{ I won't let you go } Tsurugi X Tenma

× T E A R S ×

Un silencio de lo más incómodo y aterrador se apoderó de aquel pequeño vestuario. Tanto que se podía escuchar la mínima gota de agua pasar por las tuberías bajo el suelo. Tsurugi maldijo la situación en su mente y apretó los dientes fuertemente a la par que sus puños se cerraban con rabia. Mientras tanto, Tenma miraba la puerta incapaz de volver a mirar a la cara a la bomba a punto de estallar que tenía al lado.
-¿Q-qué hacemos? - preguntó tartamudeando el castaño. Si era él el primero en hablar no sería tan cruda la conversación... O eso pensaba.
-Tirar la puerta abajo. - respondió sin pensarlo dos veces y apartándole a un lado. Tenma en un acto involuntario le paró con las manos y dijo:
-¿¡Estás loco!? ¿¡Quieres que nos hagan pagar la puerta y nos expulsen de por vida!?
El peliazul le lanzó una mirada tan cortante como el filo de una navaja que le hizo retroceder un paso y apartar las manos de sus hombros.
-Lo prefiero antes de quedarme aquí encerrado y más si es contigo.
Tenma tragó saliva al recibir semejante vuelco en el corazón
-Pero, ¿no crees que se darán cuenta de que estamos aquí?
-¿Qué dices? Estos han ido a hacer sus vidas. Nos vamos a quedar aquí hasta mañana si no hacemos nada. No va a venir nadie, ¿entiendes?
Al ver que el castaño quedó totalmente bloqueado prosiguió con su plan. Se acercó a la puerta cogiendo carrerilla y se dispuso a darle una patada. Tenma cerró los ojos antes de que recibiera semejante golpe, y los abrió para comprobar que el gruñido que había soltado su compañero significaba que había fracasado.

Mientras lo intentaba repetidas veces sin éxito alguno y cabreándose aún más, Tenma pensaba en el tema que estaba evitando. No podría callarlo para siempre, aunque el precio fuera que le odiara aún más... Al fin y al cabo estaba convencido de que...
-¡Maldición! - gritó exhausto Tsurugi.
La impotencia le estaba subiendo mucho los humos y estaba desesperándose.

-tn hrbl s... Cnmigo...?
Miró confundido a Tenma, sin comprender lo que acababa de musitar.
-¿Qué?
El castaño, cerrando los puños y mirando al suelo repitió lo dicho aún más alto.
-¿Tan horrible sería quedarse encerrado conmigo?
Levantó un poco la vista y se encontró con esa mirada intimidante que tanto le asustaba, pero al ver que no decía nada prosiguió con firmeza:
-Quiero decir, es horrible quedarse en un maldito vestuario hasta el día siguiente. Pero al menos estás acompañado... ¿No puedes agradecer eso? Yo estoy agradecido de que mínimo no estoy sólo, pero vas tu y me pones por debajo de la situación. ¿Qué te he hecho, Kyousuke?
Aquellas palabras le pillaron por sorpresa, por lo que más allá de buscar una respuesta inmediata que no encontró se esforzó por que su expresión autoritaria no cambiara. Su pésima elección hizo que el chico continuara hablando.
-Es por lo del otro día... ¿Verdad?
La situación estaba entrando en un terreno que no le gustaba en absoluto, pero una vez dentro sólo podría resistir a duras penas. Habló sin mirarle a la cara, fijo en el suelo e inclinado como si se estuviera disculpando casi.
-Me gustaría saber qué te ocurre... Y me duele que no me quieras decir nada...
-Esque no tienes por qué saber nada de mi vida- rió. -. Aquello fue un error que vas a hacer que nunca pasó.
Tenma tragó saliva de nuevo. La situación ya era suficientemente incómoda como para que Tsurugi manteniese su actitud.
-Me enterado de demasiadas cosas que no debería saber, pero, ¿sabes qué? Podría hacer como tu dices; como que no las sé. Pero el problema es que me importa de verdad - Hizo una pausa. -. Asique, Kyousuke... Por favor... No me lo hagas más difícil... De verdad que yo...-
-JAJAJAJAJA- le cortó bruscamente. -. ¿Te doy pena? ¡No, gracias!
-Kyousuke, por favor...
Tsurugi retrocedió al escuchar la voz rota y temblorosa de Tenma. Se paralizó por completo cuando, al levantar la mirada del suelo poco a poco, pudo ver el rostro del castaño con los ojos inundados y a punto de llorar de verdad. En ese momento exacto sintió un pinchazo en el corazón que jamás había sentido. Tragó saliva al igual que de controlarse a sí mismo, ya que le estaba contagiando por completo las ganas de llorar.

Apretó los puños y tomó aire para que la actuación le saliese lo más realista posible sin romper la voz ni un segundo, como si no le doliera sacar aquellos pensamientos de su cabeza.
-No necesito tu empatía ni tu ayuda. Es más, no deberíamos ni de estar teniendo esta conversación ahora mismo.
Los corazones de ambos iban más rápido de lo normal. Tenma colocó una de sus manos en el pecho y agarró la camiseta fuertemente, mientras notaba unas cálidas gotas cayendo por sus mejillas. El peliazul al ver aquello no pudo evitar que sus actos hablaran por sí mismos, ni que sus mil pensamientos al chocar en su pequeña cabeza formaran lágrimas en sus ojos.
-No debería ni de estar aquí. - soltó muy bajo, pero suficiente como para que pudiera escucharle.

Tras escuchar esas duras y rotas palabras fue hacia la puerta de nuevo y la golpeó con rabia. Tenma no dudó ni un segundo en ir a abrazarle a cualquier precio. Enseguida el peliazul trató de liberarse de él:
-No necesito tu compasión, ¿vale? - gruñó entre lágrimas. Pero aún así el castaño le resistió como pudo en sus brazos.
-Lo siento. - le dijo mientras le abrazaba aún más fuerte.

Tsurugi se rindió y escondió su cara, apoyándola en la puerta; tratando de no ser escuchado mientras seguía llorando.  El dolor volvía a ser insoportable.

Trató de secarse las lágrimas y de apartarle de su lado para poder intentarlo de nuevo. El castaño tenía mil cosas que decir, no podía verle así sin decir nada.
-Kyousuke... - musitó sin saber muy bien cómo continuar. El chico le miró aún aturdido y quedaron mirándose de reojo en silencio.  Tenma fue completamente incapaz de decir nada para liberar el nudo que se había formado en su garganta.

-¡Suéltame de una vez! - gritó Tsurugi mientras le empujaba con la poca fuerza que le quedaba. Tenma tiró de su brazo para apartarle de la puerta y comenzaron a forcejear, ambos evitando el contacto visual con sus vidriosos ojos.
"Tengo que hacerlo." pensó el castaño mientras su corazón se agitaba.
El forcejeo continuó y Tsurugi se cabreó aún más hasta el punto de empujarle de forma que cayó al suelo. El castaño le mandó una mirada que nunca había visto, tan fuerte que se asustó y preparó para lo peor. Pero lo que haría estaba más lejos que cualquier dolor físico que pudiera causarle. Se levantó rápidamente. Todo ocurrió muy rápido. Fue directo hacia él. Tsurugi pensó en la posibilidad de que le embistiese porque realmente parecía enfurecido, pero más allá de eso, Tenma se lanzó a él y le cogió de la cara. Cuando estuvo lo suficientemente cerca de ésta Tsurugi se sorprendió y comenzó a enrojecerse, pero no pudo ni reaccionar. Para cuando se quiso dar cuenta de que sus labios se habían más que rozado, se encontraban en el suelo, uno encima de otro... Y ambos encima de la puerta...
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Aparecí de la nada xd espero que os haya gustado el capítulo. La verdad esque he estado muy liada pero ehhh no me olvido! Me daba mucha pena dejar este one-shot sin terminar (que aviso no le queda mucho más). Pero más rabia me da aún no poder responder a todos vuestros comentarios ;-; de verdad que sois geniales pero no me da la vida y tampoco he tenido wattpad a mano hasta hace un par de días... Los siento mil djfnfnf

Os lovea
Niimikyu ~💘