「 Escenarios 」Kaminari Denki.

10.⚡

Lo siento.

Suicide!Reader
Quirkless AU.

Warning!
Tema relacionado con el suicidio.
No se busca alterar o transformar alguna mente a este problema.

El rubio acomodaba sus materiales dentro de su mochila personal, excepto su teléfono, pues siempre le mandaba a ella un mensaje todos los días, a la misma hora, pues ella siempre dijo "Lo único que me alegra el día gris, es el brillo de mi teléfono al ver tus mensajes..."
Tomó su teléfono, lo desbloqueó mientras salía del aula, ignorando el llamado de su amigo pelirrojo y el rubio ceniza, "Ella me importa más".
"¿Cómo te sientes hoy?, ¿Te han hecho algo o te han dicho algo?" Y envío el mensaje.
Guardo su teléfono en el bolsillo de su pantalón y veía a sus tres mejores amigos acercarse a el, Kirishima, Bakugo y Sero.

- ¡Hey, maldito Pikachu barato! ¡Te estábamos llamando, sordo! - Le reprochó el rubio ceniza de ojos carmín, el de ojos dorados alzó los hombros restando importancia.

- Tenía algo importante que hacer, no tenía porque meterlos en ello. ¡No sé preocupen!

Los tres amigos se miraron y alzaron los hombros creyendo a su amigo de ojos dorados, comenzaron a caminar fuera de la gran academia U.A.
Los cuatro caminaban a un puesto de comida, pues dos de ellos tenían hambre, pues el bento que llevaban a veces no alcanzaba a llenarles el hambre.
" Kaminari, ya no quiero ir a la academia. Me gustaría estar en la tuya, para estar contigo, siempre me apoyas y preguntas por mí. Eso me alegra siempre, ¿Y a tí?... " Respondió la amiga del rubio por mensajes.
El rubio de ojos dorados sacó el teléfono de su pantalón, con la intención de responder al mensaje de su amiga, de no ser por su amigo ceniza que le quitó el teléfono, pues siempre lo veis con el.

- ¡Pikachu barato! ¡Deja el maldito teléfono un maldito día! Por eso no tienes novia, la mierda de celular te idiotiza, cabeza hueca. - Le regañó.

- ¡P-Pero, Bakugo! P-Puede ser importante, por favor devuélveme mi tel-

Kirishima interrumpió a su compañero señalando que el ceniza tenía razón. El rubio últimamente estaba más pegado al teléfono que de costumbre, por lo que lo alejarían de el un tiempo.
El ceniza guardó el teléfono del rubio en el bolsillo de su pantalón, algo que alteró al mismo, "pudo ser ella" pensó.
Pues su amiga nunca se tardaba en responder sus mensajes, lo hacía a tiempo.
Con miedo a esa idea, intentó despejarse al obedecer a sus amigos, "Un día no causará daño, estará bien", se dijo a sí mismo, tratando de alejar las malas ideas de su mente.
" Kaminari, mi vida empeora día a día, tú eres la única luz que la ilumina. No me dejes, porque sé que no lo harás, ¿Verdad? ", volvió a escribir la amiga del rubio. Pero este no estaba al tanto de sus mensajes pues el teléfono le había sido arrebatado por una "bestia", según el.
El rubio trataba de disfrutar el día con sus amigos, pues de un momento inesperado, olvidó el estado en el que se encontraba su amiga y disfrutó con sus amigos.
Pues que mal había hecho al hacerlo, porque sabía del estado inestable de su amiga, sabía de lo que pasaba pues él era "Su hombre para llorar y desahogarse".