Kim Namjoon, un chico del instituto que está en su ultimo año, parece no tener a nadie alrededor, y no quererlo realmente. Con sus problemas de agresividad ha alejado a todo aquel a su lado, o al menos eso es lo que corre por la universidad
Gigyu, u...
Y así siguió la semana. Yun aun seguía algo traumatizada por lo que ocurrió. Tenía pesadillas o a veces si algo le recordaba a la pelea se quedaba gélida como una roca por un rato. El doctor dijo que se le iba a terminar pasando con el tiempo y que él había ayudado con todo lo que pudo. Ahora Yun solo necesitaba apoyo y cariño, y yo estaba totalmente dispuesta a dárselo.
Cada que podía la hacía reír, le daba dulces o cocinaba sus cosas favoritas, la llevaba a ver a Namjoon(todos los días) y a pasear. Estaba mejorando de a poco.
Namjoon, estaba también mejorando. Ya podía ponerse de pie solo y sentarse. Obviamente le dolía horrores, pero podía y eso era suficiente por ahora.
Su padre, aún no despierta, y hasta que no despierte, no hay juicio. Además, Namjoon debería curarse antes para tener fuerzas. Igual por ahora, si estaba en coma, no iba a herir a nadie.
***
-Hola bello durmiente.- le susurré a Nam que estaba despertando y hacía ruiditos con su garganta mientras se removía en la camilla del hospital.
-Hola.-dijo finalmente viéndome con los ojos entreabiertos y una sonrisa adormilado.- Y Yun? -dijo al notar un vacío a mi lado.
-Fue a comprar dulces en la cafetería. Dijo que tenía hambre y le di dinero para que comprara lo que quisiera. Ya debe estar por venir. -Namjoon dio palmaditas en la camilla para que me sentara al borde de ella, y yo seguí su señal y me senté al borde poniendo mi mano en su estómago delicadamente.- Cómo te sientes?
-Mmm...-dice quejándose un poco cuando se remueve para intentar sentarse. Yo lo tomo del hombro con cuidado y lo vuelvo a recostar, a lo que el decide hacerme caso y quedarse acostado.- Pues me duele cono mil demonios la costilla, pero por demás todo bien. Ya los demás golpes y heridas están bien, eso es bueno.- dijo tocando su cabeza en donde antes había una herida grande.
-Y crees que te dejen de alta en mucho tiempo?
-De hecho, creo que me dejarán ir a casa pronto, pero creo que me quedaré aquí hasta mejorar lo suficiente para cuidarme solo. No quiero andar como una carga sabes?
-Qué dices? Estoy nada más esperando para que puedas ir a casa y cuidarte yo, además de hacerte comer algo mejor que eso,- dije señalando un plato que estaba en una mesa al lado de la camilla con una comida que realmente no sabía qué era- y tu me estás diciendo que no quieres ser una "carga"? Quiero cuidar de ti, Nam. No seas tonto.- dije sonriéndole y él estaba serio.
-Si es una carga. Ya haces mucho con Yun y ella es una niña...- me harté y reaccioné con un impulso para que se quedara callado de una vez, y claramente funcionó a la perfección. Me acerqué a él y le di un beso, lo que lo puso tenso de pronto e hizo que dejara de hablar. Luego de unos segundos rápidos me separé, viendo su cara atónita. No se lo esperaba.
-No, no lo eres. Y me alegra que no seas un niño. -dije divertida y escuchamos la puerta abrirse.
-Oppa!!! Traje dulces!! Quieres mentas??- dijo y vino corriendo para sentarse de piernas cruzadas en la punta de la camilla. Nam seguía un poco perdido por el espontáneo beso pero logró reaccionar luego de que Yun movió y zarandeó su pierna varias veces.
-Hola linda! Si, dame una puedes?- Yun alegre le pasó una menta y él se limitó a comerla, para luego verme a mi sonriendo algo confundido. Yo solo me reí por su tierna reacción.
***
-Aghj! Maldita sea!!-decía Namjoon mientras yo lo cargaba para pasarlo de la silla de ruedas a la cama. Lo habían dado de alta esta semana y yo lo cuidaría mientras que él estuviese aún herido.
-Lo siento, lo siento. Respira si? Falta poco.
-Agh!! Mierda!!...- dijo y yo terminé de colocarlo en la cama boca arriba. -Auch...-dijo y paso su brazo por sobre su cabeza para cubrir sus ojos con su antebrazo. Yo llevé mi mano a su herida y alcé muy poco la camisa para verla. Él se tensó como siempre.
-Parece que está todo bien. Quieres una pastilla para el dolor? -le dije y él asintió sin quitar su brazo de su cara. La busqué y se la di.
-Nada duele más que esa maldita cosa rara que me hicieron hace dos días. Comenzaron a palpar con un martillo mi herida! Como se supone que eso ayude? Creo que me rompieron la costilla en unas 8 partes más.- dijo y yo reí ante su expresión de queja. -Y además te burlas de mi sufrimiento! Es el colmo!- estallé a carcajadas.
****
Yo volvía del colegio sola el viernes, ya que Yun se había ido con una amiga a su casa para quedarse a dormir. Iba de prisa porque Nam me había dicho que se sentía mal, y que la herida le dolía y ardía más de lo normal. Iba volando prácticamente hasta que llegué a la puerta de la casa y abrí rápido con la llave para entrar. Escuché quejidos de dolor del piso de arriba y lancé mis cosas para correr por las escaleras y abrir rápido la puerta de la habitación que estaba a un lado de mi cuarto. Namjoon, estaba con una mano sobre su estómago sin apretar y la otra estrujando fuertemente la sábana, mientras su cara reflejaba sufrimiento total y una capa de sudor cubría su frente y su cuello. Las raíces de su cabello estaban húmedas por esto mismo. Yo salí corriendo al lado de la cama y toqué su frente. Fiebre. Mierda.
-Inyéctame la cosa para el dolor, Gi. -dijo con dificultad y luego tragó fuerte. Yo rápido reaccioné y saqué el líquido y la jeringa, para luego de unos segundos estar inyectando a Namjoon cerca de la herida. -Aghh!!! Mierda!!!....- decía medio ahogado entre su saliva que bajaba y subía por su nuez cada tanto.
-Traeré un paño húmedo. -estaba demasiado preocupada. Era algo que podía pasar, lo advirtió el doctor, pero estar en una situación así igualmente lleva a uno a unos nervios inmensos.
•~•~ Luego de un rato, Namjoon mejoró y ya se sentía bien.
-Gracias.
-Por Dios, de nada Nam. No sabes todo lo que me preocupé. -dije sentada a su lado en la cama con las piernas cruzadas. Él estaba acostado, así que yo lo veía hacia abajo. -Pero ya estás bien.-puse mi mano suavemente sobre su muslo como símbolo de apoyo. Él, en vez de tensarse esta vez, puso su mano dudosamente sobre la mía y comenzó a acariciarla. Estaba rojo, eso si. Yo sonreía un poco y él me inspeccionaba con la mirada cada parte de mi cuerpo.
-Eres... perfecta sabías?Tu personalidad. Tu cuerpo, no hay nada que pueda criticarle. A veces me frustra. -Dijo y desvió la mirada hacia el otro lado.
-Como que te frustro?-dije sonriendo.
-Me provocas...-dijo por lo bajo y se puso rojo viendo hacia otro lado. Esa frase me recorrió toda la espina dorsal, hasta llegar a mi cerebro y hacerme reaccionar. Tenía dos opciones, y decidí la primera: seguir mis instintos. Por qué? Pues porque él sentía lo mismo.
Cap!!! Y obvio que lo que sigue es lo que tanto esperaban😂😂😂🙄🙄❤️ las amo mucho y gracias por leer! Si les gusta voten!!!⭐️
Att:Kei⚡️🍓 PD: se viene lo bueno!!!
🎁❤️:
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.