If You | VK (Editando)

Prólogo

Todo comenzó en diciembre cuando se daba inicio al invierno en Corea.

Las calles se teñían completamente de blanco, debido a la intensa nieve que venía acumulándose por el paso de los días, muy al contraste con el intenso azul de mar. Creando así, una escena digna de admiración.

Mi época favorita sin dudarlo.

Sin embargo, a partir de ese momento se convertiría en una estación que llegaría a cambiar mi mecanizada y estructurada vida por una caótica hermosa.

Para cualquiera que me conozca, no era secreto que a temprana edad comencé a tener "cierta" orientación sexual que no era la perteneciente a lo que la sociedad señaliza como éticamente correcta.

En la etapa de la pubertad, los padres ven dichas preferencias como sólo un juego de experimentación pasajera, es cómo cuando los adultos dicen "Dejen tranquilo al niño, ya se le va a pasar", "Son cosas de la edad, no le des tanta importancia". Cuando la realidad no es para nada así e incluso, es mucho más compleja.

Ser gay a los quince, es ser señalado con el dedo, es ser despreciado por tus compañeros hombres y codiciados por las mujeres. ¡Menuda mierda!...

Nada fácil. Por eso no me quedaba más opción que intentar sobrevivir hasta la mayoría de edad. Acabar la escuela media e intentar ser alguien independiente.

A mí, la adultez me llegó de golpe.

Siempre tuve todo lo que quise. Dinero sin restricción, despreocupaciones, padres ausentes por trabajo... En fin, todo se traducía en libertinaje.

Solía ser el típico chico mimado por los empleados de la casa. Con amigos a mi lado sólo por dinero y otros realmente sinceros que, aún conservo .

Joy era mi mejor amiga, de aquellas que eran capaces de defenderte con uñas y dientes, mi gran confidente desde los cincos años, prácticamente desde que tengo conciencia, siempre juntos uno al lado del otro, nunca nos separábamos.

Éramos el complemento perfecto para los demás. Solían decir que seríamos una gran pareja cuando creciéramos y si soy sincero, en algún momento lo pensamos así, pero con el paso de los años no tardamos en darnos cuenta de que sería todo lo contrario.

A eso de los doce, Joy se enamoró por primera vez de un chico, y tres años después, terminé por confesar abiertamente mi homosexualidad. Desde ese día, las cosas se tornaron difíciles.

Mis padres que mantenían distancia debido al trabajo. Reducían a nada el contacto. Les avergonzaba que su único hijo varón estuviera fuera del estándar ideal.

Si, hago hincapié en la palabra varón porque tengo una hermana mayor. Se llama Juhjun y es el gran orgullo de la familia. Todo lo que yo jamás seré.

No fue hasta la noche de graduación que todo dio un giro inesperado, habíamos bebido tanto que cometimos el peor error de nuestras vidas, o al menos eso creíamos.

La razón tras la borrachera no era más que olvidar. Joy pasaba por una gran desilusión amorosa que finalmente, sería la primera y la última que tendría.

Fue así como en un pestañear de ojos, terminamos en la piscina de la casa de Jackson -uno de mis grandes amigos-, quien había dejado que continuase la fiesta de los graduados en su casa.

Gran error. Una cosa llevo a la otra, y entre tanto jugueteo, terminamos sin podernos los pies.

Como pude me las arreglé para llevar a Joy hasta una habitación. Se suponía que dormiríamos juntos, como tantas veces antes pero mi amiga estaba tan inconsolablemente triste al enterarse de que él idiota de su novio le había sido infiel con media escuela, que... bueno, ahí estaba yo.