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— Entonces, ¿Volverás a correr, o sólo querías ponerme en mi lugar? — preguntó Jack mientras abría una lata de cerveza y encendía el aire acondicionado de su camioneta.

Sonreí.

— No, creo que sólo quería ponerte en tu lugar. — dije, haciéndolo reír. Saqué un cigarro, y miré a mi alrededor. — ¿Tienes un encendedor?

Sonrió.

— No te lo daré, Tommy. — dijo. — No quiero que te destruyas los pulmones.
— Esto es muy injusto, Jacky. — dije, arrebatando la cerveza de su mano. Me miró con sorpresa. — No quiero que te destruyas el hígado.

Se volvió hacia mí, sonriendo ampliamente.

— Está bien, Tommy. — dijo. — Salvémonos el uno al otro.

Por algunos minutos, ambos sonreímos, sin decir ninguna palabra.

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Cuándo Cara volvió a traer a su amigo raro a la mesa, supe que en serio estaba molesta conmigo.

— ¡Te juro que si no corres ahora mismo, voy a matarte! — escuché la voz de Mikey desde el corredor, pero no me sorprendía en lo más mínimo.

Cuándo Tyler finalmente hizo su aparición, se veía incluso peor que yo.
Caminaba difícilmente, y estaba pálido.

No hizo ningún comentario acerca de dónde diablos había estado, y aunque me miró por varios segundos, Tampoco hizo ningún comentario acerca de los lentes oscuros que traía puestos.

Se sentó en el lado opuesto de la mesa, dejándome solo a propósito. Muy gracioso.

Los gritos en el pasillo parecían aumentarse.

— ¿Qué es todo ese ruido? — preguntó Cara, cubriéndose los oídos con las manos.

La puertas volvieron a abrirse, y la cafetería entera se quedó en silencio. Mikey y Kourtney se dirigían tranquilamente hasta su mesa.

El estómago se me revolvió repentinamente. Kourtney. Mikey.
¿Dónde mierda estaba Jack?

« ¡Te juro que si no corres ahora mismo, voy a matarte! »

Las palabras de Mikey resonaron dentro de mi cabeza.
Mierda, mierda, mierda.

Me levanté rápidamente de la mesa, buscando a Jack con la mirada, pero se me había adelantado.

— Hola, Tommy. — se detuvo frente a mí, sosteniendo una bandeja, y miró de reojo a la mesa de Mikey. Solté un suspiro. — ¿Te molesta si me siento contigo? Me gustaría seguir viviendo.

Negué con la cabeza, y Jack se sentó a mi izquierda. Tyler me miró de reojo, no muy contento con su presencia.

Me tomó un tiempo darme cuenta de que Cara y su amigo habían desaparecido, y Tyler tecleaba algo en su celular.

— Thomas. — dijo Tyler, haciendo que me volviera hacia él.
— Mierda. — Jack susurró y se puso de pie. Mikey se acercaba a la mesa. — Vámonos. — dijo, tomándome de la muñeca y arrastrándome lejos de ahí.

Tyler se puso de pie, intentando decir lo que tuviera que decirme. Miré la expresión en su rostro. Triste.

— Espera, maldita sea. — dije, dándome la vuelta, tratando de seguirle el paso a Jack.

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Cuándo ambos estuvimos dentro de su camioneta, Jack soltó un suspiro.

— ¿Qué mierda está pasando?
— Escucha. — dijo Jack, encendiendo la camioneta. — Kourtney es una perra. ¡Jamás me dijo que salía con Mikey! No sé cuándo pasó, ni porqué pasó, pero creo que simplemente me odia.

Me volví hacia él.

— Mierda, ¿Al menos te gustaba Kourtney?
— No. No sé porqué lo hice... — apartó la mirada. — Yo sólo... no lo sé.

Suspiré, quitándome los lentes oscuros de encima y tendiéndolos sobre su mano.

— ¿Qué pasa? — preguntó, y bajé de la camioneta.
— Eres un idiota.

boys. Where stories live. Discover now