10. La busqueda.

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Cole.

El tiempo pasaba lento, los segundos parecían minutos y los minutos horas. Parecía todo un abismo, una tierra movediza en donde cada vez nos íbamos hundiendo más en la miseria. Ha pasado un mes y no hay ni un rastro de Camila, nadie sabe nada, todo el pueblo está un poco más desesperado y los periódicos locales no paran de publicar su rostro en la sección principal con un enorme letrero de su nombre.

La vida parece haber quedado estancada, yo me siento estancado y no puedo parar de llorar y buscarla por todos lados; con sus padres incluso hemos salido a buscarla en pueblos cercanos, la policía sigue investigando a los sospechosos. Melissa Hopper se ha vuelto en una gran ayuda para la búsqueda de Camila, no ha parado de buscarla junto a mi.

Me siento impotente, con demasiada rabia mientras escucho hablar al director de la escuela en una búsqueda que se hará para buscar a Camila junto a algunos policías.

—Así que, quien guste unirse a la búsqueda favor de ir a inscribirse en la hoja que estará en la dirección. Sin más que decir, pueden seguir su horario escolar, buen día—todos aplauden y lentamente el director baja del presidium. Yo me levanto rápidamente para dirigirme a la cafetería por algo de beber.

Mientras camino a la oficina del director, alguien choca conmigo y yo tiro los papeles de esa persona, volteó rápidamente y me encuentro con Melissa quien está recogiendo rápidamente los papeles. Me agacho junto a ella para ayudarla a recoger los papeles.

—Lo siento, Cole. No-no me fijé, iba un poco distraída.

Continuó juntando los papeles—No te disculpes, Melissa. Fue mi culpa.
Camino hacia donde está una carpeta que deja caer demasiadas hojas, tomó unas cuantas y no puedo evitar leer.

Cole Sprouse tuvo problemas con Brooklyn Samuels.
Brooklyn Samuels // Antecedentes penales. = arrestos por manejo de drogas, presunto miembro y/o traficante de las mismas. Arresto por conducir en estado de ebriedad, intento de robo y asalto en tiendas departamentales.
Brooklyn, posible sospechoso.
Causas:
Presenta rara conducta, posibles problemas psicológicos. Conductas fuera de lo común con Camila, incluso la llegaba a hostigar.

Un par de fotografías de Brooklyn aparecen en la hoja, hay letras en mayúsculas subrayadas que estoy apunto de leer. Las fotografías son de Brooklyn saliendo de un especie de almacén. No puedo terminar de leer porque alguien me arrebata la hoja, miro con confusión a Melissa quien dice rápidamente—Me tengo que ir, Cole. Te veo más tarde.

Camina rápidamente pero yo la sigo, Melissa tiene algo en esas hojas, son notas demasiado importantes y relevantes. La tomó del hombro y ella suspira asustada.

—¿Qué fue eso, Melissa? Sé que son notas sobre el caso de Camila, ¿sabes algo? ¿Por qué no me has querido contar nada?

Mi voz suena desesperada y dudo por un momento que Melissa quiera decirme algo. Ella muerde fuertemente su labio tembloroso y yo siento que mi corazón estallara si no me dice de que demonios eran esas hojas.

—Cole... Solo, solo son simples rayones y notas absurdas que escribo—Dice con voz baja, pero yo sé que no es verdad.

—Melissa, no sabes cuanto extraño a Camila—mi voz tembló— y su familia la extraña aún más. Yo-yo sé que no hay tanta confianza entre nosotros, quizás me odies pero esto no es por mi, sino por ella. Por favor, lo que sea que sepas dímelo.

Melissa me mira dudosa, mira a su alrededor y toma mi mano, me dirige a lo que parece ser el campo de la escuela. Llegamos a una parte solitaria, cerca a los basureros y ella suelta mi mano, me mira y suspira. Muerde su labio dudando y finalmente emite un sonido ronco para después hablar.

—Cuando Camila desapareció yo comencé a buscar sospechosos, nada serio, únicamente quería encontrarla como todo el mundo—suspira—pero mi mente no dejaba de divagar en su caso y conforme pasaba el tiempo comenzaba a desesperarme porque los policías no tenían pistas de nadie.
»Comencé a hacer notas sobre los posibles sospechosos, no me juzgues. Siempre he sido fan de programas y libros de desapariciones. Entonces yo hice una lista de personas que me parecían sospechosas, cercanas a ella y algunas no tanto. Investigue sobre ellos, me adentre más en el caso con el tiempo. Yo, en una parte me obsesione con el caso; siempre he querido ser detective y dije "oh, Melissa, aquí tienes una oportunidad"—la miré con el ceño fruncido está un poco zafada—Incluso llegue a sospechar de ti, Cole; por eso me acerque a ti, pero sé que en realidad tú eres bueno y amas y proteges a Camila de todo, poco a poco mi lista fue disminuyendo hasta llegar a la única persona de ella que aún no me daba buena espina.

—Brooklyn Samuels—deduje, ella asintió.

—Exactamente. Un día, decidí seguir a Brooklyn, no sé ni por qué lo hice. Él camino hacia su auto y yo tomé un taxi. Nos llevo hasta las afueras del pueblo, cerca del bosque...

—Pero ahí ya hemos buscado—la interrumpí, ella negó.

—Solo en lo más superficial.  Me dio un poco de miedo entrar pero al final lo hice, llevaba una pequeña navaja que siempre cargo en mi mochila y pensé que nada me pasaría con ella. Brooklyn comenzó a manejar más lento y se estacionó en una choza abandonada. Para ese momento, yo ya había bajado del taxi porque sabía que lo vería y sospecharía. Brooklyn comenzó a dar zancadas hacia el bosque, adentrándose cada vez más.
»Comencé a sentirme aterrada. Cada vez estábamos más lejos e incluso lo hice. El miedo me gano, Cole. Me fui de ahí pero Brooklyn seguía caminando con seguridad. Estoy segura de que él tiene a Camila, Cole. Él la tiene ahí y  la búsqueda será en dos días. Brooklyn se enterará y se la llevará. Perderemos todo rastro de ella.

—Tenemos que ser más rápidos, tenemos que ir por ella, Melissa. Tengo que-tengo que decirle a sus padres—ella niega rápidamente.

—Brooklyn no es tonto, Cole. Se dará cuenta, vi a unos tipos rondar la estación de policía ¿Sabes quienes eran? Los amigos de Brooklyn, estoy segura de que le avisan todos los movimientos de la policía y si les dices a los padres de Camila, ellos irán a la policía sin pensarlo.

No sabía que decir. Estaba en shock, mi cabeza punzaba y sin pensarlo asentí. No dejare escapar el único que rastro que tengo de Camila.

—Pasó por ti a las 5.

No without you, Cole.Where stories live. Discover now