El Despertar

711 47 14
                                    

—Tony ya te dije que no como por millonésima vez— dice el científico mientras me da una mirada de cansancio —¿qué te hace pensar que será diferente esta vez?

—¡Vamos Bruce vive un poco!— le digo poniendo mi mano en su hombro y apretándolo un poco —y quizás la millón y uno sea mi número de la suerte. 

Él resopla y niega la cabeza pero logro vislumbrar una pequeña sonrisa en su rostro y eso lo considero un logro.

Además de que tiene una de las sonrisas más adorables que jamás allá visto.

—Bueno Brucie yo no quería usarla tan pronto pero no me dejas más opción, voy a tener que usar mi arma súper secreta para que aceptes ir— digo sonriendo confiadamente.

—No te refrieres a...

—Oh sí— le digo moviendo mis cejas de forma sugestiva.

—No lo hagas Tones, sabes que no puedo resistirme a ella— me implora con sus hermosos ojos cafés oscuro.

—Acepta a ir conmigo.

—Tony sabes que no es tan sencillo...

—Entonces no tengo más opción— digo dramáticamente.

—Tones no lo hagas por fa...

No lo dejo terminar y uso mi súper arma secreta y debilidad de Brucie (aunque a veces lo niegue), así que cierro los ojos, me concentro y pongo mi más tierna y perfecta cara de perrito triste.

Me ve fijo por unos segundos antes de ponerse cabizbajo y dar un largo suspiro.

—Está bien Tony, pero debes prometerme que en cuanto diga que es demasiado regresaremos de inmediato a la Torre— dice lo último de forma seria.

—Por supuesto Brucie, tú mejor que nadie sabes que me importa mucho que te sientas a gusto, en especial a mi lado— digo serio pero al ver que mis palabras lo sonrojan no puedo evitar sonreír.

En eso ríe suavemente a lo que yo levanto mi ceja expectante.

—¿Qué pasa?— pregunto aún sonriendo.

—Lo que sucede es que después de tantas insistencias y molestias que pasaste para que yo no huyera y me quedara a vivir en la Torre, ahora quieres que salga de ella para convivir y poder tener una vida normal— dice viéndome con una sonrisa dulce en su rostro —y es que cuando escucho lo ridículo que son los medios al decir que eres un ególatra que sólo le importa el sexo y el dinero, no puedo evitar reírme, son puras mentiras... pues tú eres el mejor y más bondadoso ser humano que jamás he tenido el placer de conocer.

Por primera vez en toda mi vida me quedo sin palabras y sí eso no fuera lo suficiente para quedarme estupefacto, de repente y sin previo aviso Bruce me da un fuerte abrazo mientras me susurra al oído.

—Eres una buena persona Tony Stark, nunca dejes que nadie te diga lo contrario— ante esas palabras y por su cercanía no pude evitar estremecerme.

—Mucha gracias— él me regala una sonrisa tierna y sincera —y quiero decirte que yo pienso y siento exactamente lo mismo por ti— digo con una mirada firme, dando a entender que nada de lo que dijera me haría cambiar de opinión, Bruce sólo asiente en respuesta mientras se vuelven a enrojecer sus mejillas.

Justo cuando iba a proponerle que saliéramos de una vez, una voz chillona me interrumpe por detrás.

—¡Tony!

—¿Qué pasa Pepper?— pregunto sin dejar de ver a Bruce para prestarle atención a la rubia.

—Tienes una junta con los inversionistas franceses dentro de 15 minutos, ¡y todavía sigues en esas fachas!— casi termina gritando Pepper.

En eso recuerdo como empezó mi platica con Bruce, había terminado de optimizar mi última armadura de Iron Man y le había preguntado a Jarvis en dónde se encontraba Bruce y me dijo que en todo el día no había salido del laboratorio, así que fui por él con la misión de sacarlo para ir a comer.

En cuanto a esas fachas que dice Pepper, es que me doy cuenta de que sigo en jeans y con una playera gris cubierta de manchas de aceite, y que al ver a Bruce parece que también lo había manchado, le iba a pedir perdón pero con una mirada y una sonrisa me deja en claro que todo está bien.

—Bueno Pepper cancela la reunión tengo planes para salir a comer con Bruce— digo sin darle importancia a la tal junta.

—¡Tony es una importante reunión!, puedes salir a comer con tu "amiguito" cualquier otro día, ¡ellos no!— termina diciendo con una mirada de enojo en el rostro.

Le iba a replicar y ordenarle que no lo volviera a llamar así, pero Bruce me interrumpe en ese momento.

—Pepper tiene razón Tony, podemos ir a comer cualquier otro día— dice mientras sale del laboratorio casi corriendo

Yo lo veo salir mientras un sentimiento de impotencia me recorre y escucho una voz enojada que me grita en el fondo.

—¡Tony!

—¡Tony!

—¡Tony!

—¡Tony!

—¡Tony!


(BB+TS)


—¡Tony!

—¿Qué sucede?— digo levantándome del frío suelo de la nave, pues me caí de la cama por su culpa.

—Nos encontramos en la órbita del planeta Tierra, tardaremos unos cuantos minutos más en descender a las coordenadas establecidas— me responde la alienígena (y al parecer también despertador) llamada Nébula.

—Gracias por avisarme— digo sinceramente mientras me froto la cabeza para aliviar algo del dolor que me aqueja (por las migrañas y el golpe).

Pues desde Thanos pasó tengo las peores pesadillas y los mejores sueños con cierto científico, los cuales han rondado mi mente todo este tiempo y me han dejado pocos momentos de descanso, y lo que tengo no los puedo disfrutar en paz.

—Sigues pensando en él, ¿o acaso me equivoco?— pregunta Nébula con algo de lástima.

Y es que desde que "eso" pasó Nébula y yo nos hemos acercado bastante, pues ese día ambos perdimos personas que amábamos y no se lo pudimos decir a tiempo, es por ello que ahora tengo un gran miedo de haber perdido a más personas que amo— en especial a Bruce —y esos temores se los he hecho saber a Nébula, pues sí hay algo que he aprendido en mis largos años de pesadillas e insomnios es que hablar con alguien sobre mis temores y miedos me pueden ayudar a evitar que dichos pensamientos me torturen aún más.

—Sí, espero que se encuentre bien— digo sintiendo la ansiedad cada vez más fuerte por volverlo a ver.

Pero antes que me pudiera responder una leve sacudida mueve a la nave, dando a entender que hemos llegado, sin decir nada más ambos salimos de la nave— de uno de los hijos de Thanos —mientras una luz y una fresca brisa nos dan la bienvenida a la Tierra.

—¿Tony en verdad eres tú?

Una Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora