Enséñame a ser hombre -Harry Y Tu.

Capítulo 22: El comienzo de la mentira #2

Narra Harry:

Me senté en el comedor de la sala mientras ella servía la comida sobre los platos en la cocina. No sabía que iba a decir con exactitud. ¿Una mentira? Mierda, si le miento me sentiré peor, quizás se enoje conmigo por la verdad y en un futuro me perdone pero si no lo hace y no quiere volver a saber nada de mi. Esa idea me tenía angustiado y ansioso, mis manos estaba sudando y ni siquiera había calor.

Ella volvió con la comida ya servida y se sienta a mi lado.

- Bueno amor cuéntame cómo te fue, ¿Qué te dijo la psicóloga? - dijo para dar un bocado a la comida.

- Pues me dijo que prácticamente fui manipulado - me miró frunciendo el ceño.- Quiere decir que cuando niño mal intérprete mis sentimientos y la otra persona igual, "manipuló la situación" - dije haciendo comillas con los dedos.

- Y esa persona es... Louis.

- Si.

- Te manipuló para poder estar contigo porque le gustabas, ¿Eso me quieres decir? - asentí.

- Si pero no fue su intención simplemente como ya dije, fue una malinterpretación - me encogí de hombros.

- Vaya, pues fue una buena...

- ¿Por qué lo dices?

- Porque hasta ahora te das cuenta, imagínate que hubiese sido su intención, quizás ya estuvieran casados - se hecho a reír.

- Bueno a lo mejor - comencé a comer.

- ¿Cómo te fue con Louis? - joder, no estoy preparado para esa pregunta. Tu puedes Styles.

- No lo tomo bien, hasta se fue del país.

- ¡¿Qué?!

- Bueno no por la que paso, su abuela está mal de salud y se tuvo que ir pero no tomo bien que haya roto con el - mi respiración se comenzó agitar, por Dios que no lo noté. Podía escuchar mis ensordecedores latidos

- No me lo esperaba osea que ¿Ya eres libre? - se mordió el labio.

- Si, puedo andar con quién quiera - bromeó y me da un gran golpe en el brazo.

- Muy gracioso.

- Hahaha come si, no has comido desde la mañana.

- Está bien - siguió comiendo. Espero y ya se le haya olvidado el tema.- ¿Qué más te dijo? - suspiré.

- Pues que era un desgraciado - ¡Mentiroso de mierda! Me grito mi mente. Lo sé, eso soy.

- Uau que chico, y que más - sonrió mientras comía.

- Pues después que "discutimos" - volví hacer el mismo gesto.- Se levantó y se fue, perdí un amigo de años pero no quería estar sin ti tampoco.

- ¡Ay! - se levantó y se tiro sobre mi haciendo que la silla se balanceara y cajeros hacia atrás - Perdón.

- Mi espalda - me queje, realmente había dolido.

- Me emocione con eso que dijiste, disculpa - se levanto pero la volví a jalar por su mano para que quedara sobre mi.

- Es la verdad - si claro, como no.- Te amo - tome su nuca y acerque su boca a la mía.

Luego de terminar de comer dejamos los platos en el lavado y fuimos al cuarto.

- Oye - la llamé. Ella volteó.- Te ves mejor.

- Me siento mejor pero me duele aún este lado - dijo apuntando la parte izquierda de su rostro.- Siento que donde tengo los hilos me palpita.