Forbidden [HANK x CONNOR]

Capítulo 10: El corazón quiere lo que quiere

NOTAS DEL AUTOR

Lamento mucho la tardanza. En mi muro de Wattpad os explicaba un poco el motivo, pero ha sido por cuestiones personales y de salud familiar. ¡Pero aquí os traigo el capítulo 10, espero que lo disfrutéis! Esto empieza a estar muy cerca del final... 

Gracias a todos y todas por leerme, de verdad, estoy muy emocionado e ilusionado con este proyecto, con todos vosotros y vosotras.

@Credits by  @deam_yh

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- Pero, ¿qué...? –no pudo terminar la frase, puesto que Connor se le abalanzó, comiéndole directamente la boca con su lengua.

El joven estaba desnudo, y sólo lucía una única prenda de vestir.

Unas braguitas de encaje rojas.

Hank no daba crédito a lo que veía.

Las braguitas de encaje rojas lucían perfectas en la fina figura del androide, quien se le había abalanzado encima, buscándole desesperadamente su lengua y sus labios. Hank correspondió el beso, mientras abrazaba la enjuta espalda del joven. Lo apretó contra su cuerpo y entre gemidos y jadeos, caminaron abrazados hasta dejarse caer en el sillón.

Hank se quedó sentado y Connor se encaramó sobre él con agilidad, sin perder tiempo. Connor siempre era apasionado y fogoso, nunca quedaba saciado del teniente, algo que a Hank le hacía sentir pleno, joven y atractivo. Era adicto a esa sensación de poder que ejercía sobre el joven con tan solo acariciarle.

Las manos del mayor recorrían la espalda del joven mientras este lo devoraba a besos. Aquellas ásperas manos llegaron hasta los glúteos del androide, acariciando la tela de encaje rojo, metiendo una mano entremedio de la tela y acariciando la suave piel de terciopelo que escondía debajo.

El joven dejó de besarle y se estiró cuan largo era. Sus rodillas estaban apoyadas en el sillón que tantas veces los había recibido entre sus cojines; las piernas del teniente estaban entre sus rodillas y los hombros del teniente recibieron los finos dedos del joven, clavándose en la piel del mayor.

- Oh, Hank... -gimió el joven, haciendo presión para que Hank llevara su cara a su liso abdomen-. Me muero de ganas de que me la chupes...

Los azules ojos de Hank revisaron el esbelto cuerpo que se ofrecía a sus bocados, cayendo hipnotizado en la erótica visión de ver el miembro del androide, totalmente excitado, atrapado bajo la corta tela de la braga. La puntita sobresalía por la parte alta y a Hank se le hacía tremendamente apetitosa. Lamió el abdomen dulce y suave del androide mientras este se sujetaba a sus hombros y mezclaba sus dedos por su cabello entrecano, deshaciéndose en susurros y jadeos de deseo.

Cuando la lengua de Hank llegó hasta el bordecillo del encaje, hincó la boca entera sobre la polla dura del androide, a través de la tela, lamiendo el bulto arropado por la braga, con intención de torturar al joven androide que temblaba entre sus brazos.

Iba a proceder a bajarle poco a poco las braguitas, sin embargo, un aroma familiar le invadió los sentidos, removiéndole la memoria. Se quedó paralizado, con Connor a la espera de continuar sus caricias.

- ¿Hank? –preguntó Connor, al darse cuenta del silencio extraño que reinaba en la sala, se fijó en el rostro de su amante y éste lo tenía fruncido-. ¿Por qué paras...?