~~ Cacería de Brujas ~~ [Billdip AU]

XI. Volo

Igual que la mañana anterior, salí de la casa de mis tíos justo salir el alba.

- No te vayas hermano, ¿Es muy necesario irte?- preguntó mi hermana con ojos llorosos, jalando de mi manga.

- No me estoy llendo para toda la vida- le dije.

- Pues parece. Ya casi olvido tu cara- esas palabras fueron como mil puñaladas en mi pecho.

- No seas así, Mabel. Me harás sentir culpable- le dije y ella mostró una cara más triste.

- Perdóname, no era mi intención- susurró- Sólo prométeme que vendrás pronto, es lo único que te pido

- Te lo prometo- le dije y besé su frente- Cuídate mucho

- Igual tú

No me despedí de mis tíos, pues no tenía ganas. Este era uno de esos días en que los detestaba más de lo normal.

Salí de la casa y me dirigí a los establos, donde estaba Bastian ya preparado. Él relincheó al verme, quizá con alegría.

Salimos del pueblo a trote lento, observando como estaban desérticos los alrededores a causa de las tempranas horas. Y no los culpo, yo apenas y podía ver con la nula luz del día. A parte de que el frío era infernal.

Por fin salí del pueblo, y los sonidos del bosque embargaron mis oídos.

Mi mente vagó hacia hace unas horas. Dormí abrazado al demonio toda la noche restante, y dormí como nunca.

Dormí cálidamente, y no pasé frío como siempre. Me mantuve abrazado a Bill como si de una almohada se tratase: me recosté en su pecho y abrace su torso sin yo darme cuenta.

Él me despertó cuando el sol estaba a punto de salir.

Empujó mis hombros levemente y paró hasta que escuchó mis quejidos.

- ¿Bill?- susurré al verlo. En un principio, no reconocí el porqué estaba aquí. Sin embargo, recordé lo que había pasado entre él y yo en la noche, y al instante me sonrojé.

- Sí, aquí estoy- me susurró. Acarició levemente mi mejilla y besó mi frente, encima de mi cabello.

Mi corazón comenzó a latir con frenesí y él se rió.

- Cálmate, te dará un maldito infarto- me susurró, entre leves risas- Ya te acostumbraras

Me acurruqué al lado de él, sin abrazarlo.

- ¿Qué pasará si esto no funciona? ¿Si lo empeora?- pregunté.

- Volveremos a como estuvimos, y olvidaremos que esto pasó... te haré olvidar que pasó- respondió- Y haré que me quiten los recuerdos. Así, no llegará a ser incómodo

- Esta bien- susurré y nos quedamos en un amable silencio.

Estuve a punto de dormirme de nueva cuenta, pero Bill habló antes de de que yo fuera capaz de hacerlo.

- Te veré en casa, Dipper- me susurró y me besó la nariz.

Sólo bastó un parpadeo de mi parte para que desapareciera. Me paré al instante, murmurando su nombre. Sin embargo, ya se había ido como por arte de magia.