Cachorro [HopeV] [Omegaverse]

08

NaYeon sonrió en grandes cuando HoSeok lo hizo. Llevaban varios meses sin verse después de su ruptura cuando la chica anunció que se mudaría a Busan. A pesar de todo, habían tratado de mantenerse en contacto a través de mensajes y de algunas llamadas, ambos habían terminado en buenos términos y durante un tiempo se plantearon la idea de volver juntos por todo el cariño que se tenían.

—¡Qué sorpresa verte aquí! —Se abrazaron mientras Tae observaba todo unos pasos más alejado de lo que había estado en un comienzo.

—Estoy pasando la noche con los chicos en casa de JungKook —explicó el alfa—. ¿Y tú?

—Mis padres están de vacaciones, así que estoy en casa de mi tía estos días.

—¿Te vas a quedar mucho tiempo? Han pasado meses desde la última vez que salimos a dar una vuelta —comentó el alfa y la sonrisa de Tae fue disminuyendo hasta que sus labios formaron una línea fina y carente de emociones.

—Un par de semanas más, dependiendo de cuando vuelvan mis padres —dijo—. He echado muchísimo de menos Seúl, la vida en Busan es mucho más tranquila que aquí.

—Tendremos que ponernos al día, han sucedido muchas cosas desde que te fuiste.

En cuestión de segundos, NaYeon y HoSeok estaban envueltos en una charla sobre lo que había sido su vida en los últimos meses. Siempre habían sido bastante comunicativos el uno con el otro cuando estaban juntos, y no era raro encontrarlos manteniendo largas conversaciones con el otro, por lo que en esa ocasión no fue diferente para ellos.

TaeHyung sintiéndose completamente ignorado por la pareja de amigos, cogió la bolsa que HoSeok había dejado caer al suelo cuando abrazó a la chica y pasó de largo junto a ellos, volviendo a retomar el camino a su casa. Pensó, por un momento, que HoSeok se daría cuenta de que lo había ignorado y que se estaba yendo, pero lo desechó rápidamente cuando escuchó risas detrás de él.

Apretó los dientes con fuerza, al igual que los puños. Estaba hecho un remolino de emociones, por una parte se sentía absolutamente devastado con la rapidez que había demostrado el alfa para olvidar hecho de que él era su omega y no ella, pero otra parte de él estaba cabreada, más que dolida. No podía negar que HoSeok era una persona sociable, muchísimo. Se llevaba con todo el mundo y siempre trataba de mantener una amistad con aquellas personas cercanas a él, incluidas las dos chicas con las que había salido (NaYeon era, claramente, una de ellas). Sin embargo, el hecho de que esa afabilidad se antepusiese a él era bastante entristecedor. Lo había dejado relegado a un segundo plano en cuanto ella apareció en escena, había desentrelazado sus dedos, había dejado de hablarle, había dejado de sonreírlo, y todo eso para centrarse en ella.

Dolía.

Joder, si dolía.

Pero Tae tampoco se iba a quedar ahí, viéndolo. Confiaba en que el alfa se diese cuenta de lo que estaba haciendo y luego fuese a pedirle perdón; no era posible que la posibilidad de estar juntos se fuese a la mierda con tanta rapidez.

Entró en la casa mientras se frotaba las manos por el frío. Las miradas de todos se dirigieron hacia él al instante, haciéndolo sonrojar a medida que caminaba por el salón para dejar la bolsa con la compra sobre la mesa. Se quitó el abrigo, la bufanda y el gorro antes de ir hasta el sofá donde estaba tumbado su hermano y se tumbó a su lado, dejándose rodear por los fuertes brazos de JungKook.

—¿Y HoSeok? —inquirió YoonGi.

—Se encontró con NaYeon y se quedaron hablando.

Tanto JiMin como YoonGi lo miraron fijamente unos segundos, esperando alguna reacción por su parte al escuchar el tono tan impersonal que usó. YoonGi no pareció darle mucha importancia (aunque era difícil saberlo), sin embargo la mirada de JiMin se mantuvo sobre él durante varios segundos más, tratando de leer a través de la máscara de indiferencia que Tae era capaz de utilizar cuando se lo proponía.