Relatos Entre Sábanas Húmedas

LA PRIMERA VEZ III.

Entramos al depa y mientras el entraba a su cuarto a quitarse la ropa mojada yo me puse a buscar algo de música para poner, mientras esperaba que saliera para entrar al baño que estaba dentro de su cuarto.

Me sentía como en casa ya que siempre pasaba Por ahí metida visitandolo.
Tomé un vaso en la cocina me servirí un poco de gaseosa y puse a calentar agua..

Salió del cuarto envuelto solo bajo el torso con una toalla y con otra secaba su cabello oscuro que hacía juego con sus ojos intensos y esos labios carnosos que jamás había mirado tan detenidamente.
Mierda!! Qué pasaba conmigo había puesto tanta atención en el, en su torso desnudo y en lo sexy que se vía así, jamás lo había mirado de tal forma es más había dormido con el en varias ocasiones sin tomar asunto de cuánta belleza había en mi amigo, WOW encerio qué pasaba por mi cabeza en ese instante.

Sonrrio al ver mi cara al verlo así y me preguntó coqueto si me gustaba lo que veía, obvio negué para no subir más su maldito ego que lo tenía por las nubes.

- NO!!- dije riéndome algo nerviosa.._

- no me mientas mujer, sé que mirabas so bueno que estoy - dijo riendo mientras se acercaba a mi.._

- estás loco, mejor voy a sacarme está ropa mojada antes de agarrar un resfrio - le contesté mientras lo alejaba de un suave empujón.._

- ponte algo mio de el clóset o ponte mi bata para secar tu ropa - dijo alejándose de mi en dirección a la cocina.._

- ok Ricky, eso haré- contesté entrando al cuarto.._

Allí comenzó a desvestirme hasta quedar desnuda, tomé la ropa y la puse en la lavadora con lavado y secado completo.
Tomé una ducha ligera y luego salí a secar mi cabello con una toalla mientras me miraba en un gran espejo que había en su cuarto. Fue en ese momento que Note la puerta entre abierta y pude ver cómo se alejaba el de ahí, WOW!! me había estado espiando este idiota, amo a su amiga chica a la que trataba de cabra chica, algo había pasado por su cabeza y yo lo averiguaría.
Me envolvió únicamente en su bata de seda, y salí decidida a preguntarle que hacía espiando mientras me vestía..