Capítulo 8. Both sides.

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»Annie

Las palomitas para microondas daban vueltas dentro del electrodoméstico. Ya me encontraba en pijama para esperar a Bárbara. Mamá seguía repitiéndome que echara llave cuando la recibiera y que me asegurara de no dejar afuera al perro.

–Ya mamá, vais a llegar tarde a la cena –Papá tocaba la bocina desde el auto y el cambio de luces brilló en la ventana.

–Vale. Nina tiene llave para entrar sola cuando vuelva, así que no abras – Dijo por milésima vez. Me besó en la frente y tomó su bolso – Nate está en su habitación. No duerman tarde. Adiós.

Unos minutos más tarde, Bárbara ya estaba en el umbral. Era nuestra noche de películas mensual. Se dejó caer en el sofá mientras yo traía las palomitas a la sala. A mi regreso, tenía los ojos pegados a la pantalla de su móvil.

–¿Qué sucede? – Pregunté sentándome a su lado y echando un puñado de palomitas en mi boca.

–Es... twitter. Oh, oh – Frunció sus labios sin dejar de leer – Esta noche es el concierto en Los Ángeles, el que graban para el DVD.

–¿Ah, sí? Lo había olvidado – Mentí. Claro que no lo había olvidado. Como tampoco había olvidado todo lo demás. Consultaba mi pantalla cada pocos minutos, solo para encontrar una bandeja de entrada vacía... o bien, sin el mensaje que yo estaba añorando recibir – ¿Por qué esa cara?

–Es que... hay una página cubriendo el show, como siempre. Dicen que las chicas que están ahí afirman haber visto a Harry llorando durante Change My Mind.

–Tienes que estar bromeando. Siempre dicen lo mismo con Niall y la verdad es que nunca... – Pusó el aparato contra mi cara antes de que pudiera seguir hablando. Parecía una foto vieja, tomada en 2012 a juzgar por las ropas. Pero, efectivamente, Harry tenía los ojos llorosos y enjugaba las supuestas lágrimas con el dorso de la mano.

–Esa foto no es reciente... ¿Por qué va vestido así? – Me negaba a aceptar que eso fuera de esta noche. Él no podía estar llorando esta noche.

–Es todo por el DVD, cosa de ellos. Igual, te has enterado que ha salido ayer por la noche y lo han filmado ebrio – Comentó con gesto preocupado.

–¿A dónde quieres llegar con eso?

–Tú llorando en un avión, Harry emborrachándose y llorando en pleno show... Los dos están con la regla o me juego el pescuezo a que algo ha pasado en ese hotel – Lo que pasaba con Bárbara era que a veces podía resultar muy perceptiva. Había atado los cabos correctamente y ahora tocaba contarle toda la historia.

Oyó todo muda. Lo bueno de ella era que podías salirle con la más grande locura, y no te juzgaría durante el proceso. Seriamente creo que Bárbara ha caído del cielo.

–Lo que te pasa es que tienes un ídolo que es toda una nenaza – La voz de mi hermano Nate me hizo respingar en mi asiento. Se tiró sobre nosotras con toda su anatomía larga y desgarbada de quince años, su cabeza apoyada en mi regazo – ¿Qué hace ese payaso llorando en un concierto?

Nate era mi hermano menor y molestia mayor, le llevaba unos dos años. Nina me llevaba cuatro. Entre ellos ni se trataban,por la diferencia de edad, pero a mí me tocaba sufrirlos a los dos.

–Nate, no hemos solicitado tu presencia, que yo recuerde – Ignoré olímpicamente sus ataques y lo empujé fuera de nuestras piernas. De no ser por su brazo, se hubiera dado de bruces contra el linóleo.

–Trátame mejor, Lance podría enterarse de todo – Se levantó sacudiéndose las palomitas de la camiseta.

Bien, ¡Muy bien! No puedo joderme más. El pequeño marmota que se ahogaba en admiración por Lancelot, la única persona en casa que podría ir con la historia a mi novio... ahora estaba enterado.

Idol Zoned (h.s) // 2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora