globo en el aire, estábamos sobre el océano, Calum dirigió en globo hacia tierra y caímos en medio de un bosque no lejano a la carretera.

Calum tomó su teléfono y envió un mensaje.

-¿Cuál es tu color favorito?- me preguntó.

-El Azul ¿por qué?- pregunté curiosa. Él me ignoró y siguió tecleando su teléfono. A los minutos se estacionó un BMW Negro frente a nosotros.

Dé el salió un tipo y le dio las llaves a Calum.

Tomó mi mano y abrió la puerta del copiloto, yo entre y el se dirigió a manejar, pasé todo el camino en esa carretera oscuro viendo su perfecto perfil, él sólo sonreía al verme de reojo, todo era perfecto. Al fin llegamos y se estacionó, estábamos en una cima donde se apreciaba una vista hermosa desde donde se podían ver las estrellas.

Sentí como se me erizó la piel cuando las yemas de sus dedos tuvieron contacto con la piel de mis hombros. Me abrazó por la espalda y quedamos unos minutos viendo aquel hermoso panorama.

-Calum, ¿cómo lo haces?- pregunté anonada.

-¿Hacer qué?- dijo riendo.

-Hacer que todo sea perfecto.

-Porque para mi tú eres perfecta y por eso quiero pedirte algo...-pausó.

-¿Que sea tuya?- le pregunté riendo.

-Harley tu ya eres mía- sonrió- es mío tu corazón, es mía tu atención, son míos tus sentimientos...así como yo soy tuyo única y exclusivamente- tomó mis manos- en éstas, aquí me entrego a ti. Mi prioridad no es tu cuerpo, eres tú...lo que eres y quien eres...éso es lo que yo deseo- Una lágrima de felicidad rodó por mi mejilla.

-Calum...-dije débil.

-Harley -me interrumpió-...quiero estar contigo, quiero que nos pertenezcamos el uno al otro, y para eso te entregaré mi pasado, mi presente y mi futuro...Mi presente y mi futuro eres tú...pero mi pasado, tienes que saber mi pasado...-dijo con los ojos llorosos.- Yo me volteé para quedar frente a él y tomé sus mejillas en mis manos.

-¿Cuál es tu pasado?

Tomó mi mano y nos tiramos sobre el motor del auto...el cielo estaba perfecto, les estrellas eran abundantes y estaban muy bien esparcidas...

-Mi pasado...es la muerte, la condena y la perdición...-dijo en un hilo de voz.

-¿A qué te refieres? Calum no entiendo nada- murmuré.

-En mi conciencia...tengo mas muertos que años de edad.- dijo.

En ese instante mi corazón se paralizó...


Prisila.

Mi Perfecta Pesadilla → c.h ✔Où les histoires vivent. Découvrez maintenant