Desesperación (Narusasu)

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Naruto observó a Sasuke detenidamente, incluso en estos momentos era tan malditamente bello. Le resultaba hasta enferma la manera en la que podía amar a ese teme, pero después se debatía así mismo porque lo amaba tanto, ahora debía hablar con él acerca del secuestro.

-Charasuke- se sentó frente a él recibiendo una mirada burlona

-¿Ya no soy tu teme?-

-No te lo mereces, pero eso ya es otro asunto-

-¿También me vas a pedir que testifique?- pregunto aburrido

-¿Cómo lo sabes?-

-Itachi me lo pregunto antes de contarle un secreto-

-Ya veo, entonces fue por tu "secretito" que prefirió irse- suspiro hastiado, como le tocaba las narices este bastardo

-No es mi culpa que no aguante nada- le resto importancia

-Mira, quieres mucho a Sasuke, que bien, pero a él no le gustaría que te metieras con su hermano, cuando hable por teléfono con él me di cuenta de que había llorado- sintió un dolor de cabeza tremendo

-No sabes lo que él quiere- respondió tratando de no demostrar el molestia

-Estoy muy seguro de que hacer llorar a su hermano no entra en sus planes-

-Terminemos con esto, me aburres- se acostó sin verle, le dolió aquello

-¿Qué recuerdas del tiempo que estuviste cautivo?- en cuanto pregunto ya tenía la grabadora de audio lista

-No- respondió tajante

Antes de que Naruto pudiera replicar ante esa clara mentira, su teléfono sonó, sin tener otra opción salió de la habitación. El tonó lo reconocería donde fuera, el perezoso de su compañero fue quien lo interrumpió

-Uzumaki-

-Naruto, ¿Dónde estás?-

-En el hospital, tomando la declaración de Sasuke- respondió

-Deja eso y ve con Kakashi-sensei- ordeno. Apenas y se escuchaba debido al transito

-Estoy ocupado shika-

-Es una orden Naruto, yo me encargare de Sasuke-

-Ahg, de acuerdo- dicho esto colgó

Algo enojado volvió a la habitación, él quería tomar la declaración de Charasuke, saber si es verdad que ese monstruo le hizo algo y que no estuvieran siendo manipulados por otra persona, lo cual llevaba pensando desde hace tiempo.

-¿Ya te vas oficial imbécil?-

-Solo vengo a decirte que si quieres ayudar a Sasuke debes dar tu declaración- se acerco a él

-Lo que yo quiera o no, no es tú asunto- en segundos Naruto ya lo tenía sujetado por el pelo

-Mira estúpido que no estoy de humor- lo sacudió un poco -te jactas de ser poderoso pero solo eres la máscara que el teme usa cuando está cansado- lo soltó y le pico el pecho –Sasuke es un gladiador, solo una bala en el cráneo puede derribarlo- dijo convencido

-Dirás una bala en el corazón- tomo la mano y la coloco en su pecho –Y esa mi querido Naruto...- Otra de esas horribles sonrisas salió a relucir –La disparaste tú-

[...]

Tsunade revisaba los expedientes médicos de Sasuke, no le gustaba lo que veía, las costillas estaban dañadas y con algo de reposo podría moverse con libertad, pero aún no debía moverse tan bruscamente y los huesos de sus pies aún no sanaban completamente, entonces... ¿Cómo es que se movía tan libremente? Naruto e Itachi le comentaron la actitud de Sasuke al despertar y todavía no se creía eso de la doble personalidad, aunque sería una buena explicación para lo que veía, pero aquello le generaba otra duda, ¿Sería que la segunda personalidad fuera inmune al dolor, que no resintiera las fracturas? Quizá Sasuke padeciera de esta inmunidad, enfermedad rara pero era la única explicación... No, no tenia que añadirle más enfermedades al moreno, de por sí la anemia que adquirió durante el cautiverio y las diversas enfermedades de transmisión sexual que pudo contraer, eran suficientes problemas. Unos golpes en la puerta llamaron su atención