Atracción Rusa

CAPITULO 35

Evanescence - My immortal

La cabaña era fría, oscura, aterradora. Pero no mas que la sensación de encontrarme de nuevo con Charlotte. Asi que lo único que hago es colocarme de pie e intenar buscar algo para calentarme, una sabana, una cobija o algo para sentirme abrigada.

Me encuentro empapada por el agua de la lluvia y temblando tanto que mis dientes chasquean, en momentos como estos solo queda aferrarce a la esperanza, a que todo saldrá bien, a que estaremos bien. Pero esas esperanzas se desvanecen en el frío aire que se cuela por las viejas ventnas de aquella casa.

Es inútil pensar que volverá, que vendrá y nos ayudará, si lo que ha dicho Charlotte es cierto Mishenka esta muy lejos de encontrarnos.

- Esta bien, saldremos de esto, no se como pero saldremos de aquí - las lágrimas son imposibles de conrolar.

Me levanto con dificultad del suelo sintiendo la herida punzante en mi pie, me acerco al lado de la vieja nevera y me introduzco en un pequeño y reducido espacio para calentarme asi misma.

Cierro los ojos pensando en una idea de como salir de allí, de como enfrenatrme a esa mujer sin que me haga daño, busco algo cercano para defenderme de cualquier cosa que se atreva a hacerme, lo único que consigo es una vieja vara de madera, no es muy grueso pero si puedo provocar herirla con el.

- Laurent..- escucho su voz detrás de la puerta. Me acomodo de modo que no pueda verme desde el el epacio en el que me encuntro-. Se que estas ahí esconderte, no te servirá de nada.

Oh Dios. Me aferro con fuerza al objeto que tengo en mis manos. Puedo ver su figura iluminada por los relámpagos, su vista se fija en el lugar en el que me encuentro. Antes de que se abalance sobre mi la esquivo corriendo hasta la puerta.

- ¡Quédate quieta maldita!- me sujeta fuerte del brazo y la fuerza que jamás había sentido en mi vida sale en ese instante,me volteo para encararla.

- ¡Suéltame perra loca! - la golpeo fuerte con la vara y ella cae herida en el suelo.

Es mi oportunidad de salir de allí e ir hasta la carretera para pedir ayuda, corro con dificultad por el barro que se ha creado en el pasto, la lluvia es demasiado fuerte y no puedo divisar el camino de regreso.

- ¡¿Donde esta joder?! - grito desesperada mirando a todos lados-. Por Dios .. - sollozo mientras sigo mi camino.

Entonces mi vista se fija en las luces de parqueo del auto, trato de seguir la luz, y cuando ya me veo cercana a alcanzarlo una mano me toma por la espalda.

- Te tengo, ¡maldita perra me has golpeado!

- ¡Suéltame! - forcejeo tratando de librarme de ella.

- ¡Nunca! - forcejeamos hasta que ambas perdemos el equilibiro y caemos rodando por un camino de piedras golpeándonos con las ramas, mi primera reacción es colocar mis manos en mi vientre evitando cualquier roce de algo con el.

Cuando por fin nos detenemos me cuesta levanatarme, no hay un parte de mi cuerpo que no duela, Charlotte esta tratando de recobrar su compostura y me mira furiosa.

- ¡Esto es tu madita culpa! Me quitaste el amor de Mishenka.

- Él nunca te ha amado, no entiendes eso, él siempre te vio como a una amiga, pero ahora ni si quiera te ama como a una.

- Mishenka no entiende lo hice por él, esa mujer era su debildiad al igual que tú, él es un hombre oscuro, no merece inservibles a su lado. Pero en cambio consiguió a otra muejr en su vida, te prefirió a ti en vez de a mi, estaba furiosa, ocho años escuchándolo y recibi lo peor.