Visitas

447 49 3
                                    

-¿Como sabes donde vivo?- pregunté lo mas tranquila posible sin darle paso al miedo que crecia cada vez mas.

Pude escucharlo reir en voz baja desde el otro lado de la puerta.

-Tienes razón Nina... lo siento.  Ammm Sadja me dijo donde vivían, pensé que quizas te gustaria algo de cenar.

-Sadja.- entrecerré los ojos maldiciéndola.

Queria acostarme en la sala a ver peliculas con un poco de cholate caliente hasta quedarme dormida y por un momento pensé en pasarle doble cerrojo a la puerta dejándolo afuera, sin embargo muy en el fondo sabia que quería evitar estar sola esa noche. Quizás tener compañia no era tan malo despues de todo.

-Que traes de cenar?- pregunte curiosa.

-Alguien me dijo que amas la pizza de champiñones con orilla de queso y traje otra para mi de pepperoni- contestó Daniel con tono orgulloso y no pude evitar sonreír.

-Solo porque traes pizza puedes pasar a mis dominios.- dije abriendo la puerta dedicandole una sonrisa de lado.

-Sabia que no fallaría.- rio. -Hola Nina... me da gusto verte.- pude ver una pequeña dosis de ternura en sus ojos.

Se veia tan bien. Llevaba puesta una camisa color azul marino que se ajustaba perfectamente a su cuerpo y unos jeans deslavados. Sus ojos con tonalidades color miel parecían sonreír al verme.

-Hola Daniel.- le devolvi la sonrisa.- Toma asiento.- señalé los sillones frente a la tele.- Ire por los platos para cenar.

-Traje jugo de manzana para tomar... Nada de alcohol, lo prometo.

-Jugo de manzana suena bien.- dije convencida desde la cocina.

Regrese a la sala y pude ver que ya tenia Netflix en la television.

-Alto ahi amigo!.- dije seria.- No creas que Netlfix and chill.- lo mire con insistencia.

Soltó una carcajada moviendo la cabeza negando mi comentario.

-No era lo que tenia en mente y no me desagrada la idea, pero se que tienes mas ganas de cenarte esa pizza que cenarme a mi asi que... no sera hoy Nina lo prometo.

-Ni mañana ni pasado.- dije riendo.- En serio Daniel tengo hambre y quiero ver una buena serie.

Terminamos platicando sentados en la alfombra tomando jugo de manzana, el me hablo sobre su familia,originaria de Armenia pero que por motivos economicos tuvieron que emigrar a  Canada, sin embargo se mudo a Nueva York a estudiar una ingenieria, tenia un hermano menor que adoraba con el alma pero tambien le hizo pasar el peor coraje de su vida cuando siendo pequeños se comio un pastel que su mama habia horneado para una fiesta y le echo la culpa a Daniel.

-Jamas olvidare como pateo mi trasero mi mama ese dia. Lo odiare por eso siempre.- dijo dando un trago al jugo mientras yo seguia riendo.

Me miro con curiosidad como pensando como formular su pregunta, hasta que hablo.

- Y tus papas? tienes familia?.- dijo soltanto cada una de esas palabras con cuidado.

-No... ni papas ni familia Daniel.- mire los dedos de mis pies.- Lo mas cercano a una familia son Nikki y Sadja.

-Yo.... lo siento... lo siento mucho.- dijo apenado.

No es un tema del que me guste hablar, de hecho detestaba hablar sobre el asunto pero ya era hora de madurar, de seguir adelante.

-Se fueron en el carro y estaba lloviendo... tenia doce años. Por eso me vine para Estados Unidos, Rumania ya no era un lugar para mi.- dije pasando mis dedos por el borde del vaso que tenia entre mis piernas. Pude ver como se tensaba su cuerpo ante mi comentario, despues de unos minutos hablo de nuevo....

Mía.Where stories live. Discover now