#12 - siempre a tu lado

192 30 7
                                    



Mi vida, junto a la de Gonzalo, siguió como lo usual, seguíamos siendo muy buenos amigos, y poco a poco, me encariñaba cada vez más con él.

En clase de Cómputo, donde usábamos, computadoras, valga la redundancia, yo y Gonzalo nos sentábamos siempre juntos, y debido a que nuestro par de computadoras se habían averiado, nos tuvimos que cambiar de sitio hasta el par de computadoras de al fondo, donde el profesor nos veía escasamente.

- Bueno Matti, ¿qué hacemos? - preguntó Gonzalo mirándome a los ojos

- ¿Uhh..., clases? - respondí con un tono lleno confusión

- No pues Matti, aprovechemos que estamos al fondo y que el profe no nos vea para que jugar o escuchar música -

- Bueno está bien supongo - respondí sacando mis audífonos de celular de mi mochila

- ¿Me prestas tus audífonos? - preguntó Gonzalo

- ¿Uh?, no jodas consíguete los tuyos - respondí agresivamente

- Por favor, quería escuchar música -

- ¿Y que esperas que haga?, yo también quiero escuchar música -

- Mmhhh, ¿que tal si tenemos un audífono cada uno? - añadió con una sonrisa

- Ugh, está bien...- dije accediendo a su propuesta

- ¡Genial! -

- Bueno voy a poner la canción - dijo Gonzalo

- Como sea - respondí

Gonzalo había puesto "Faded", de Alan Walker, pues según el, le fascinaba la canción, y para serles sincero, me logró contagiar dicho aprecio hacia aquella melodía tan satisfactoria que anhelaba ser escuchada una y otra vez por mis oídos.

- Jeje, ¿te molesta si la pongo otra vez?, realmente adoro esa canción - preguntó Gonzalo

- Claro, aja si, esta buenasa - respondí

Las horas transcurrieron, y la clase de cómputo finalizó, y al igual que las horas, los días también transcurrieron con una rapidez increíble, era Viernes, y nos encontrábamos en el último curso de la semana, yo me encontraba demasiado emocionado y quería que las clases acabasen ya, puesto a que mi fiesta se realizaría el día siguiente.

La campana que anunciaba el fin de clases sonó, y en consecuencia, todos mis compañeros se levantaron de sus asientos, incluyéndome a mi. Decidí aprovechar que nos encontrábamos en clase de la profesora Rosa, con quien tenia la suficiente confianza para anunciar en su presencia, mi fiesta.

- ¡HABER SI ME ESCUCHAAAN! - exclamé - Mañana hay fiesta en mi casa y como saben absolutamente todos los integrantes de este salón están invitados -

- ¡Eso Matti! - exclamó Leo a lo lejos

Tras anunciar mi fiesta, recogí mi mochila, y me retiré con mucha euforia del salón de clases, estaba tan emocionado por mi fiesta del día siguiente, que me olvidé por completo de despedirme de Gonzalo, quien se encontraba llamándome a lo lejos.

- ¡Matti!, ¡Matti!, ¡espérame! -

- Apúrate Gonzalo, tengo que ir a mi casa para ver las luces y toda la vaina esa -

- Uh..., si sobre tu fiesta Matti... - dijo Gonzalo en un tono preocupado - No creo que vaya a la hora que dices que será tu fiesta, no tendría a nadie que me lleve hasta tu casa -

- Mierda Gonzalo, ¿osea no vas a ir? -

- Mi padre tan solo podría llevarme pero... bueno horas antes de que empiece tu fiesta y bueno..., a lo que voy es si podría ir mas antes, ¿como a las..., cinco tal vez? -

Biografía de un IlusoWhere stories live. Discover now