Rey Demonio

15. Mundo muerto

Halsey - Gasoline

Me levante con dificultad.

— ¡Hemos encontrado a la reina Demon!— grito un hombre de cabellos rubios.

Me levante, uno de ellos era el que no permitía que los Foster se movieran. Saque mis alas y me lance a él, lo estampe en un árbol y golpee su cara.

Maximiliano y Marc salieron apresurados, atacaron al que tenía a los Foster inmovilizados, ellos se liberaron y también sacaron sus alas.

Unas criaturas oscuras salieron del bosque, eran enormes perros. Uno se balanceo hacia mí y coloque mi codo para que no me lastimara, los Foster me ayudaron quitándomelos de encima.

Uno de los hombres cargaba el cuerpo de Elena, me acerque para quitársela pero hizo un campo de protección personal.

La esencia de Danasha apareció, Marc también lo noto, un portal se abrió, era de agua, era de Danasha...

Él hombre me miro y luego entro al portal, todos los demás lo siguieron, era incapaz de moverme, de reaccionar, el portal era de Danasha.

—era de Danasha...—reí mientras lágrimas salían, esto era el colmo— ¡era de Danasha!— grite a Marc.

Él se encontraba peor que yo, Danasha los está ayudando.

Salí corriendo al bosque, era una maldita, confié en ella, si iba con Fabio era para unírseles.

Llegue al lugar en dónde ella y Ty me dejaron, sonreí, era un estúpida, volví a creer en alguien, creí dar mi vida si era necesario para encontrarla.

Llegue a la mansión y al parecer todos se encontraban enterados, el rostro de Axel y Abby no era el mejor.

Me acerque a Abby y tome sus manos, Marc también se encontraba con ellos, pobre.

— te prometí que daría mi vida por Alec y no te decepcionare, esta vez no me importa la vida de Danasha.

Voltee a Marc.

— Desde ahora considero a Danasha mi enemiga y si quieres estar de su lado considérate muerto— dije sin tomar censura de mis palabras.

Él no dijo nada y salió de la habitación, sé que será duro para él pero tiene que tomar su decisión, Danasha ya está muerta para mí.

Me encontraba con los Foster en la biblioteca de Maximiliano, ellos son muy inteligentes y rápidos pero su fuerza no es la mejor.

— ¿Han encontrado algo?—pregunte y ellos negaron.

Queremos encontrar alguna pista de ellos, no sabemos porque no sentimos su esencia, sentimos el de Danasha pero no el de ellos.

Encontraba todo tipo de criaturas excepto una que diga que no tienen esencia, encontré desde elfos hasta duende.

— ¿Y si son zombies?—preguntó Orlando y todos alzamos la ceja.

¿Cómo es que serían zombies? Su apariencia era normal, como la de un humano y los zombies son horribles.

— eso es imposible, además te diste cuenta que tienen magia—dijo Oscar.

—y los zombies tienen olor, uno apestoso pero lo tienen— aclaro Omar.

Thor se encontraba con nosotros recostado debajo de mis pies, era muy dormilón.

— ¿pero y si son...?— estos chicos son divertidos pero ahora no necesito divertirme.

Me aleje de ellos y busque algún libro en las estanterías, cada uno con diferente título, era tan hermoso leer pero la ocasión por la que yo lo hago no lo es tanto.

Tome una escalera la cual se deslizaba por las estanterías y subí.

—griegos... cazadores... híbridos... — leía cada título en voz alta— el lago de los recuerdos... mundo mágico...—he ido ahí, es muy hermoso, tan verde y los animales son tan hermosos—mundo muerto...— este ha llamado mi atención, lo tome con una mano y vi la portada, se encontraba vacía, era un libro de forro de cuero, era muy viejo.

Solté las escaleras y lo tome con las dos manos.

—Mundo muerto...—leí y me desestabilice, también solté el libro y cerré los ojos esperando el golpe.

Escuche la risa de alguien y al abrir los ojos me encontré con los de Maximiliano.

Tome sus hombros y me fue colocando en el suelo con cuidado, recogió mi libro y me lo entrego.

—gracias...—dije y él sonrió.

—De nada ¿Por qué no utilizaste tus alas?—preguntó.

—el espacio era muy pequeño para extenderlas.

El estar juntos se ha vuelto incomodo, me senté en el suelo esperando que él hiciera los mismo y así lo hizo.

— ¿Qué sabes de este libro?—pregunte levantándolo y él se encogió de hombros

—Nunca lo había visto—lo tomo y reviso cada página, ahora que me fijo bien algunas páginas fueron escritas a mano, con pluma de esas antiguas.

Maximiliano revisaba la parte de atrás, sus ojos recorrieron cada palabra mientras sus dedos repasaban la letra, me acerque a él y leí lo que ahí se encontraba.

Elena, la mujer más enamorada de su alma gemela...

—Era de ella...—dije y él asintió, se lo quite y cerré— ¿la extrañas?—pregunte y me observo.

—Si...—creo que escuche mi corazón romperse.

— ¿Cómo era todo junto a ella?—pregunte, él se encontraba ido, era como si no estuviera en este mundo y estuviera en el pasado, recordando sus momentos.

—ella era maravillosa, la ame tanto... —resistiré golpearlo por mis malditos celos los cuales no deberían aparecer— siempre despertábamos juntos, nunca faltaba decirle al otro lo que sentíamos... Era amable con todos, hasta con el que menos lo merecía, su bondad abarcaba todo la manada, era amada por los todos, su sonrisa hacia revivir a cualquiera, el día que se fue me sentí devastado, la amaba tanto Emily... —una lagrima se deslizo por su mejilla.

Nunca lo había visto soltar una lágrima, hasta yo quería llorar, ella era mi prima...

— ¿Cómo fue que cambio? —pregunte.

—no lo sé... fueron meses antes, Axel me advirtió que algo le pasaba, siempre que le preguntaba a ella lo negaba, salía en las noches, siempre la seguí pero nadie se encontraba con ella, le gustaba mucho visitar los lagos, amaba el agua... No sé como empezó todo. La guerra fue desatara y ella se encontraba con ellos, todo cambio en segundos... Ni siquiera pude decirle un ultimo te amo... Un te amo que aparece cada vez que la veo, cada vez que la recuerdo.