❦Chapter thirteen

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La castaña se encontraba aún sumamente perpleja mirando la impactante escena que se plasmó frente a sus ojos, no podía creérselo, no podía asimilar que Richie se estaba follando a un chico frente a sus ojos, al principio sintió una profunda y triste melancolía, después sintió enojo, sentía como sus ojos se salían de sus órbitas, su respiración se aceleraba y ligeramente las venas de su frente se saltaban, se encontraba muerta de rabia y no dejaría pasar desapercibida esa situación.

Así que la castaña caminó y se colocó frente a ellos.

— Richie... —habló con un hilo de voz, con una fusión de tristeza con rabia que le embargaba.

El asmático y el de lentes voltearon rápidamente, el rostro de ambos se tornó pálido en su totalidad, en esos instantes, la respiración de ambos se detuvo por unos segundos. Estaban jodidos. Richie rápidamente se subió el bóxer y Eddie también. Richie comenzó a negar rotundamente la cabeza. Tenía que hacer algo antes de que Jane se jodiera en el.

— Jane... — el rizado trató de tomar la mano de la castaña pero esta quitó la suya con brusquedad, evitando su roce—no es lo que crees...

Jane lo miró incrédula mientras pasaba una mano por su cabello en señal de frustración.

— ¿Que no es lo que creo? Dios, Richard, me das asco...ahora todo empieza a cobrar sentido, ahora entiendo porque... porque evitas tener sexo conmigo, ahora entiendo porque nunca me has querido, joder, ¿te gustan los malditos hombres?—indagó la castaña mientras sentía sus ojos nublarse, un par de lágrimas corrieron por sus mejillas.

— Jane, cariño... yo si te quiero... oh Dios, perdóname Jane, te juro que te amo, no es lo que...crees. —susurró Richie con desespero mientras pasaba un mechón de cabello detrás de la oreja de Jane. Jane lo miraba fijamente pero rápidamente agachó su cabeza. Richie tomó de su mentón.

— Richard, ¿tan difícil era decirme la verdad? Tan difícil era para ti decirme que eras gay... no lo puedo creer, todo este tiempo... ¿todo este tiempo fue un juego? Lose, lo nuestro no es real, es un simple contrato que firmamos pero... ¿Por que carajos no me dijiste que te gustaban los hombres? ¿Te imaginas que la prensa y la farándula se enterara de esto? Estarías jodido. —espetó Jane con firmeza alejándose del bocazas.

Richie se encontraba perplejo, al borde de una crisis, sintiendo un nudo en su estómago, tenía que hacer algo ahora mismo, era ahora o nunca, si no, Jane hablaría, porque era una caprichuda obsesionada. Richie exhaló profundamente.

— Jane... yo... ugh, por favor no hagas algo de lo que después te arrepientas...— habló el de lentes en súplica.

— ¿Arrepentirme? — habló Jane, frunció el ceño y se encontraba encajando sus uñas en sus manos de pura rabia que le acogía. —No cariño, el que se arrepentirá serás tú, me siento humillada, engañada, me siento un asco, te amo Richie, siempre te he amado profundamente pero... esto no puede quedarse así, esto lo sabrá Chief, mi padre, a la mierda el contrato y tu carrera artística, no me interesa lo que ocurra... al fin y al cabo el que terminará jodido serás tu, yo no. —habló Jane mientras sorbía su nariz ya que se encontraba sollozando, la castaña tomó rápidamente su móvil y Richie tomó su mano.

— No lo hagas... por favor, te lo pido... Jane, yo sin mi carrera artística...no soy nada. — musitó Richie con un nudo en la garganta al borde de las lágrimas, sentía tanto temor.

— Debiste pensarlo antes, antes de serme infiel con este marica. Sueltame, le llamaré a mi padre, estás jodido. —espetó Jane mientras miraba a Eddie con asco y superioridad.

— Jane... ¿escúchame, si? — El rizado tomó del rostro de Jane y la miró fijamente, Richie juntó su frente con la de ella mientras sus respiraciones tan cercas se fusionaban— Mi niña, prometo que si tú actúas como si nunca hubiera pasado esto..seré diferente, te valoraré como lo mereces... porque te mereces el mundo entero y yo soy un idiota que no te supo valorar, pero créeme que lo haré preciosa... te adoro tanto...solo dame esta oportunidad ¿Si, pequeña?

Jane comenzó a derramar más lágrimas y tomó el rostro del bocazas, rozaba sus dedos por sus mejillas.

— Oh no lose, ¿lo prometes, Rich? — susurró Jane mientras se acercaba a los labios de Richie.

— Te lo prometo, pequeña. Seremos muy felices. —Richie robó un beso de los labios de la castaña.

— Te amo, Richard. —susurró Jane entre medio del beso.

— Y yo a ti, pequeño. —replicó Richie con dulzura. Jane sonrió.

En esos instantes, Eddie no tenía palabras para expresar toda la mierda que le invadió en su corazón. Sintió cómo su corazón se fue destrozando y cayendo pedazo a pedazo, sentía su pecho arder, un nudo en su garganta se comenzaba a formar, su garganta se encontraba sin saliva, su respiración se aceleró completamente, buscó su inhalador pero no lo tenía, sentía como lentamente el mismo caía en un agujero de tristeza, de decepción y destrozó emocional, las palabras de Tozier le habían llegado como una daga al corazón, dándole en el punto correcto. Sintió cómo rápidamente sus lágrimas comenzaban a caer sin parar, el asmático se agachó en el suelo, se quedó en una esquina hincado llorando desaforadamente, no quería saber absolutamente nada de Richie Tozier, lo había destrozado terriblemente, la persona que menos imagino lo hizo, se sentía un completo estúpido ya que el era el culpable por enamorase de alguien que era dueño de alguien más y ese alguien...era Jane Hopper.

Patético, así era como se sentía Kaspbrak.

Le había roto el corazón.

— Vámonos, vamos devuelta a L.A. Rich, Nate está afuera esperándonos. —Jane tomó la mano de Richie y la atrajo hacia a ella, indicándole que salieran.

— Ok pequeña, sal afuera... ahora te alcanzo... —habló Richie bajamente. Jane asintió y salió de ahí.

Richie se acercó a Eddie el cual tenía recargada su cabeza en sus brazos mientras lloraba y sollozaba fuertemente. Maldiciéndose a el mismo.

— Edward... — se aclaró la garganta.

— ¿Que es lo que quieres? Aléjate y vete. — escupió Eddie con coraje.

— Eso haré, lo prometo... solo quería decirte que perdón... joder Eddie... lo lamento tanto...pero tenía que hacerlo, me parte el alma decir esto...pero—Richie hizo una pausa, sintiendo un nudo en su garganta. —lo nuestro ya no puede continuar, no mereces a alguien como yo, soy un estúpido... te mereces a alguien que te ame con cada latido de su corazón. Espero encuentres a ese alguien y te haga feliz... hubiera deseado ser ese alguien pero... el contrato corre en peligro mi carrera, lo siento... Eddie, Eddie Spaguetti, nadie podría reemplazarte, eres mis ojos, la luz de mi vida, eres una persona tan importante para mí, lo lamento tanto, esto ya no puede seguir... pero algo si te prometo es que siempre te llevare dentro de mi corazón, no importa donde estes ni con quien estes, yo siempre te amaré profundamente... pero esto se terminó, adiós baby lips... te amo profundamente. —Richie soltó en lágrimas y plasmó un beso en la nuca del asmático.

Esas palabras siempre quedarían marcadas en el corazón de Eddie por siempre, esas palabras que lo apuñalaron en donde más le dolía.

— Adiós Richard, se feliz. —berreó Eddie aún con su rostro en sus brazos.

Eddie escuchó como Richie se alejaba y sollozaba al mismo tiempo. Cuando escuchó la puerta de entrada cerrarse, Eddie levantó su vista nublada.

"Si me buscas estaré aquí, en silencio, abrazado del mas lindo de tus recuerdos." Dijo Eddie entre lágrimas.

❝ Baby Lips ❞ Reddie ©Onde histórias criam vida. Descubra agora