Capitulo 15

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Athan

Estaba haciendo todo mi esfuerzo para ignorar las voces de Kay y Zeth. No quería pensar, si lo hacía iba a terminar por colapsar; pero para mi desgracia parecía ser el único que pensaba así.

-Chicos, por favor, ya cállense-Pedí.

-Nos callaremos si tienes alguna explicación para que la madre de Selena hubiera ido a ver al tío Luca-Dijo Zeth.

Gruñí, ¿por qué diablos tenían que ser tan tercos?, ¡todos los secretos del tío Luca me estaban volviendo loco!

-¿Se han puesto a pensar que tal vez se conocen de la escuela?, si no estoy mal (y normalmente no lo estoy) debieron haber ido juntos a la escuela.

-Si es así, ¿por qué ninguno de nosotros sabía que eran amigos?

-Creo que a estas alturas ya nos dimos cuenta que el tío Luca no es tan comunicativo como nosotros pensábamos.

-¿Y que hay de Dafne?-Increpó Kay-ni Lena ni Lyn sabían que se llevaba tan bien con Luca.

Suspiré mientras me acostaba en mi hamaca, se supone que habíamos venido a mi casa (milagrosamente vacía) para relajarnos e intentar olvidar el hecho de que estábamos descubriendo cosas un tanto desconcertantes sobre alguien que creíamos conocer, ¡pero no!, los idiotas de mis mejores amigos tenían que estropearlo todo.

-Tú mejor cállate-Dije-, para empezar no habríamos visto a Dafne y Luca si tú no le hubieras propuesto a Selena seguir a su madre.

Kay me dirigió una mala mirada antes de mostrarme el dedo del medio.

-Scortese.    [grosero]

Él se encogió de hombros.

-"Occhi che non vedono, cuore che non si sente", no se aplica en este caso-Señaló Zeth.   ["ojos que no ven, corazón que no siente"]

-¿Se dan cuenta que este es uno de los pocos días en que no tenemos que pasarnos el día entero en un barco y lo estamos desperdiciando taladrándonos el cerebro?

-¿Y qué quieres que hagamos?-Preguntó Zeth-, no puedo hacerme el idiota, ¿y ustedes?

Me encogí de hombros, ciertamente resultaba complicado fingir que no teníamos mil preguntas rondando por nuestras cabezas, pero en este momento prefería esforzarme en eso que en intentar descubrir más misterios de los que pensé que habría.

-¿Por qué simplemente no le preguntamos al tío Luca?-Pregunté.

Mis dos mejores amigos bufaron.

-Athan, en el mejor de los casos nos miente.

Sopesé la idea. Era verdad.

-Sto perdendo la testa.   [estoy volviéndome loco]

-Siamo già due.   [ya somos dos]

-Tre.   [tres]

Intercambiamos una mirada. ¿Por qué diablos teníamos que tener tanta curiosidad?

***

No solía escapar de las cosas, una prueba de eso es que cuando era niño incluso iba al dentista sin rechistar, pero si escuchaba a Zeth y Kay decir una sola palabra acerca de Luca o cualquier secreto que él guardara iba a considerar seriamente coserme los oídos.

Estaba ta desesperado que por esa razón me ofrecí como voluntario para hacer un estúpido turno extra de vigilancia, lo que nos llevaba a mí, solo, en un estúpido bote, en prácticamente la mitad de la nada.

La versión oficial era que las sirenas no existían, por supuesto, el hecho que mi familia sólo se dedicaba a la importación y exportación también era una versión oficial que no mencionaba el extraño hobby que mi tatarabuelo había instaurado de manera casi totalitarista. 

Bajo las OlasKde žijí příběhy. Začni objevovat