All For You {Jimin x BTS}

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Silencio.

Bueno, y el ruido de las manillas del reloj cada vez que pasaban los segundos, segundos que parecían eternos para Jimin, quien llevaba sin probar bocado desde hacía un buen rato.

Después de aquel extraño recibimiento por parte de JungKook, Jin le enseñó la grandiosa casa en la que iba a empezar a vivir.

Constaba únicamente de dos plantas en las que había dos cuartos de baños en cada una de ellas, incluidas varias habitaciones dónde dormían los miembros de la manada, e incluso un pequeño gimnasio con una pequeña piscina.

Por lo que le explicó Jin, en la planta principal dormían él mismo, Hoseok y  Jungkook, y en la segunda planta Taehyung, Namjoon, YoonGi y ahora Jimin en el cuarto de invitados, el cual se encargó de preparar con todo tipo de cosas que pudiera necesitar: mantas, toallas, ropa…

También se encargó de hablarle un poco más del resto de Alfas antes de la cena, pues solamente había conocido a dos y parecía que había visto al mismísimo diablo después de su encuentro con Min, así que se encargó de calmarle y explicarle que no eran tan malos como parecían, que todos tenían sus más y sus menos.

Sí, bueno, si solamente fuera eso…

-Así que tú eres Jiminnie… Woah, eres tan mono- dijo Hoseok, sonriéndole con ternura mientras le tendía una pequeña cesta con algo de pan de nieve. –Oh, puedes llamarme Hobi, o Hope, o Hoseok, como gustes.-

-¿Hope? ¿Esperanza? Eres el primero en perderla en cuanto te pegaron la patada en el culo y te echaron de tu último trabajo, ¿e intentas transmitir esperanza a otra persona? Curioso- dijo el azabache, Min YoonGi, mientras cogía algo de pan y se lo comía rápidamente.

-Oh, perdón por no ser tan optimista como tú señor “me quejo de mi puto trabajo pero no lo dejo nunca”- contestó Hobi, apartando la cesta de mala manera para que no pudiera coger más pan.

-Al menos no le voy llorando a mi puto jefe para que no me despida- añadió YoonGi, observando como NamJoon le lanzaba una mirada inquisidora. -¿Qué? Es la verdad…-

-No les hagas ni caso, se pasan así todo el día- le dijo TaeHyung al menor, mostrándole su particular sonrisa cuadrada mientras le arrebataba la cesta a Hobi y cogía algo de pan, remojando el trozo en la salsa del curry que había en su plato.

-¿Esto siempre es así? –preguntó Jimin, decidiéndose al fin a probar algo del curry que había preparado Jin.

-A veces- contestó Jin, observando aquel par que no dejaban de discutir.

-Dirás siempre- añadió Jungkook, sin quitarle la vista de encima a Taehyung. –Pasad de ellos, es lo mejor que podéis hacer.

Jimin observaba hacia un lado y después a otro, sorprendido de la tranquilidad con la que hablaba aquel joven respecto a sus compañeros. Se estaban peleando, ¿Acaso nadie iba a hacer nada?

-Hablaste de una fiesta de cumpleaños…- se atrevió a decir el menor, jugueteando con los palillos de metal y su comida.

-Sí, la fiesta sorpresa de Hobi Hyung. YoonGi lo jodió todo, como siempre. Yo le pedí que guardara el regalo sorpresa en su cuarto, pero el muy imbécil es tan desordenado que Hoseok lo encontró… ¡Y encima no estaba envuelto!- gritó Jungkook, captando la atención de todos en la mesa.

-Pues lo hubieses guardado tú, ¿no te jode? Rata del demonio...- contestó YoonGi, desviando la vista rápidamente hacía él.

-¡Con Kook no! ¿Me oyes?- gritó Taehyung, señalándole con el dedo pero rompiendo a reír a los pocos segundos al ver la cara de Hoseok, quién no parecía importarle lo más mínimo  aquel estúpido regalo.

-Venga chicos… Vamos a celebrar mi cumpleaños mañana sin ningún problema, ¿de acuerdo? Así también podremos pasarlo bien con Jiminnie- dijo el cumpleañero, levantándose de su sitio para mirar a todos. –Tendremos que comprar comida y bebida.-

-Y muchas patatas fritas- añadió Tae.

-Y alcohol- dejó caer Namjoon, quién se había mantenido expectante ante toda aquella movida.

Jin le lanzó una mirada en cuanto escuchó lo del alcohol, pero decidió hacer la vista gorda y volvió la vista a Jimin, quién parecía algo más tranquilo que antes. -¿Te apuntas?-

¿Qué podía haber de malo en celebrar el cumpleaños de uno de ellos? Iban a ser sus compañeros de casa durante un tiempo, así que podía intentar llevarse bien con ellos.

Todos los alfas no eran iguales, ¿no?

-Claro, me encantaría- contestó, sonriendo tanto que sus ojitos desaparecieron en forma de medias lunas. No fue consciente de que aquel pequeño gesto había tocado todos y cada uno de los corazones de aquellos rudos y vulgares Alfas con los que tendría que vivir, sobretodo en uno de ellos, quién pudo notar como su lobo revoloteaba de felicidad e incluso demandaba por aquel omega.

-Entonces podrías acompañarme a comprar todo lo necesario para la fiesta- propuso Taehyung, siendo observado por el resto de personas. –Mañana no tengo nada que hacer así que…-

-Os acompañaré- añadió rápidamente YoonGi, intuyendo las intenciones del Alfa- Mañana no trabajo-

-¡Ahh, yo tengo una entrevista de trabajo!- exclamó Hoseok, poniendo un tierno puchero en sus labios.

Jin observaba la escena patidifuso. ¿Se estaban peleando por estar con Jimin a solas? ¿En serio?

-Mierda, yo tengo una reunión con el bufete de abogados desde las nueve- suspiró Namjoon, recibiendo un codazo por parte de Jin. -¡Auch!-

-Bien. Taehyung, YoonGi y Jimin iréis a comprar lo necesario para la fiesta, y el resto nos encargaremos de decorar la casa- propuso Jin. -Más os vale no hacerle nada a Jimin, os juro que…-

-Que sí joder, que voy a vigilar a Taehyung para que no le haga nada- dijo YoonGi, levantándose de la mesa mientras bebía un poco de agua. –En pie a las diez. Ni un minuto más ni uno menos mocoso, ya sabes que te pasará si te retrasas.-

Tras decir eso, YoonGi se fue hacia su cuarto y se encerró.

El resto hicieron lo mismo, dándole palabras de ánimo y despidiéndose con entusiasmo mientras sacaban el resto de la mesa, llevando todos los platos  hacia la cocina.

Jimin permaneció un rato más sentado, rodeado de nuevo de aquel intenso silencio que era perturbado por la misma aguja del reloj.

Apoyó la mejilla en la mesa, pensando detenidamente en aquellos extraños Alfas con los que iba a convivir.

Ir con aquellos dos a comprar… ¿Qué podía salir mal?
No parecían tan malos, y le habían ayudado a pesar de no conocerle de nada. ¿Acaso podía juzgarles de buenas a primeras?

Iba a darles una oportunidad, aunque esperaba no equivocarse con ellos.

No, seguro que no se equivocaba.

¿Quien se habrá enamorado de  Jiminnie?
Bueno, ¿Quién no? Ahahha
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