La llegada

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El viaje estuvo tranquilo y Luke intentó mantenernos animados con algunas historias y cuentos de sus aventuras.

Cuando alcanzamos nuestro planeta destino, y bajamos lo suficiente, pudimos ver en el horizonte una edificación bastante grande y antigua. Ésta tenía amplios jardines y mucho terreno a la redonda. Incluso me hizo recordar un poco mi antiguo hogar en el templo Jedi de Coruscant. Yo me encontraba absolutamente asombrada por el lugar, aunque por otro lado Ben, a pesar de las hermosas vistas, pareció incomodarse un poco

-"¿Todo en orden?"- Él se sobresaltó un poco al escuchar mi voz en su cabeza pero después me respondió.

-"Estoy algo nervioso"- Yo sostuve su mano y le di un ligero apretón

-"Estamos juntos, y juntos..."-

-"... Siempre estaremos bien"- Ben completo la frase y yo sonreí.

Cuando aterrizamos algunas personas se aproximaron a Luke. Parecían ser algunos alumnos del templo. Los había de todas las edades y de todas las especies, y todos parecían estar contentos de ver al Maestro Luke de regreso. Después de unos cuantos saludos y presentaciones Luke nos enseñó nuestras habitaciones. Éstas afortunadamente estaban una al lado de la otra, y todo parecía ir más que bien.

-Ben, será mejor que te vayas instalando, te des una ducha y bajes a cenar. El entrenamiento comienza mañana a las 5 AM. Sin demoras- Ben asintió mientras miraba su habitación de un lado al otro.

-Por otro lado pequeña, me gustaría que me acompañaras un momento, necesito hablar contigo.- El tío Luke me llevó a una sala que albergaba muchas cajas de madera y objetos de todos los tamaños. Algunos guardados en vitrinas y otros de mayor tamaño cubiertos por una manta.

-¿Qué es todo esto tío?- Luke miró a su alrededor y después me miró a mí

-Ya lo sabrás a su debido tiempo. Por ahora necesito pedirte un favor- Yo asentí y él continuó- Necesito tener acceso a tus memorias de entrenamiento Jedi. Cómo ya sabes me he dedicado a buscar información sobre los Jedi y sus maneras, y creo que me puede ser útil ver las viejas enseñanzas de la academia. ¿Puedo?- Él extendió sus manos y yo las tomé. Ambos cerramos los ojos al mismo tiempo y acto siguiente lo dejé navegar por mis recuerdos. Imágenes de mi escaso entrenamiento Jedi eran proyectadas en ambas mentes.

Cuando los recuerdos finalizaron ambos abrimos los ojos de nuevo y él me miró con ternura

-Parece que al final habías encontrado tu camino ¿no es así?-

-Si, al final el Maestro Windu nunca se dio por vencido. A él le agradezco todo lo que se ahora- Luke sonrió ampliamente y asintió

-Pero, hay algo que me resulta curioso...- Mi nuevo Maestro Jedi me miró con intriga

-¿Cómo pudiste pasar desapercibida en dos ocasiones?. Estamos hablando de que en la primera ocasión tus Maestros, unos de los Jedi más poderosos, no pudieron captar tu presencia. Y en la segunda ocasión fuiste capaz de esconderte del Imperio ¡Por casi un año! ¿Cómo lo hiciste?- Fruncí el ceño e hice mi mejor esfuerzo por explicar.

-El Maestro Windu sabía que ésta era una habilidad usada por algunos Jedi, y gracias a mi situación en las calles y la necesidad de protegerme yo también la desarrollé, más por instinto que por teoría...- Luke estaba atento a cada palabra que yo decía

-Necesito saber cómo se hace ____. En un libro que conseguí se mencionaba la habilidad, mas no el procedimiento. ¿Me lo podrías mostrar?- Yo asentí y lo miré un poco preocupada.

-Lo haré Luke, pero debes saber que este método es una especie de arma de doble filo. Está bien si quieres pasar desapercibido unos minutos u horas, pero hacerlo en mayor cantidad de tiempo llega a tener sus efectos secundarios, me pude dar cuenta cuando ustedes me encontraron y me recuperé por completo- Mi tío me miró con preocupación.

-¿A qué te refieres con efectos secundarios?- Preguntó intrigado

-El método consiste en desconectarte de la fuerza. Lo cual te deja vulnerable, tanto físicamente como mentalmente. Esto quiere decir que no sentirás si hay algún disturbio en la fuerza y de hecho no podrás usarla mientras "te escondas". A su vez la perdida de la fuerza te mantiene en un desgaste físico. Y en consecuencia de todo lo anterior puedes experimentar debilidad, músculos deteriorados, e incluso severa depresión. Pero como dije, esto solo sucede si la habilidad es usada por un largo periodo de tiempo...- Luke me miro como en shock mientras asentía

-Enséñame. No debes preocuparte, tendré en cuenta tus observaciones.- Yo asentí un poco renuente y lo miré

-Cierra los ojos. Imagina que un manto cubre tú figura por completo. Déjate envolver. Que esa capa obscura llegue a cada parte de tu cuerpo... -Luke exhaló sonoramente y yo continúe- Ahora siente tu fuerza, ve su forma y su luz, y poco a poco deja que se pierda en la distancia, aleja tu energía de ti- El Maestro Jedi abrió los ojos y me miró conmocionado

-Es verdad, me siento más débil... -Dijo mirándose las palmas de sus manos.

-Pero funciona- Cerré los ojos frente a él y suspiré- Estoy viendo la fuerza pero no te veo a ti- Él suspiró.

-¿Qué debo hacer para quitar el velo?-

-Solo debes cerrar los ojos y llamar de vuelta a tu fuerza. Inténtalo- Él obedeció mis órdenes para después abrir los ojos. Acto siguiente levantó su brazo y con ayuda de su fuerza atrajo su sable láser que yacía en una mesa al otro lado de la estancia

-Fascinante- Dijo admirando su arma, después sus ojos se posaron de nuevo en mí- ____, posees unos asombrosos poderes y muchos conocimientos, pero sé que estarás de acuerdo conmigo al aceptar que aún tienes mucho que aprender.

-Así es Maestro - Sonreí mientras el me miraba orgulloso

-Bueno, ahora ve a prepararte para mañana. Será el primer día oficial de entrenamiento de todos. Mañana se hará la ceremonia de construcción de los sables láser. Este planeta tiene la particularidad de poseer sus propias minas de cristales, entonces mañana los Padawan tendrán que extraer su propio cristal kyber y construir sus armas.- Luke sonaba emocionado pero tuve que interrumpirlo

-Maestro Luke... Yo ya tengo mi propio sable- Dije mirando hacia el suelo mientras con una mano sostenía la mencionada espada- Él me sonrió y acarició mi cabeza

-Había olvidado lo importante que era ese sable para ti pequeña. No te preocupes, puedes conservarlo- No pude evitar dar un saltito de alegría y tirarme hacia sus brazos. -Pero aún así este proceso es importante de aprender, así que tendrás que recorrerlo con tus compañeros.- Yo asentí comprendiendo la situación.

-Tienes razón tío, entonces me iré a la cama en este momento- Corrí entusiasmada hasta la salida, pero antes de llegar a la compuerta me gire hacia Luke y grité- ¡Daré lo mejor de mi, prometo no decepcionarte!- Él soltó una alegre carcajada

-¡Te prometo lo mismo pequeña, prometo no decepcionarlos!-


¡FELIZ NAVIDAD!

La Profecía de la Fuerza (KyloRenxReader) (HuxxReader)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora