Let Me Die - YoonMin

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"Esto no se puede llamar vida si todos los días te duermes deseando no despertar jamás"

Cuando salió del Instituto, empezó a caminar hacia el centro comercial. Tenía una cita con Jin, y realmente estaba emocionado por eso. La última vez que él lo había visto, se fue porque no soporto verlo de tal modo, y ese mismo día casi se besa con Jimin pero, estaba seguro que solo fue un error, no quería algo con él. Tampoco relacionarse con él de forma amistosa, eso traería problemas. Acomodó la cinta de su morral porque le molestaba en el pecho. Le dolía la muñeca, y le costaba respirar un poco así que, caminaba despacio... Total, el centro quedaba cerca, y no tardaría tanto. 

Escuchó unos pasos detrás que se acercaban con rapidez, y pensó en qué podría ser una de las tantas personas que salen a correr por el mediodía o un ladrón. Para no ser tan negativa, eligió la primera opción. Aunque cuando giró y se encontró con el chico de ojos cafés y pelo negro oscuro, supo que no había acertado en ninguna de sus opciones. 

Pensó en que estaba llegando tarde a algún lugar pero cuando se posicionó al lado de Yoongi, supo que no era así. Yoongi sonrió, y miró hacia el frente. 

«¿Qué estás haciendo conmigo, Park?»

Jimin metió sus manos en sus bolsillos después de acomodar su mochila que colgaba de un hombro. Parecía vacía, no estaba llena como pensó que lo estaría... O dejó todos los libros en el locker o nunca los llevó a clase porque, mañana habría examen de química, una asignatura que tuvieron hoy. Yoongi abrió los ojos, y siguió caminando pero, ahora tenía un acompañante. 

- Oh, entiendo... ¿Te haces el bueno conmigo para que mañana te ayude en química? — Yoongi  arqueó una ceja, y su comisura izquierda se elevó. 

Jimin negó con la cabeza mientras que sus cejas se fruncían. En su frente se formaban pequeñas arrugas que le hacían parecer tierno. 

- Solo quería hablar contigo. 

Yoongi asintió con la cabeza. Lamió su labio inferior y miró hacia el frente. Volvía con las suposiciones en la cabeza: alguna amenaza de Jungkook y sus clones o una pregunta de por qué el hacía lo que hacía, o cosas así como solía preguntarle. No le gustaba que se metieran en su vida a menos, que el permitiera eso. Y Jimin, hacía todo lo que Yoongi nunca permitió... Y en parte, eso le agradaba. Le gustaba esa personalidad de rebeldía que tenía. 

«Yoongi, cállate. Sólo míralo, es demasiado bonito como para fijarse en ti.»

Los pensamientos negativos de su ser volvieron a parecer, hace un mes que estos se habían ido, y ahora cuando su mente había estado en paz, tuvieron que regresar. Jimin movía la boca, pero el no escuchaba. Tenía un mundo metido en la cabeza. 

Escuchó el final de la oración pero, no logró entenderla. Jimin tenía un color carmesí en sus pómulos, Yoongi controló su mano para que esta no fuera a parar a su mejilla y la apretara como hacen las tías cuando no te ven por mucho tiempo. 

- ¿Podrías repetirlo, por favor? Estoy distraído. 

Jimin suspiró, y después de unos infinitos segundos... habló. 

- Me costó decírtelo la primera vez, ahora va a costarme el doble. 

Yoongi se tensó. ¿Qué era tan secreto que le costó decírselo la primera vez? El acarició su brazo, tranquilizándolo pero, se arrepintió. Lo alejó segundos después. No quería tener contacto con él pero lo primero que hacía era aprovechar la oportunidad de tocarlo, observó sus ojos mientras se perdía en el tiempo. Jimin acortó un paso la distancia, y Yoongi se quedó tan plantado como una planta que Jimin dio otro paso para adelante. Yoongi bajó la cabeza, sintiendo su calor corporal contra el de el. Subió su cabeza por su mentón, y acarició con su dedo pulgar su labio.