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v e i n t i s i e t e

Dos enormes masas de carne se restregaban frente a su rostro, debajo de su discreto abrigo Suran solo vestía una simple camiseta dejando al aire su pecho de grandes copas adornadas en tatuajes, en realidad, Yoongi no estaba incómodo, más bien lo incómodo era el picazor de aquel producto que la peliverde ponía en su cabello, ella hablaba y hablaba sobre todo y nada, y como todo un hombre educado, Yoongi fingía escuchar con atención. Suran no era aburrida, pero él no era un gran fanático de escuchar sobre moda y estilismo.

- Tu piel es tan bella Yoongi, viéndote así estoy en contra de teñirte de negro. -

- No volveré a usar un fantasía, si es lo que quieres sugerir. -

- ¿Y qué te parece rubio? - Sugirió con ensueño. - Sí no te gusta igual después podemos teñirlo obscuro. -

- Haz lo que creas conveniente, en realidad me importa una mierda. -
Dijo con calma y Suran hizo una mueca en desaprobación.

- No puede importarte una mierda, debes quedar radiante para recuperar a quién tiene las mejillas preciosas, recuerdalo. -

- Ese no era el plan, nadie va a recuperar a nadie. ¿Tú vas a ir por tu ex novio? -

- Probablemente si aún estuviera enamorada pasaría por alto cada uno de sus errores y defectos, pero afortunadamente no siento más que asco. Pero tu sí estás enamorado, y vas a darte por vencido sin haber luchado. -

- No sabes lo que dices, lo intenté por años, su rechazo fue cuestión de elección, no me eligió a mi. -

- Tal vez no luchaste lo suficiente. - Sugirió ella, un tanto animada mientras terminaba su trabajo y sacaba los guantes de sus manos.

- Tal vez simplemente no me quería. - Dijo Yoongi para luego salir del sanitario, tenía una especie de bolsa plástica en su cuerpo para no mancharse de tinte y papel aluminio cubriendo su cabello, Suran sonrió porque su seriedad y falta de convicción en sus palabras eran todo lo contrario a como se veía. Luego lo siguió, encontrándolo atento al paisaje desde el balcón de su estancia. - Se llama Jimin. - Comenzó él.

- Jimin es un nombre lindo. - Comentó y Yoongi negó con la cabeza, aún sin saber la historia Suran parecía predispuesta a Jimin. - Me la imaginó pequeña, con esas mejillas bonitas que tu dices y una mirada dulce. -

- No es ella, es él. - Corrigió. - Jimin es hombre. -

- Oh... - Murmuró. - Bueno, mientras sea la persona que amas, ¿qué más de lo que tenga entre las piernas?. Entonces... Jimin eligió a otro antes que a ti. -

- Sí, en realidad siempre lo supe, pero estaba convencido de que un día me iba a elegir, vivía para él no había otra cosa en mi que no fuera Jimin. Esa noche en el supermercado estaba convencido de que podía vivir apartado, pero solo han pasado unos días y siento que estoy perdiendo la razón. -

- ¿Cómo estás seguro de que él no te quiere?, dices que ha sido algo de años, teniéndote cerca ¿cómo estás tan seguro de que no le gustas un poco? -

- Lo ví besándose con otro. -

- ¿Y le diste la oportunidad de que te explicará?, cuando mi novio nunca busco explicármelo por más que insistí, y aún así lo creí necesario. Si han pasado juntos muchos años, entonces te quiere, tal vez no de la manera que esperas, pero si en estos momentos Jimin esta triste por que te hayas ido ¿no crees que fue algo egoísta dejarlo? tal vez necesite tu amor aunque no te ame, tal vez no era el indicado, pero un día esa persona llegará-

- Quieres cállarte mujer, no me hagas dudar de mis decisiones, ya me convenciste del cabello rubio y créeme que eso ya es demasiado... A propósito, esto pica. -

- Es porque es hora de enjuagarlo, vamos. -

...

Taehyung soltó un prolongado suspiro cuando el pelirojo al frente le cedió el paso al lugar, una vez dentro quedó petrificado, sus ojos enormes moviéndose con rápidez y curiosidad por todo el lugar mientras parecía que no podía moverse, Hoseok dejó las llaves en el buro de la entrada y procedió a quitar su chaqueta, todas acciones lentas y nerviosas. Taehyung lo hacía sentir nervioso.

- ¿Esto es lo correcto? - Dijo finalmente el más alto, sin saber exactamente qué sentir cuando encontró los ojos de su mayor.

- No lo sé, pero ya es muy tarde para abortar misión. - Respondió logrando una pequeña y forzada sonrisa en el otro. - Sé que es muy extraño, Taehyung, pero puedes estar tranquilo, no te haré daño-

- No estaba pensando que me harías daño. - Se apresuró a decir y negó con la cabeza. - Últimamente me ha pasado de todo, nunca he tenido lo que digamos... buena suerte, yo simplemente no termino de creerlo. Para ser honesto, siento que me estoy aprovechando de ti. -

- Claro que no. -

- ¿Cómo lo sabes?, ¿Qué tal que sólo estoy aquí para robarte todo lo que pueda o matarte?, no nos conocemos. -

- Tenemos toda una vida para conocernos. - Aseguró sin dudas, la verdad era que Hoseok nunca había pensado en cosas como esas, simplemente hizo lo que creyó correcto para ambos.

Ante las palabras del pelirojo, Taehyung sintió que su corazón se detuvo por un instante para luego latir con rapidez, quizá Hoseok no se daba cuenta, pero cualquier comentario dulce, por simple que fuera, lo hacía volar a las estrellas, porque nunca nadie lo había tratado de esa manera.

- Creo que estoy enamorado de ti. - Admitió con decisión, apretando los labios mientras veía pensativo a Hoseok. En cambio este frunció el ceño, no en un gesto de negación, más bien dudoso.

- Eres lo primero que he decidido en mi vida, no sabes cuanto estoy mandando a la mierda por tenerte aquí, pero lo vales Taehyung, lo valemos. Dices que no nos conocemos, pero me has hecho hecho sentir más pleno y feliz que cualquier otra cosa, no necesito saber demasiado de ti para saber que estoy encariñado, eres encantador. Y si piensas que lo único que me convenció de esto es el sexo voy a decirte que estas muy equivocado, lo que me haces sentir va más allá de un gusto físico, nunca he sido bueno expresandome porque nunca me he expresado de verdad, y para resumidas cuentas;  estoy enamorando de ti, Taehyung. -

Palabras en el aire frío que gobernada aquel lugar, el castaño había soltado un débil jadeo desde lo más profundo de su ser, aquellas palabras le habían calado hasta el alma, por el significado real y sincero que tenían. Hoseok estaba enamorado de él, ¿cuantas eran las probabilidades de que fuese una mentira?; demasiadas, pero el pelirojo lo había mirado en todo momento, con la honestidad reflejada en su mirada. ¿Darse una oportunidad?; No sólo a Hoseok, también para él, por primera vez se sintió querido y había sido tan sublime que no podía creerle. Pero cuando menos se dio cuenta ya estaba llorando, porque estaba asustado de no ser lo suficiente para sí mismo y mucho menos para Hoseok. Y este último lo vio tan ensimismado en su pena que se acercó para tomarlo. Protector entre sus brazos mientras sentía las lágrimas de Taehyung venir de sus bonitos y lastimados ojos hasta su mismo cuello.

- No estás enamorado de mí. - Aseguró, más para sí que para Hoseok.

- No sabes como me siento Taehyung, si me hubieses conocido antes sabrías cuan sincero estoy siendo. Quiero que seas libre, que seas feliz, no importa si no es a mi lado, me liberaste, no es una deuda que debes pagarme, pero daría todo de mi porque te quedaras conmigo. No jures lo que no sabes. -

- Te amo. - Sinceró el menor, sintiendo los brazos de Hoseok estrujarlo más fuerte, pero nunca sin llegar a lastimarlo, solo para tenerse cerca y en un gesto dulce besarle sus sienes.