Una Segunda Oportunidad

Volved Al Pasado: Parte I

(Un mes después)

Me duele mucho la cabeza...

Bip... bip... bip...

Aunque a estas alturas ya estoy acostumbrado...

Bip... bip... bip...

En especial después de haber tomado toda mi reserva de alcohol...

Bip... bip... bip...

Espera un momento...

Bip... bip... bip...

Escucho a lo lejos el suave pitido de un monitor para el corazón.

Bip... bip... bip...

Ese sonido sólo puede significar una cosa...

—Tony por favor no te rindas... — escucho una voz a lo lejos.

Esa voz... esa maldita voz...

¡¿Por qué diablos Rogers no me deja en paz de una vez por todas?!

—Tony sé que tenemos nuestras diferencias, pero jamás quise que todo llegará hasta este punto...

No sé supone que debo estar vivo... no sin mi Bruce...

—Todos te extrañamos, no te vayas sin luchar...

Alguien debió haber descubierto mi plan antes de que lo terminará de llevar a cabo...

—Por favor te necesitamos...

Esos maldito infelices, ni moribundo me hacen caso...

—Tony tienes que despertar...

¡Siempre lo arruinan todo!

—Piensa en Bruce, él no querría verte hacerte daño así...

¿Por qué no entienden que sólo quiero ver a Bruce de nuevo?

—Por favor...

Con pesadez abro poco a poco mis ojos sólo para encontrarme con la mirada aliviada de Rogers viéndome fijamente.

—Tony... estás vivo— dice con lágrimas en los ojos.

—Eso... supongo— digo con voz rasposa.

Rogers quería decir más, pero afortunadamente la Doctora Cho intervino.

—Bienvenido a la tierra de los vivos Tony— dice con una sonrisa feliz pero a la vez llena de tristeza.

—No sé... qué quieres... que... diga— apenas logré decir con lo adolorido y cansado que me encuentro.

—No te esfuerces Tony, sí necesitas comunicarte ten tu tableta— pone el dispositivo en mis temblorosas manos.

Entonces comienzo a escribir.

¿Por qué demonios no me dejaron morir?

—Tony no podíamos permitirte que te rindieras tan fácil... — empieza Rogers con uno de sus discursitos.

Por sí no lo sabes, les dejé un vídeo en dónde claramente les digo que espero que con mi partida pueda aliviar algo de las penas que les causé al mundo, al equipo y a... Bruce.

—No pongas la muerte de Bruce como pretexto para matarte Tony— Rogers dice con su típico tono de decepción paterna.

¡No sabes ni mierda de lo que hablas Rogers!

—Claro que sí Tony, yo aún siento el dolor por haber perdido a Bucky, pero no por eso quiero morirme y hacerme el mártir...

Mira Rogers no hables de lo que no sabes, ¡te lo advierto!