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Erick salió del baño con su ropa puesta. Miró por todos lados pero Joel no estaba. Suspiró y salió de la habitación.

Tenía algunas cosas que hacer en la empresa. Él tenía el permiso de salir cuando quisiera así que no habría problema alguno.

Salió a parqueo y se subió al auto. Suspiró y en su mente pasó la imagen del rizado sonriendo. Joel era un idiota pero le gustaba.

Negó con una sonrisa que desapareció rápidamente al recordar lo que le había hecho.

Un idiota, mentiroso pero le gustaba.

Joel se encontraba en la cafetería con la mirada de todos los chicos sobre él. Giró los ojos antes de ir a traer su almuerzo.

La fila no estaba tan larga pero no parecía avanzar. Escuchaba murmullos entre los chicos en las mesas.

De pronto todo quedó en silencio. Levantó la vista para ver cuál era la razón. Miró a Erick y a Chris entrar por la puerta.

El pelinegro ya había regresado. Tenía un corte de cabello direfente que lo hacía ver más lindo. Tenía puesto un jean negro pegado que lo hacía ver más sexy.

El pelinegro venía riendo con Chris. Parecían felices. Joel suspiró antes de decirle a la señora su pedido.

Caminó hasta su mesa como ya tenía de costumbre y se sentó. No pasaron ni minutos antes de que Zabdiel llegara junto con Yoandri.

- ¡hey!- Yoandri se coló en su cuello- ¿cómo estás? Hiciste falta hace un hora, estábamos en la habitación viendo una película

- tuve algo que hacer- murmuró sin ganas

No supo si Yoandri contestó o no porque no le siguió prestado atención. Toda su atención la tenía aquel chico delgado, pelinegro.

Joel no sabía porqué pero tenía la enorme necesidad de ir donde Erick y explicarle frente a todos lo que en verdad le estaba pasando pero sabía que si lo hacía el pelinegro de igual forma lo dejaría ignorado.

- debo irme- habló antes de levantarse y caminar afuera.

Solo escuchó un grito de Yoandri diciéndole que ni siquiera había tocado la comida pero es que no tenía hambre. No tenía hambre desde que se había peleado con Erick.

Abrió la puerta de la habitación y suspiró. Esta no era tan buena como la de Erick. Estaba más vieja y parecía sin gracia alguna.

Se sentó en la cama y tomó el libro que tenía en su mesita de noche. Suspiró al leer ese verso que lo tenía cautivado. "El amor no es fácil de explicar pero es fácil de demostrar".

Tal vez la frase era cierta pero ¿cómo hacía para demostrarlo? Maldijo al no tener ni una idea. Estaba desesperado, no encontraba una manera por la cual llegar a Erick.

Joel no conocía mucho a Erick pero si sabía que era demasiado orgulloso como para dejar que alguien lo pisoteara y él lo hizo de la peor manera.

Erick tenía mucho tiempo de estar aquí, tenía casi el mismo tiempo que Yoandri. ¡Yoandri! ¡Yoandri era su solución!

Corrió sin mirar atrás a la cafetería para ver si lograba encontrar al azabache. Miró hacia la mesa donde lo había dejado con Zabdiel pero ya no estaba.

- ¡maldicion!- murmuró antes de correr hacia la habitación de su amigo.

Tocó la puerta con cierta desesperación pero nadie abrió. Maldijo una vez más y corrió hacia la habitación de Zabdiel. Tocó la puerta con demasiada desesperación.

La puerta se abrió dejando ver al chico de cabello rulo con el ceño fruncido.

- ¿qué mierda...? ¿Joel? ¿Porqué tocas así?- preguntó girando los ojos

- ¿Yoandri? ¿Él está aquí?- preguntó el rizado intentado ver por encima del hombro del contrario

- si, allí está- Zabdiel rodó los ojos otra vez y se hizo a un lado para que el rizado pudira pasar

Joel entró y miró a Yoandri acostado en la cama mirando hacia la televisión

- Yoandri, tenemos que hablar, es algo sumamente importante

Yoandri frunció el ceño y apartó la vista del televisor para poder ver al rizado que estaba tratando de regular su respiración.

- ¿de...?- el azabache preguntó sin ganas tratando de enfocarse en la película

- de Erick- contestó Joel apagando la televisión

- ¡oye! ¡Estaba en la mejor parte!- gritó quejándose

- La verás cuando termines de hablar conmigo, solo te haré unas cuantas preguntas

Yoandri asintió sin más remedio y miró a Joel. Rodó los ojos esperando que el rizado preguntara.

- necesito que me digas cómo hago para que Erick me perdone

Yoandri no pudo evitar reír cosa que confundió a Joel porque él no veía nada gracioso en su pregunta

Yoandri paró unos segundos después para ponerse serio aunque siempre se podía ver una sonrisita de burla hacia Joel

- ¿perdón de Erick? ¡Imposible! Erick es la persona más orgullosa y rencorosa que he conocido en mi vida.

- ¿en serio no hay manera?- preguntó Joel sin ganas

- No, no la hay. Una vez me di cuenta que un chico le jugó una broma y él se enojó tanto que al chico lo expulsaron luego de la paliza que Erick le dió. Al día siguiente la empresa del padre del chico estaba en quiebra

Joel tragó fuerte. Por lo menos Erick no había hecho nada contra él todavía.

- Otra vez escuché que Andrew su ex novio tenía un amante, dicen las malas lenguas que Erick trató de cortarle sus partes íntimas pero no lo hizo porque la directora llegó y lo detuvo, pero como siempre Erick salió muy bien librado.

Joel sin querer llevó sus ojos parte baja y volvió a tragar duro. Erick era más fuerte de lo que pensó.

Pure Sex [Joerick]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora