02

7K 1K 136
                                    

Tras huir de la casa de los Jeon, Hoseok corrió a su apartamento y se encerró en su habitación hasta pasada las cinco de la tarde. Se dedicó a escuchar música, mirar videos tontos en internet y pensar por qué el mundo lo odiaba. Ah, y también en el delicioso olor a flores de Jeon Taehyung.

No era capaz de hacerse a la idea de que el omega recién presentado quizá era su pareja destinada. Jungkook lo mataría si se enteraba, y posiblemente Jimin también lo intentaría. Uno por ser el hermano mayor y otro por ser el mejor amigo. Tae estaba protegido por todos al ser el menor.

El alfa suspiró y hundió su rostro en la almohada, soltando un grito frustrado cuando la imagen de Tae en ese pijama tan adorable azotó su mente. Era un omega precioso. No cabía duda de que con los años el menor levantaría cada vez más suspiros por su belleza, pero él no podía permitirse suspirar por el chico. Simplemente no.

Sintió unos golpes contra la puerta y tras pensárselo unos segundos murmuró un «adelante» mientras se reacomodaba en la cama. Yoongi entró a su habitación y tras cerrar la puerta se tumbó junto a él en la cama.

—Jungkook está cabreado contigo.

Hoseok palideció y miró al otro alfa con miedo—. ¡¿Se lo has dicho?! ¡Pensaba que éramos amigos!

—No se lo he dicho, imbécil —gruñó el hombre con el ceño fruncido—. Está cabreado porque te largaste nada más llegar. Se supone que teníamos que hacer el trabajo y tú te fuiste sin dar explicaciones.

—Te la di a ti —replicó tontamente y Yoongi alzó una ceja.

—¿Esperabas que dijese a los chicos que huiste porque Taehyung puede ser tu omega? Muy lógico, sí —comentó burlón—. Teniendo en cuenta cómo has reaccionado ante la simple idea de que Jungkook lo sepa, dudo que decirles por qué te fuiste fuera una buena idea.

—Estoy asustado —confesó Hoseok—. Es un niño y el hermano de mi mejor amigo, ¿crees que es fácil asimilar que quizá Tae sea mi pareja destinada? Se acaba de presentar y prácticamente lo he visto crecer, no puedo hacerme a la idea de que él sea mi omega.

—¿Acaso crees que yo no me sentí de esa forma cuando JiMin se presentó? —inquirió el otro alfa—. Estaba acojonado, Hoseok. Muchísimo. Yo era un alfa hormonado de diecisiete años y Jimin un omega inocente de catorce, estaba aterrado cada vez que estaba junto a él y mi alfa gruñía por marcarlo.

—¡Pero tu situación era diferente! —exclamó el alfa—. Tú y Jimin os sentíais atraídos por el otro incluso antes de que JiMin se presentara. Siempre estabais juntos y la conexión entre vosotros era palpable para todos. No tardasteis nada en haceros pareja cuando él se presentó.

—Hoseok...

—Tae es un niño, Yoongi —suspiró—. Tiene quince años. Quince. Cuatro años menos que yo, ni siquiera se ha acostumbrado a ser un omega. Cómo se supone que me voy a presentar y decirle, «ey, hola, sé que no hemos hablado mucho y eso, pero creo que eres mi omega, ¿me dejas marcarte?».

Yoongi golpeó a Hoseok en el estómago, arrancándole el aire y provocando que se levantase de la cama para evitar recibir otro puñetazo. Yoongi lo miró desde la cama con el ceño fruncido y lo apuntó con el dedo como si estuviese juzgándole.

—Deja de decir tonterías y céntrate —rumió—. Sí, Tae tiene catorce años, y sí, tú tienes cuatro años más, pero eso sabes que es solo una excusa que te estás poniendo para no aceptarlo. Jimin tenía la misma edad y no por ello no nos dimos una oportunidad. Podría haber sido peor en nuestro caso porque yo era un idiota tres años mayor; más inmaduro e impulsivo que tú. —Hoseok bajó la mirada al suelo—. Además que Tae está a unas semanas de cumplir los quince, la diferencia de edad entre ustedes es la misma que entre Jimin y yo.

—Nunca lo he visto de esa manera. Siempre ha sido Tae, el hermano menor de Jungkook, ¿y ahora se supone que debo aceptar que es mi omega? —Volvió a suspirar y se sentó en la cama—. No puedo, Yoongi. Simplemente no. Esta no es la forma en la que esperaba encontrar a mi supuesta pareja.

—Eso no lo decides tú, y deberías saberlo —replicó el alfa con suavidad—. Tú mejor que nadie sabes que las cosas del destino no funcionan a nuestro antojo, ¿acaso crees que Namjoon esperaba encontrar a su omega de la forma en la que lo hizo? Dos años saliendo con Yoona para descubrir que el dependiente de la nueva tienda de discos era su pareja destinada. —El alfa se incorporó y se sentó junto a su amigo, rodeándole con uno de sus brazos—. No te estoy diciendo que te presentes ahora en casa de los Jeon y te declares a Tae, pero si de verdad crees que él es tu omega, entonces trata de crear un vínculo entre ustedes. Negarte a ello simplemente os terminará destruyendo.

Hoseok suspiró y trató de relajarse. Todavía no podía digerir del todo lo sucedido ese día, pero Yoongi tenía razón y trataría de hacerle caso.

🐺🐺🐺

A la mañana siguiente, Hoseok se presentó en casa de los Jeon con una sonrisa nerviosa en la cara y su mano apretando con nerviosismo una de las asas de su mochila. Jungkook le abrió la puerta mientras bostezaba y le invitó a pasar. Fueron a la cocina donde Jeon le sirvió un café antes de irse a cambiar para estar un poco más presentable (o eso dijo él).

Hoseok se quedó dándole vueltas al líquido oscuro mientras esperaba a su amigo. Jungkook todavía no había dicho palabra sobre su huida el día anterior, pero estaba seguro de que cuando estuviese un poco más despierto comenzaría a despotricar contra él. Escuchó la puerta abriéndose y alzó la mirada, tragando saliva cuando fijó su vista en Tae

—Buenos días, hyung —saludó el omega mientras arrastraba los pies hasta la mesa y se sentaba frente al tazón con leche y cereales que Jungkook había dejado preparado.

—Buenos días —dijo él tras unos segundos y sonrió suavemente.

Tae le respondió el gesto y Hoseok sintió su corazón latir desbocado y su cuerpo entero erizándose cuando el olor a flores lo golpeó. «Contrólate», se dijo a sí mismo. Pero entonces alzó la vista otra vez y se quedó mirando al omega. No pudo evitar fijarse en Tae más detenidamente. Era muy guapo, tenía los rasgos todavía aniñados pero el atractivo era innegable. Su piel tostada, su pelo revuelto, sus ojos soñolientos... Hoseok se quedó prendado de la belleza del omega, sin darse cuenta de que Tae había alzado su mirada y se había sonrojado al ver al alfa mirándolo fijamente, y que Jungkook estaba en la puerta de la cocina, observando la escena con los labios apretados y los ojos entrecerrados.

Jung Hoseok estaba en problemas.

Muchos problemas.

🐺🐺🐺

¡Hola! Muchas gracias a los que leyeron y comentaron en el capítulo anterior, espero que este os haya gustado ❤❤ No olvidéis votar y comentar 😊

Quiero aclarar que los omegas se presentan en el año que cumplen los quince, pero como Jimin y Tae cumplen en octubre y diciembre respectivamente pues por eso aparece que tenían catorce cuando se presentaron 😊

Os dejo esta belleza para despedirme, ¡hasta el próximo cap!
Besos 😘❤

Cachorro [HopeV] [Omegaverse]Where stories live. Discover now