Usualmente no soy del tipo de chico que se pone nervioso con frecuencia, es más, a pesar de ser algo tímido soy bastante seguro en la mayoría de los ámbitos, excepto en el amoroso.
Estoy sentado junto a Haneul en el sofá, ella está concentrada en su dibujo animado favorito mientras come cereal con yogurt. Lleva puesta su pijama de osito de una sola pieza y el cabello semi ondulado al natural. Es tan hermosa, que me llena de orgullo ser su padre.
Tras terminar de comer, deposita la taza sobre la mesa del comedor y vuelve con rapidez hasta acomodarse en el sofá junto a mi, no sin antes depositar un besito en en mi mejilla. —Te amo papi. —sonríe al decirlo, acomodándose el cabello para poder ver mejor. Y cerca de 30 minutos después, se entrega al fin a los brazos de morfeo con su cuerpo recostado sobre mi costado.
Intento de manera silenciosa y cuidadosa levantarme para poder tomarla e ir a su habitación a acostarla. Toda una travesía si consideramos que cada vez que intento moverla cuando está durmiendo, suele disparar manotazos y patadas para todos lados.
Al acomodarla en su cama, la cubro lo suficiente para resguardarla del frío de la temporada. Notando como todos los días, lo rápido que crece y lo veloz que es el tiempo. Sacudo los recuerdos y apago la luz para luego salir del lugar, dejando la puerta semi abierta para su tranquilidad.
Me dirijo hasta la cocina en búsqueda de mi teléfono, desenchufándolo para volver a acomodarme en el sofá. Y cuando reviso las notificaciones que me han llegado, me encuentro con la sorpresa de qué hay una de Taehyung en el buzón de entrada.
Kim: <<Bonito, ¿Ya puedo ir o aún está despierta, Hanie?>> -22:24 p.m-
Jungkookie ♡: <<Ya puedes>> -22:40 p.m-
Kim: <<Llego en menos de lo que piensas, espera por mi 😘>> -22:43 p.m-
—¡Aish! estúpido Kim, estúpido Jeon. —me regaño mentalmente al ser tan frío para responder. Incluso me sonrojo de paso sin siquiera tenerlo frente a mi.
Sin encontrar mejor opción para calmar estos nervios que, concentrarme en la imagen que plasma el televisor. Una propaganda de bebida gaseosa, con osos polares que sonríen animosamente tras perseguir una botella... aburrido.
Para mi suerte, logro dar con una película más que interesante e intento concentrarme en ella porque no es primera vez que la veo.
Una chica decide tomar venganza por sus propias manos contra un sujeto pedófilo, lo engaña y se infiltra aparentando ser una menor de edad. Y una vez logra llegar hasta el hogar del sujeto, inicia la tortura hasta llevarlo a la muerte.
Mi teléfono suena justo cuando siento que el cansancio me dominará, vibrando con un par de toques como si demandara algo de atención.
Kim: <<Estoy afuera ahora, Jeon>> -23:13 p.m-
Jungkookie ♡: <<No tardo, espérame un momento >> -23:14 p.m-
Me apresuro hasta abrir la puerta pero en el momento que lo hago, me golpea el frío viento de una manera feroz, de esa que te congela cada fibra del cuerpo.
Salgo de inmediato. Encontrándome con la imagen sexy de un hombre de cabello castaño apoyado en un costado de su auto.
Si alguien pudiese asegurar que es capaz de dejar de respirar por unos segundos, le creería a tontas y ciegas, porque es exactamente lo que me acaba de suceder.
Carraspeo mi garganta y abro la reja que nos divide, acercándome para saludar pero manteniendo siempre una distancia prudente.
Hace un gesto con su belfo, luego saca las manos de sus bolsillos y todo pasa en un abrir y cerrar de ojos. Posiciona su mano derecha sobre la parte baja de mi espalda y en un movimiento rápido, me aproxima hasta que nuestros cuerpos entran en contacto.
Sus labios se encuentran con los míos de una forma suave y sutil. Una pequeña pero intensa presión, para el deleite de ambos.
Tras separarnos, su sonrisa se ensancha con coquearía. Sin apartar su mirada de la mía, siendo bastante consiente de que me acaba de dejar perplejo y eso, le encanta. —Ahora sí, hola bonito. ¿Entramos o qué?.
—Uhmm. —asiento como él idiota en el que me convertido desde que lo conocí.
Volteo mi cuerpo y camino hasta entrar a mi hogar mientras él me sigue muy cerca. Una invitación discreta para un extraño momento de mi vida.
Ya en el interior, deja su abrigo en el gran perchero de entrada mientras lo invito a tomar asiento en el sofá.
—No es la gran cosa pero vivimos bien. —comento tras notar como observa mi hogar.
Dirige su mirada hacia mi y sonríe ladino antes de responder. —No necesitas más, es perfecta. Mi departamento es un asco. —suelta una carcajada. —Es muy grande, tanto que podría vivir una familia pero es tan vacío que da algo de pena, en cambio tu tienes lo que se puede llamar un hogar aquí...
—Es pequeña pero creo que gracias a que Haneul llena todos los rincones, se siente mucho más cálida. —agrego mientras me acomodo el cabello. —¿Qué quieres para beber?, ¿Vino?, ¿Tal vez Jugo o gaseosa? o quizás...
—Café. —se carcajea ante mi sorpresa. —Necesito algo para calentar el cuerpo. —indica tras tomar asiento. —Además estoy manejando, no sería muy prudente beber alcohol en esas circunstancias.
Como me gustaría ser yo quien...
Niego, y sacudo mi cabeza para disipar aquellos pensamientos fuera de lugar. —¡Bien!. —alzo la voz para luego ir a la cocina y prepararle un café de grano.
Preparo dos tazas del delicioso café para acompañarlo con un mix de mis galletas favoritas. Las mismas que Taehyung asalta tras acomodarme a su lado.
—Y bien, ¿Qué quieres hacer?. —inquiero cuando termina de beber el primer sorbo.
Su mirada se conecta con la mía y asoma una gran y perfecta sonrisa, de esas que erizan la piel, sin embargo, a pesar de volverme así de susceptible con sus actos, soy capaz de responder a su atrevimiento.
Es por eso que muerdo de forma sutil mi labio inferior mientras repaso la misma zona con la punta de la lengua, logrando que una de sus cejas se eleve en respuesta cuando logra al fin leer entre líneas.
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//Nota Antigua
Capítulo para gian_genl ... Mi película favorita es "Mononoke Hime". Mucho pero mucho mucho Love del bueno, sé que siempre comentas mi trabajo así que muy agradecida de contar con vocé 😘
