Cap 11

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Yuuri decidió esperar a escuchar a que sus dos personas favoritas bajaran por completo; cuando lo escuchó se levantó a un paso apresurado y se lanzó sobre su armario, se metió por completo hasta el fondo, entre toda su ropa de modelo y algunos zapatos de viktor la sacó, una caja con adornos de flores, la abrió y revisó, ahí se encontraban los documentos del día que registraron a yuri por primera vez más unos papeles de adopción y unas fotos del pequeño, suspiro aliviado al ver todo ahí y se levantó subiendo la caja a la repisa más alta, donde solo guardaba joyería valiosa.

-yuuri, ya puedes bajar- grito Viktor sobre las escaleras de su mansión asustando un poco a su esposo el cual respondió rápidamente

Yuuri salió de la habitación, aunque no sin antes ver que todo estuviese normal y en su lugar.

-qué tienen para mi?- rio yuuri al bajar las escaleras

Al llegar al primer piso y voltear a su comedor vio a su pequeño y a su marido con un gran plato de katsudon, su comida preferida.

-haz estado trabajando muy duro últimamente, podría darte un respiro- mencionó Viktor entregando el plato

Yuuri lo tomó entre sus manos y miró a su esposo a los ojos; con la llegada de su nuevo trabajo de modelo yuuri había empezado a bajar muy radicalmente de peso hasta tal punto que ciertas comidas simplemente eran unas pastillas reductoras y unas barras de cereal, Viktor al estar trabajando de medio tiempo como doctor lo notó pero no quería que su esposo tomara algún comentario como mal así que decidió darle esta sorpresa.

-Gracias- susurro yuuri con lágrimas en los ojos

Aquel comedor se llenó de fermonas en aquel abrazo, yuuri en verdad lo necesitaba, lo había estado aguantando por semanas e incluso casi meses.

La tarde transcurrió en él comiendo por pocos aquel pequeño katsudon mientras su amado alfa iba a trabajar.

Yuuri se percató de la hora, apenas daría el medio día, suspiro y subió las escaleras dirigiéndose silenciosamente al cuarto de su pequeño y asomándose por el marco de la puerta lo encontró un poco deprimido, sentado en el suelo de cuarto mientras dibujaba un gran corazón haciendo que el de yuuri se rompiera en pequeños trozos; suspiro y se dirigió a su cuarto con la intención de llamar a seung y juntar a los pequeños.

-hola, seung- dijo yuuri desde su habitación al escuchar que su amigo ya había contestado

-yuuri que bien que llamas, estaba apunto de hacer lo mismo, creo que tenemos que juntar a los niños- la voz del coreano soñaba algo agitada mientras que de fondo se oían pequeños lamentos no muy alarmantes

-pienso lo mismo, en el parque ahora- mencionó algo apresurado

-concuerdo- terminó de decir el coreano para colgar su celular

Los pequeños estaban muy tristes; yuuri se acerco a la habitación de su pequeño y entró lentamente llamando su atención.

-mami, yurio se siente triste- mencionó el pequeño mientras sus pequeños ojitos derramaban pequeñas lágrimas

-lose mi bebé, no quiero que yurio este triste, que te parecería ir al parque y ver a jean- mencionó yuuri viendo como poco a poco su pequeño recuperaba su hermosa sonrisa mientras asentía.

mama sustitutaWhere stories live. Discover now