Enséñame a ser hombre -Harry Y Tu.

Capítulo 12: Nos arrepentimos luego.

Pase mis brazos por su cuello y enterré los dedos en su sedoso cabello, el beso se profundizaba cada vez mas. Se que esto esta mal pero no puedo parar, me gusta como se sienten sus besos y sus labios.

-Harry hay que par... ahh -gemi cuando comenzó a besar mi cuello, primero dejaba besos húmedos pero luego comenzó a morder y chupar. Eso dejara marca.

-Shh, solo calla -dijo y siguió besando mi cuello.

Ante mano le pido perdón a Dios por este pecado que estoy cometiendo. Yo se que me quemaré en las fauces del infierno, estoy muy segura de ello pero a la verga, nos arrepentimos luego.

Dejo mi cuello para volver a mis labios, mordió levemente mi labio inferior y tiro de el. Me miro unos segundo y sonrió, sus hoyuelos aparecieron y me sentí derretir. Suspire y le Sonreí coqueta pero se borro cuando sentí una de sus manos acariciar mi cintura por debajo de mi camisa, trague seco, los nervios me atacaron. ¿En verdad iba a tener sexo con él?

Comenzó a subir mi camisa, lo ayude a que me la sacará. Miro mis senos un momento y volvió a mis labios. Una de sus manos subía por mi cintura, acariciando mi piel, paso entre mis senos. La hizo a un lado y mi pecho encajaba perfectamente en su mano, comenzó a masajearlo. Dejó mi boca y bajo por mi mejilla repartiendo besos, pasando por mi cuello, mi clavícula, llegando a su destino. Apreté las sábanas, puedo detenerlo pero no quiero, quiero que siga, lo estoy disfrutando.

Su boca atrapo me pezón, lo chupaba y mordía sin brusquedad. Paso a mi otro seno e hizo lo mismo. Dios me encantaba.

-Hay que parar -dije como pude.

-Hasta que no pongas resistencia física, no parare -dijo y siguió bajando sus besos por mi abdomen, ¿quiero que en realidad se detenga?

Tomó el borde de mi pantalón y lo bajo. Ahora estábamos parejos, ambos en ropa interior. Tape mi rostro enrojecido por la vergüenza que me daba, no es mi primera vez pero aún así sigo siendo penosa para estas cosas.

-Quita tus manos, eres preciosa así como estas -dijo tomando mis manos y quitandolas de mi cara.- Hahaha pareces un tomate.

-Callate Harry -volví a tapar mi cara.

-Callame -comenzó a reír y me contagio su risa.

Volvió a tomar posesión de mis labios, una de sus manos acariciaba mi muslo por fuera y poco a poco sus caricias lo iban recorriendo hasta llegar al medio de mis piernas. Sus dedos tocaban mi feminidad por encima de la tela de mi braga, y por cada segundo me mojaba más. Subió su mano y se abrió paso entre mi braga, sus dedos se paseaban perezosamente por mi resbaladiza vagina. Trague saliva.

-¿Aún quieres parar? -susurro en mi oído.

-N-no... ¡Ah! -gemi alto cuando su pulgar hacia círculos sobre mi clítoris. Uno de sus largos dedos entro en mi y arquee la espalda.

-Me gusta tu cara -dijo y mordió el lóbulo de mi oreja. Su pulgar se movía desenfrenado causando placer extremo en todo mi cuerpo. Me retorcía ante aquello.

-¡Dios! -abandono mis labios y fue bajando, mire hacia donde se dirigía y su boca tenia pintada una sonrisa perversa. Tomó el borde mis bragas y la fue bajando poco a poco hasta sacarla de mis piernas. Dejó un beso en mi monte venus. Cerré los ojos con fuerza y mordi mi labio al sentir su respiración chocar entre mis piernas.

-Es la primera vez que hago esto -dijo nervioso. No pareciera.

-Solo calla y termina de hacerlo -me sorprendí al decir eso.

-Y hace rato no querías -iba a objetar pero trague mis palabras cuando se lengua lamió toda mi feminidad.

-¡Ahh! -su lengua subía y bajaba, y su pulgar seguía en su trabajo. Mi respiración se entrecortaba, no hallaba que hacer. Mis manos fueron automáticamente a sus rizos. Su boca era una bendición. Y comencé a sentir un hormigueo en mi vientre y que cada vez se intensificaba.- Casi... Casi... -no siquiera podía hablar. Se separó de mi y lo mire con una ceja levantada.

-Calla. -si retiro y fue a su pantalón, al darse la vuelta mire a bóxer. Ayuda.- ¿Te gusta lo que ves?

-Estúpido -susurré. Antes de subir a la cama se quito su bóxer, no quise ver y dirigí mi mirada al techo. Abrió mis piernas y se posiciono entre ellas. Escuche como rompía el envoltorio del preservativo. Mi corazón comenzó a latir con desenfreno, espero y no se escuche su estruendoso sonido. Creo que me dará un ataque cardiaco.

-¿Lista? -asenti. Su glande punzaba en mi entrada, cerré los ojos cuán tomó mis caderas y entró de golpe.

-¡AH! ¡JODER! -me vale si me escuchan. Esa mierda dolió y demasiado.

-Disculpa -dijo y no se movió, habían pasado unos segundos y él nada aún.

-Harry, muevete -hable y trague saliva. Quito las manos de mi cadera y las entrelazo con las mías colocándolas sobre mi cabeza. Fue moviéndose poco a poco.- Más rápido.

-Lo que pidas -mis piernas se enrollaron en su cintura. Y toda la suavidad que había hace un momento se esfumó convirtiéndose  en una exquisita faena.

-Ah, ah -los gemidos salían sin permiso. Estaba disfrutando esto. Abrí los ojos y me encontré con un Harry sudoroso con sus ojos cerrados,  sus labios estaban entreabiertos y su cabello pegado a su frente. Se veía sexy, tal vez noto mi mirada pues abrió los ojos y conecto su mirada con la mía, me sonrió. Soltó mis manos y se sostuvo con los codos dejándolos a cada lado de mi cabeza. Mis manos fueron a su espalda y enterré mis uñas en esta. Bajo su rostro para besarme. Las embestidas eran rápidas y rudas.

En mi vientre volvieron todas esas pequeña cosquillas, rayos, esto se sentía de los mejor pero sabía que era un completo error.

Cada vez salia y entraba con fuerza, y me hacia alzar la voz. Mi cuerpo se empezó a entumecer, mis piernas temblaban y fue cuando senti aquellas explosiones en mi vientre y los espasmos en mi cuerpo que comenzó a temblar y no por qué hubiese frío. Harry se retiró y tomó mi cadera bombeando unas veces mas y note que sus músculos se tensaron.

-Ahhh -soltó en modo de relajación. Cayó con cuidado sobre mí.- Me gusto. -yo solo permanecí en silencio. El lo noto y se levantó para verme- ¿Qué sucede?

-No lo puedo creer -tape mi rostro. Por más que me gustara me sentía fatal.

-¿Te arrepientes? -salió de mi y se sentó en la cama.

-No... Bueno me gusto pero... -me interrumpió.

-Ya veo, bien si así lo quieres así será -se levantó, tomó su ropa fue al baño.

Si me había gustado, ¿Por qué me sentía así? Al rato el salio vestido y buscaba sus zapatos.

-Harry -me ignoro.- Harry mirame. -me levante y me puse mi braga junto con mi camisa rápidamente mientras el se ponía sus zapatos, me coloque en frente.- Que me mires.

-Ya dejaste todo claro que no quieres intentar nada, solo dejar que esto pase y ya, ahí murió -dijo frío. Eso me dolió. Yo si quería intentarlo pero me daba miedo terminar enamorada y que a la final todo se desplome.

-Harry solo entiendeme -dije dulce. No quiero molestarme ni que el se moleste.

-¿Qué quieres que entienda? Que según tu sientes lo mismo pero no quieres intentarlo, haha -me estaba hiriendo.

-Harry tengo miedo, es eso -dije por fin.

-Pero miedo, ¿a qué? -se levantó y tomó mi rostro.- Jamas te haría daño.

-Se que no pero temo a que lo intentemos y que a la final pase algo que nos arruine, y ¿cómo quedó yo? Estúpidamente enamorada -dije y sentí mis ojos húmedos.

-Solo por primera vez no escuches a tu cabeza, si no, a tu corazón -dijo y me sonrió. Mi cabeza mi dice que no pero mi corazón, me grita que lo intente, que luche por él sin importar nada pero el no entiende que en este juego podemos salir heridos. Me arriesgare, porque en verdad me gusta.

-Esta bien, lo intentare -dije para luego sentir sus labios contra los míos haciéndome perder la cordura con su beso.- Con una condición.

-¿Cuál?

-Después de dormir me ayudes a limpiar el apartamento.

-Hahaha esta bien pequeña, vamos a dormir -tomó mi mano y fuimos a la cama. Me recoste en su pecho, el acariciaba mi cabeza y poco a poco me fui quedado dormida.

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Aquí esta niñas. Voten y comenten que tal les pareció, si ando de humor luego quizás suba un capítulo.
Las amo♥♥