Pure Sex [Joerick]

17

Dos semanas habían pasado desde el problema con su padre. No le había hablado durante ese tiempo. No quería saber nada de él.

Ahora el pelinegro se encontraba en la mesa junto a Chris. Ambos con las manos cruzadas viendo como Yoandri se acercaba demasiado a Joel.

- definitivamente es una perra, culo barato- bufó el castaño

Erick asintió antes de levantarse e ir a tirar la bandeja de su comida seguido por Christopher.

- ¿no harás una estupidez cierto?- preguntó a su lado en un susurro

-no, pero Joel se arrepentirá de esto- empezó a caminar delante de la mesa de Joel antes de caminar hasta la mesa donde se encontraba Andrew

- hola- saludó con una sonrisa mientras se sentaba.

Chris giró los ojos antes sentarse. No era un secreto el que no le cayera bien Andrew.

- Erick... ¿qué haces aquí?- preguntó tomando el sándwich de pollo entre sus manos

- eso no importa, creo que después de lo pasó todo entre nosotros quedó mal y pues....- el pelinegro no pudo terminar por que derepente una mano se posó en su brazo jalandole fuera de la cafetería.

Le tomó unos segundos darse cuenta que era Joel. Sonrió. Su plan había funcionado.

- ¿qué crees que haces?- preguntó el rizado cuando ya estaban afuera

-sueltame- habló indignado- no quiero que me toques, has estado tocando a un hijo de puta así que si no te lavas las manos mejor alejate- gruñó

Joel sonrió antes de tomarle la cintura.

- ¿te pusiste celoso? ¿De Yoyo?- preguntó con cierta burla

Erick puso una cara de indignación- ya hasta nombre tierno le pusiste, vete a la mierda- mencionó antes de separse bruscamente e irse.

Joel negó con la cabeza divertido antes de ir tras él.

Lo detuvo antes de que cerrara la puerta de la habitación.

- lo inventé en ese momento. Nunca lo he llamado así, yo te amo a ti, Erick.

- no importa lo que digas, algunas cosas se demuestran con hecho, no sólo con palabras, Joel

El rizado suspiró antes de cerrar la puerta y sentarse en la cama.

- parece que ya estamos casados, parecemos dos idiotas inseguros de lo que sentimos, tienes miedo y yo también ¿porqué es tan difícil aceptarlo?

- tal vez porque sabemos bien lo que sentimos- susurró- pero ya lo dijiste, nos da miedo

El rizado miró a Erick detenidamente y no pudo evitar pensar que era lo más perfecto que había visto en su vida.

- eres hermoso, siempre lo has sido, yo nunca me fijaría en Yoandri. Para mi solo es una persona de nuestra mesa.

- tal vez para ti pero él te mira como si ya fuese a comerte, joder, es tan molesto ver eso

- lo sé, a mi también me molestó verte cerca de Andrew. Es como si él tuviese la oportunidad de quitarte de mis brazos y no quiero ni pensar que un día yo pueda perderte, creo que me volvería loco

Erick se acostó en la cama y Joel siguió su acto. Ambos miraban el techo sin decir ni una sola palabra.

Erick pensaba que tenía que pasar por muchos muros para poder llegar  ser feliz con Joel. En primer lugar estaba su padre, él no lo queria con Joel y tal vez era capaz de dejarlo sin herencia por eso.

Segundo muro estaba su reputación en el internado. Tal vez el que tendría más fama sería Joel porque al fin alguien pudo conquistarlo. Y fue Joel, su Joel.

El tercer y menos importante era Yoandri. Tal vez algún día le pudiera sacar los ojos para que no viera lo que era suyo. Maldición ese chico era muy idota.

Joel tal vez no era la mejor persona pero era lo único bueno que le había pasado.

Como las cosas cambiaron desde la llegada de ese chico con cuerpo perfecto y mirada tierna.

Y es que desde el primer momento todo se fue a la mierda por él.

Tuvo que aceptar a alguien más no sólo en su habitación si no que también en su vida.

Erick estaba contento con eso. No podía evitar sonreír con sólo pensarlo y fue allí cuando se dio cuenta.

Ya no había vuelta atrás, se había enamorado.

Se había enamorado perdidamente y profundamente de él.