La Profecía de la Fuerza (KyloRenxReader) (HuxxReader)

La Resistencia (Misión Pt: 3)

-¡No disparen!- Ordené a los hombres a mi espalda. -Por favor, yo haré que se retiren- Hux tenía el rostro descompuesto y estaba claro que no sabía qué hacer ante la situación. No sabía si obedecer mis deseos u obedecer los protocolos

-____...- Dijo Hux entre dientes. Yo le sonreí intentando transmitirle seguridad y comencé a aproximarme hasta Poe

-¡No disparen!- Ordenó el pelinegro a su tripulación

-Pero Señor, ella es miembro de la Primera Orden...- Un hombre alto y regordete aún me apuntaba con su bláster y me miraba con el ceño fruncido.

-¡He dicho que no!- Poe lo miró con enojo y el hombre retrocedió, bajando por completo el bláster. Cuándo por fin fue seguro seguir, llegué frente a Poe y me eché a sus brazos. Él me recibió en un fuerte abrazo y sujetó mi rostro con sus manos

-¡Estás bien! ¡Está viva!- Sus manos temblaban de alegría sobre mis mejillas, acto que me hizo soltar algunas cuántas lágrimas y sonreír

-Poe, creí que no te vería de nuevo- Su sonrisa era genuina y hermosa

-No te libraras de mi tan fácilmente- De nuevo nos fundimos en un abrazo y yo reí ante su gesto- Ahora ven, sube. Estoy seguro de que la General estará más que feliz de verte- Él tomó mi mano e intento guiarme hasta su nave, y por un breve momento, mi corazón quiso seguirlo, por un momento quise dejarlo todo atrás y volver a los brazos de mi madre, pero las cosas no eran tan simples...

-Poe, mi madre confía en mí. Aún estando de este lado ella sabe que estoy haciendo lo correcto y quiero que sepas que jamás haría algo para lastimarte a ti o a cualquier miembro de la Resistencia- A pesar de conocernos tan poco, en verdad hablábamos como si fuéramos viejos conocidos.- Hemos venido a buscar información y la hemos hallado. No es nada relevante para la Resistencia, y es por eso que no debemos iniciar una pelea. Por esta vez te pido que hagamos una tregua.- Sus ojos se abrieron ante mis palabras.

-No puedo hacer eso. El General Hux y Kylo Ren se encuentran a tus espaldas ¿Y tú los defiendes?- Dijo Poe, mirándome decepcionado

-Estoy defendiendo ambos lados. Estoy buscando la mejor solución para que nadie salga herido. ¿Qué no lo entiendes? No quiero pelear contra ti Poe, no quiero lastimarlos ni que ustedes los lastimen a ellos- Poe parecía no entender mis palabras, y su conflicto interior era más que evidente

-Estas cuidándole las espaldas a un par de asesinos- Dijo con desprecio. Yo bajé. La mirada y una lágrima resbaló por mi mejilla

-Si no confías en mí al menos confía en tu General. Estoy segura que ella te dijo que se lo que hago- Él bajó su mirada y suspiró. Acto siguiente su mano limpio mis lágrimas.

-Por el momento estás en un camino diferente al mío pero quiero que sepas que confío en ti. Confío en que nos volveremos a ver y, cuando lo haga no me rendiré. El primer día que te ví entraste a mi corazón de una manera hermosa e inesperada y estoy completamente decidido a luchar por ti, sin importar donde estés o el tiempo que tardes- Sus palabras me tomaron totalmente por sorpresa, pero la hermosa emoción de su confesión me hizo sonreír al instante- Por el momento tienes tú tregua y podrán irse en paz, pero a cambio, me debes esto-. Poe se inclinó y me besó con dulzura y pasión. Sujetó mis muñecas y mordió mis labios, para después repentinamente cortar el embriagador beso antes de que pudiera decir algo.

El regordete hombre miró la escena con asco mientras los demás tripulantes intentaban apartar la vista de nosotros. De pronto el sonido de un bláster accionándose rompió por completo el momento y mi mano apenas pudo parar el destello. Al soltar el rayo, este colisionó de lleno con una roca, y mi mirada viajó hasta el dueño del arma.