Capítulo 14 - El brassier.

4.7K 484 115
                                    

—¡Bien! Vamos todos al parque de diversiones. —dijo Ho Seok y todos le préstamos atención.

Era viernes, un hermoso y genial viernes, ¿por qué no disfrutarlo al máximo?

—Me parece buenísima idea. ¿Quién tiene libre hoy? —habló enérgicamente Tae Hyung.

Entonces, yo levanté la mano, y todos lo hicieron después de mí, incluyendo a Yoon Gi.

—Bien, entonces vayamos. —habló nuevamente el alíen.

Bien, uno: me parecía muy extraño que Jung Kook y Tae Hyung estuvieran en el mismo lugar sin discutir o pelear, estaban en plena armonía. Dos: no sé porque mierda ahora yo estoy rodeada de siete hermosos chicos, ¿cómo es qué llegué a esto?

—____, me cae bien. ____ debería pasar más tiempo con nosotros, ¿no creen? —habló repentinamente Nam Joon.

Pude ver las expresiones de Jung Kook y Tae Hyung en ese preciso instante, eran tan divertidas.

—No es mala idea. —al fín hablé y Jung Kook negó con la cabeza.

—¿Por qué no? —dijo Seok Jin, que se había percatado de la reacción de Jung Kook.

Jung Kook vaciló un poco con sus ojos, tratando de formular una respuesta y Yoon Gi, río por lo bajo.

—Está más que claro que Kook la quiere solo para él. —ahora Yoon Gi estaba acercándose a mí después de lo dicho y pasó su brazo alrededor de mis hombros—. Pero, ¿por qué?

Me sonroje, y no por el tacto de Yoon Gi si no por sus palabras. Yo, tenía más que clara la respuesta.

—Oh, ____ es un tomate. —al fin habló el sonriente Ji Min, tomando mis mejillas y aplastandolas mientras yo lo miraba.

—Ahora es un pez rojo. —murmuró Ho Seok.

Y yo sonreí, puede que la situación alla sido incómoda, pero gracias al comentario de Ho Seok, todo volvió a ser normal.

***

Las clases se dieron por acabadas y yo me encontraba en la puerta del establecimiento con Yoon Gi, Tae Hyung, Jung Kook y Ji Min, esperando por el resto.

—Chicos, creo que iré a buscar a los chicos, estan demorando mucho. ¿Quién va conmigo? —dijo Jung Kook mirándonos.

Tae Hyung y Ji Min se miraron y levantaron la mano al mismo tiempo, Jung Kook sonrió y le hizo una seña para que fueran con él y yo, me quedé sola con Yoon Gi. Él suspiró y apoyó su espalda e pie derecho en la pared de la entrada, con ambas manos en sus bolsillos. No le presté mucha atención hasta que habló.

—Siempre me parecio intrigante saber que es lo que los chicos veían tanto en tí. —cerró sus ojos y tiró su cabeza hacía atrás.

—¿Sí? —me volteé, mirándolo con detención.

—Y aún no lo entiendo muy bien, pero, por lo que entendí tienes algo muy especial. —sonrió sin inmutarse.

Dios, se veía jodidamente guapo de esa manera, es como que Yoon Gi supiera precisamente, que hacer para que una chica perdiera el control frente a él. Obviamente, yo no lo haría.

—¿Sí? ¿qué es? —reí y él lamió sus labios y tragó saliva. Podía ver como su manzana se movía de arriba a abajo mientras tragaba.

—Que eres tú ____. —soltó y abrió sus ojos, mirándome.

No lo entendí, ¿a qué se refería con eso? Estaba apuntó de abrir la boca para preguntar, cuando llegaron todos los chicos con una bolsa de refrescos. Cada uno escogió el que quería y así nos fuimos al parque de diversiones.

***

Llegamos al parque de diversiones, riéndonos y hablando millones de estupideces, hacía un precioso día, eso sí, con muchísimo calor. Pero de todas formas disfrutamos la tarde.

Cuando salimos del parque de diversiones, ya eran eso de las 6pm y aún hacía muchísimo calor, entonces, Nam Joon se me acercó.

—Mira mí mochila, saca cuantas puedas, escondelas y prepárate, daré una señal de “guerra” luego. —susurró a mí oído.

¿Qué? No entendía nada, entoces hice caso a su petición y abrí su mochila. Estaba llena de bombitas de agua. Reí por lo bajo y tomé cuantas puede, metiendolas en una bolsa que tenía. Cerré su mochila y Nam Joon alzó su dedo pulgar en signo de “like” y sonriendo fué con los demás chicos.

—¡Qué empiece la guerra! —gritó Nam Joon.

Y allí fué cuando todos comenzaron a tirrar dichas bombitas. Recibí muchas y tiré muchas, diría que cada uno de los chicos recibió una de mis bombitas en las cabeza.

Cuando terminamos, estábamos todos empapados y yo, podía ver claramente como las poleras de todos estaban apegadas a sus cuerpos. ¿Qué mejor escena para una chica?

Entonces, todos los chicos me miraron, con atención y yo, ladee la cabeza. Luego de unos segundos, entendí, mejor dicho, cuando ví ése leve sonrojo en la cara de todos los chicos. Rápidamente, cubrí la zona de mis pechos con mis manos y Jung Kook, se me acercó rápidamente, colocándose frente a mí.

—No miren a ____. —se cruzó de brazos y todos desviaron la mirada comenzaron a caminar a quién sabe donde—. ¿Traes algo para cambiarte? —murmuró sin voltearse.

—No.

Entonces, el fué rápidamente por su mochila, sacó su poleron negro y me lo entregó. Lo tomé con rapidez y me lo puse, olía tan bien, olía a él.

—¿Listo?

Sonreí y me coloqué frente a él haciendo una “v” con mis manos a un costado de mí ojo izquierdo.

—Que linda. —soltó derrepente y me colocó el gorro del poleron.

Oh, no podía ver.

Entonces tomó mí mano y comenzó a caminar. ¿Qué digo mano? Me quedaba grande y la tela cubrí toda mi mano. Nos incorporamos con el grupo y luego de eso, nos fuímos a casa.

Mi mascota; JJK (en edición) Où les histoires vivent. Découvrez maintenant