Troubles © [#1]

capitulo 11

Mi chaqueta voló por los aires en un intento de tenerlo más cerca, Jeff mantenía una mano en mi trasero para que no cayera mientras la otra se paseaba con libertad bajo mi camiseta, mis pulmones quemaban buscando un poco de oxígeno, Jeff era muy hábil en ofrecer distracciones, lo único que tenía en mente es la necesidad de que no se detuviera.

- Nena... vamos a nadar un poco antes de que no pueda detenerme...

Separó sus labios de los míos paseando por mi cuello, estaba jadeante igual que él.

- Mi bañador...

Susurré.

- No creo que quieras llegar a la orilla después de lo que vieron.

- No... bájame.

Con cuidado me depositó en el piso sin soltar mi cintura, las piernas me temblaban y él era consciente de eso.

- ¿te enojaste?

- No... -sonreí de lado, después de tantos esfuerzos caí en sus redes-. Yo quise hacerlo.

- Fue una buena decisión, ahora seguirás mis sabios consejos y veras como te relajas ¿estas menos tensa no es así? Imagina como sería si te llevara a la cama –sonriendo-. Sígueme.

- Me siento menos tensa... es verdad – caminando con él hacia las escaleras del quincho que daban acceso directo a las aguas-. ¿Qué piensas hacer?

- Quitarme toda la ropa –comenzando a desnudarse-. Y meterme, el agua está caliente y el clima frío, con este chapuzón créeme que dormirás como un bebé.

- Jeff no te quites la ropa por favor –volteándome-. Es... incomodo.

- ¿Nunca has visto a un chico en ropa interior? ¿Qué hay de Christof? Pasaste la noche con él.

Su voz se escuchaba más grave de lo normal.

- Dormimos en la misma cama pero nada más, cuando subí después de hablar contigo ya estaba dormido...

- Me estas mintiendo –ahora se escuchaba divertido-. Dime que no hizo eso... teniéndote en la misma cama, dispuesta a todo... es un idiota, uno de primera.

Di la vuelta para enfrentarlo, no pude emitir palabras en cuanto lo vi quitarse la camiseta, Jeff solo vestía un bóxer negro ajustado que no dejaba nada a la imaginación, se me secaba la boca de tan solo pensar en las posibilidades.

- ¿te gusta lo que ves?

Su sonrisa arrogante hizo revolotear las mariposas en mi estómago, hoy estaba demasiado sensible... eso debe ser.

- No pienso quitarme la ropa.

Dije para desviar el tema.

- ¿vas a hacer que me congele aquí? – cargando su peso en una de sus caderas-. El frio hace que se me baje la erección, bien pensado Cass.