14

67 9 0
                                    

"Oh, Señorita Creyente,
mi bella durmiente.
Tu mente retorcida es como
la nieve en el camino.
Tus hombros temblorosos prueban que hace más frío
Dentro de tu cabeza que en
las peores horas de invierno".

-"Mis Believer", Twenty one Pilots

"Estamos aquí para celebrar que no somos unos miedosos" se recordó.
Cerró los ojos con fuerza. Esto no podía estar pasando, ella no se refería a esta situación con lo de "miedosos".
Pero entonces allí iba él, encaminándose con rapidez a la salida del baño con una mano tras su espalda, escondiendo su arma.
Desde el salón dónde él y Kay estaban cenando hace tan sólo diez minutos, ahora se escuchaban gritos horrorizados y disparos.
Él sabía quienes eran.  Él lo sabía muy bien. Y no lo iba a permitir.

Al llegar al lugar se ocultó tras el mostrador, y a su lado se encontraba una morena sollozando, abrazando sus rodillas totalmente asustada.
Cuando ella vio que él sacaba su arma él le hizo una seña para que mantuviera el silencio. Ella asintió.
Entonces él asomó su cabeza para poder ver a sus atacantes con claridad, por su puesto que eran los chicos de Rick, ¿Quienes más sino?
>>No somos unos miedosos ¿Me entiendes?<< volvió a escuchar su voz como un susurro lejano, la buscó con la mirada, con desesperación, y allí estaba. Agachada tras una mesa, con las manos tapando sus oídos.
Justo como aquella noche...

Aquellos imbeciles comenzaron a disparar hacía el techo, oh el techo de espejos.

¡Demonios, no! Ella ahora tenía las manos sobre su cabeza e intentaba meterse debajo de la mesa cuando sus ojos se encontraron. Y él esperaba que ella leyera sus labios "No te muevas de ahí" le dijo a lo que ella sólo tragó saliva para  luego asentir con lentitud aunque sus hombros temblaban.

Entonces, la verdadera guerra comenzó. No fue difícil ahuyentarlos, estos eran novatos, y luego de unos cuantos disparos en su dirección, logró que un pedazo de espejo le cayera en la cara a uno.
Todos los otros entraron en pánico, huyeron del lugar dejando una ola de jadeos y llantos ahogados pertenecientes a los comensales, en su mayoría, adolescentes.
Las sirenas no tardaron en escucharse, Kaydence corrió hacía Dean cuando esos delincuentes desaparecieron, él sólo la abrazó, y antes de sacarla de allí, antes que la policía llegara, le dio una última mirada de advertencia a la linda morena que había presenciado  su acto de heroísmo. Ella asintió.

0-0

-Aún no lo creo- murmuró Kaydence mientras caminaban por las calurosas calles deCalifornia- Ellos solo, ingresaron y comenzaron a gritar que querían todo el dinero que tuviéramos y...y, uh tu te habías ido al baño entonces yo sólo...

-¿Tuviste miedo?-preguntó él con burla, ella le dio un codazo- Tranquila Kay, mantuviste la calma y no saliste corriendo despavorida hacía mí.- rodeó sus hombros y la empujaba suavemente mientras caminaban- Eso hubiera arruinado el plan.

Ella lo miró con una ceja alzada

-¿Así que ese era tu plan?-preguntó divertida- ¿Disparar a quemarropa hasta herir a alguno de esos tipos?

Él hizo una mueca. No esperaba que ella jamás tuviera que verlo...de esa manera.

-Supongo que nunca tienes un plan en concreto. Sólo es una idea en principio y terminas...improvisando.

Ella sólo asintió.

-¿Y ahora a dónde vamos?-preguntó y él sonrió. Era su turno de elegir.

0-0

Ashton se subió a una silla para llamar la atención de los jóvenes alrededor de la mesa de pool, todos incluyendo a Kaydence y Dean lo miraron con atención.
-Muy bien, amigos míos. Mi amigo Dean, aquí presente- lo señaló y éste sonrió algo incómodo- Me estuvo contando sobre la traumante situación qué pasó con su chica hace tan sólo dos horas- todos los muchachos de Dean los miraron divertidos, cosa que sólo incomodó más a Dean- Así que haremos un juego en honor a ellos. Todos van a beber un shot de esta bandeja por cada miedo que tengan ¿De acuerdo? No intenten hacerse los machos de pecho peludo, todos tenemos demonios. ¡Y los quiero ver ahogándolos en alcohol!

Todos vitorearon y gritaron de acuerdo con el juego impuesto.
Ashton dejó la bandeja en la mesa de pool y todos se acercaron a tomar uno y luego otro y otro de inmediato.
Kaydence dió un paso hacía atrás, recelosa.

-Hey- le dijo una voz amable a sus espladas. Era Jay-Jay, uno de los amigos de Dean- ¿Piensas ser una miedosa al no demostrar que si eres una miedosa?

Ella alzó ambas cejas con sorpresa y lanzó una corta risa.  Es decir, por supuesto que no quería que todos esos hombres fuertes y rudos supieran que ella no era más que una chica acomplejada y plástica.
Ella se sentía tan fría, tan vacía.
El muchacho se acercó a ella y le susurró al oído.

-Todos tenemos miedos, Kay-kay. Esto no es Hollywood, nadie te juzgará.

Al demonio, lo haría. Se acercó y tomó varios shots mientras contaba mentalmente sus complejos y miedos.

1 shot (el rechazo).2 shots(sobredosis). 3 shots (la soledad) 4 (la vejez) 5shots (bulimia nerviosa) 6 shots (Kaydence Rose Young)

-Wowow- le dijo Dean mientras le quitaba el séptimo shot de las manos- Creo estar seguro que no eres una chica miedosa Ky- la miró ladeando la cabeza- Los complejos no cuentan.

-Oye, Dean- le dijo Mike del otro extremo de la mesa- ¿No pensé que para el "Gran G" una pequeña balacera fuera traumante.-luego rió cómo estupido.
El chico estaba ebrio, Dean sólo le enseñó el dedo medio y se llevó a Ky de la mano hasta la barra.

-¿Crees poder aguantar unos cuantos tragos más?-preguntó amable- Necesito compañía, ya sabes... es aburrido beber en soledad.

Kaydence sonrió.

James DeanWhere stories live. Discover now