Butterfly [Park Jimin] +18

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Me desperté sintiendo la luz solar golpear mis ojos, me removí en mi cama y me quejé. Quería dormir más, estaba teniendo un sueño hermoso. Uno donde yo era feliz con Eliza y nuestro hijo. Un sueño donde todo estaba bien. Solo un simple sueño. Pero uno hermoso.

Con pesar abrí mis ojos, mirando entrecerradamente la ventana, las cortinas estaban un poco abiertas y por eso el sol mañanero se infiltraba. Con mi mano busqué mi teléfono, solo para mirar la hora, me sorprendí al ver la hora, no era de mañana como lo pensaba, más bien era las tres de la tarde. Había dormido casi veinticuatro horas seguidas. 

Con algo de pereza me levante de la cama y me dirigí hacia el baño, aseándome un poco, me miré al espejo. Mis ojos estaban algo rojos y las ojeras seguían ahí, pero mi rostro demacrado ya no lo estaba tanto, tal vez solo necesitaba dormir.

Salí del baño una vez estuve listo y me dirigí a la sala, dónde Yoongi hyung estaba leyendo unas hojas.

—Vaya, pensé que habías entrado en estado comatoso—

Yoongi hyung bajó las hojas de papel y las puso en su regazo, solo para mirarme mejor.

—¿Como te sientes ahora? Dormiste casi  dos días completos.— exageró, claro.

—Un poco mejor— me senté en el sofá frente a hyung, subí mis rodillas y las abracé.—Gracias, hyung—

—No te dejaría solo mocoso, pedí algo de pizza y carne de cordero, tal vez no tarde en llegar, espera un poco.— asentí.

Vi como regresaba a la lectura de las hojas, movió unas carpetas y algunas fotos que no había notado al principio. Eso me dió curiosidad.

—¿Que es eso, hyung?— señalé con mi cabeza los papeles.

—Esto es de lo que quería hablar contigo, pero ahora mismo no sé si es el momento para hablarlo, esto incluye a Eliza, Jimin— me miró con cuidado, esperando alguna reacción mía.

—¿A Eliza? ¿Es sobre...?— no pude completar la frase.

—Si, esto es sobre el accidente, pedí a un investigador que buscara más cosas para mí—

—¿Que encontró? ¿En verdad fue un accidente? ¿Atraparon a la persona culpable?—

—Ah eso voy, necesito que estés calmado Jimin, oh no dire nada—frunció un poco sus cejas.

—Lo estoy, solo quiero saber qué pasó en verdad—

Yoongi Hyung suspiro y asintió. Se acomodó mejor en el sofá y abrió su boca para empezar a hablar.

—¿Recuerdas el número que me pediste investigar? Bueno, todo empieza por eso, Ese número proviene del lugar de donde vienes tú, no es de nadie que conozcamos, lo seguí buscando, pero después del accidente de Eliza, me di cuenta que ese mismo número había estado aquí, rastreé su Gps, había viajado desde donde vivías a Seúl dos días antes del accidente de Eliza, ese mismo número estuvo en el accidente y viajaba Por la misma calle. Al principio pensé que solo era una maldita casualidad, pero hace poco me llegaron estas fotografías.— me entregó un par de fotografia, las tomé con manos tomblorosas.— Ahí viene el auto que se pasó el rojo para él, también se ve la matrícula, en la otra se ve al hombre, pero...— las aventé lejos de mi como si quemaran mi piel.

Sentí arcadas, la otra foto era una donde había un hombre muerto, se había colgado de una barandilla en una azotea. Un suicidio. Mire a Yoongi.

—¿Que fue lo que encontraste, hyung?— cerré mis ojos, apreté más mis rodillas a mi pecho.

—Fue lo que sospechaba, el dueño de ese número es la persona que aparecía en la foto, fue quien te mando un mensaje y fue quien... atropelló a Eliza— un suspiro por parte de Yoongi hyung me hizo entender que tampoco era fácil para él hablarlo.— Asesinaron a Eliza por ese mensaje—

Un sollozo salió de mi pecho. Había sido mi culpa de que eso le pasara.

—Todo fue mi culpa, hyung, yo la maté—

—Tú no hiciste nada malo, Jimin, fue ese hijo de perra quien hizo todo esto, puedo prometerte que buscaré hasta debajo de las piedras para encontrar al maldito hijo de puta que esta detrás de esto.—

—Hyung, ambos sabemos quien pudo ser— sollocé de nuevo. Lamí mis labios y mordí mi labio inferior para intentar controlarme. —Lo sabemos, pero él... se supone que es el padre de mi mejor amigo, ¿como podré enfrentarlo?—

—Jungkook no tiene la culpa de nada, y lo sabes, solo tienes que seguir adelante, la vida te dará una oportunidad, lo verás, ahora mismo no tenemos suficientes pruebas para ir por él, pero podemos buscarlas, sabiendo que fue él...—

No dije nada, cerré mis ojos. Hyung tenía razón, aunque ahora mismo quisiera ir y arrancarle la cabeza a ese maldito hombre, la verdad es que no tengo pruebas y no puedo moverme así como así. Tendría que buscar más  pruebas, No podía darle explicaciones a mi mejor amigo ahora, pero se que un día él lo entenderá.

—Hyung, quiero pedirte algo—

—¿Que cosa?—

—Por favor, no le cuentes esto a nadie, nadie sabe lo que en realidad pasó más que tú y yo, yo prometo que saldré adelante y no dejaré que la pérdida de Eliza me afecte, la amo y siempre lo voy a hacer, eso  jamás cambiará. Pero no quiero que nadie me tenga lastima o preocupar a las personas, promételo hyung— 

Yoongi hyung suspiro de nuevo  últimamente hacia mucho eso.

—Está bien, si es tu deseo yo lo respetaré. Te ayudaré a buscar pruebas y  no le diré a nadie—

—Gracias, por todo, por apoyarme siempre, aunque sabias que hacía mal, siempre me apoyaste, Gracias— 

—Los amigos hacen eso, recuérdalo—

Traté de sonreír. La puerta del departamento fue tocada y Yoongi hyung fue a ver. Era la comida que ya había llegado. Mire las hojas que había estado mirando hyung, las fotos tiradas en el suelo. Una punzada a mi corazón me hizo cerrar los ojos, no podía hacer nada ya para regresar a mi Eliza, pero podía hacer pagar a las personas detrás de esto. Lo prometía, lo juraba, yo haría algo.

No dejaría la muerte de un ser inocente quede así, ni ella ni mi bebé tenían la culpa de nada, pero los habían metido en este problema embarrándolos de la mierda de la que yo ya estaba embarrado. No se quedaría así, yo me haría fuerte, sería un Jimin más fuerte y no débil, cambiaría. Lo prometo, Eliza, prometo que me levantaré.

Te amo y siempre lo haré, pero espero que me perdones por romper la promesa que una vez te prometí, el no volver a estar en la trabajo en el cual te había conocido, porque tú fuiste a la primera chica que yo amé, eso no cambiara nada. Perdóname por romper la promesa, perdóname por estar con mujeres que no son tú, pero no te preocupes, ellas jamás me harán sentir nada de lo que tú me hiciste sentir. Por qué solo tú hiciste que mi corazón latiera nervioso con cada sonrisa que me dabas, que llegara a exasperarme de manera inimaginable contigo cuando hacías algo malo. Que mis manos sudaran de nervios cuando me mirabas, o que mis labios cosquillearan cada que me besabas, jamás cambiara eso, porque tú fuiste y serás siempre mi primer amor.

Te amo, Eliza, para siempre y por siempre.

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Ya sólo falta el epílogo, lo tengo terminado y mañana lo subiré.

Recuerden leer Babygirl para entender más cosas, de YalimarYanez

😉 adiós!