¿Aún me amas? (Mo Dao Zushi)

Parte 3 Descubrimiento

aqui les dejo un capitulo mas 

--¿Creo que uno de ellos está enfermo?

Lan Xichen no comprendió del todo, de lo que le hablaba su hermano, hace un momento estaba hecho una furia ¿y ahora decía que uno de ellos estaba enfermo?

--¿Quién está enfermo Wangji?

--Wei Ying o el Joven Maestro Jiang

Lan Xichen abrió los ojos de par en par.

--¿Qué te hace pensar eso Wangji?

--Seguí a Wei Ying y entro al médico con Jiang Cheng.

Lan Xichen puso su mano en la frente, ahora si la habían hecho buena Wei Wuxian y Jiang Cheng, pensó que ambos solo habían ido por medicinas y su hermano estaba imaginando cosas, hasta que Lan Zhan apunto a la mancha. Le dijo a su hermano que eso no estaba ahí cuando él había salido de Pavillion y sabía que ambos venían de este lugar cuando se habían ido juntos.

Lan Xichen asentó a las palabras de su hermano. Pero sabía que Jiang Cheng no era el que estaba enfermo, pues él lo había mandado a apaciguar a Wei Wuxian y sabía que Jiang Cheng gozaba de buena salud. Pero no dijo nada para no angustiar a su hermano.

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Lan Qiren vio entrar a Wei Wuxian con El Joven maestro Jiang. Por lo que no se molestó ambos llegaron con frutas y algunas medicinas, lo que le resulto curioso fue ver que traían dulces y algunos juguetes. Pensó que aquello era de mesiado para la edad de ambos o tal vez el joven maestro Jiang se había entregado a la caridad. Pues lo vio muy jovial al lado de Wei wuxian.

--Bienvenido joven maestro Jiang.

Jiang Cheng correspondió el saludo en el acto y extendió las frutas al Viejo maestro Lan y unas bolsas de su te favorito. Lan Qiren sonrió, por aquel gesto. Pero no supo a que se debía tanta cortesía. Por un momento le paso por la cabeza que aquello era a modo de disculpa para la familia Lan por la falta Wei Wuxian. Así que desistió a preguntar. Además de que su sobrino no estaba muy feliz y no quería hacer el problema aún más tortuoso.

Wei Ying observo al Viejo Lan sabía que estaba disgustado con él, pero sintió alivio de que no preguntara nada y dejara ambos pasar hasta los dormitorios Jiang Cheng jalo a Wei Ying al interior.

--Vez te lo dije, así es como debo enmendar tus faltas. De ahora en delante debes portarte mejor y no andar por ahí tonteando.

Wei Ying asentó. Tenía miedo, pero no quiso decirle nada a Jiang Cheng. ¿Y si quedaba en cinta? ¿Y si ya lo estaba? ¿Y si le crecía la panza? Pero lo más preocupante para él era si todo aquello pasaba ¿Qué pasaría con su bebe? ¿Sería despreciado por la familia de Lan Zhan? ¿O solo Por el viejo Lan? pues si el pequeño salía igual de inquieto que él, su tío abuelo lo odiaría por siempre.

--Bueno es tarde debo regresar a mi habitación ahora.

--Recuerda lo que dijo el doctor, deja de hacer tonterías entendiste.

Wei Ying le sonrió a Jiang Cheng y le agradeció por todo, este le dijo que no se olvidara de avisarle si algo pasaba.

--Ya te dije tu serás el primero en saberlo.

--Eso es más que obvio el doctor dijo que debíamos regresar en un mes para ver si..

--Si..seras...

Las mejillas de Jiang Cheng se tornaron rojas por la pena y volteo la mirada, hizo un ademan con la mano para que Wei Wuxian se fuera. Cuando lo vio salir quiso brincar de alegría seria tio de nuevo. Y eso lo llenaba de gozo. Tenía que contarle todo aquello a Lan Xichen cuanto antes.

Wei Ying recorrió los pasillos, no sabía cómo iba a explicarle las cosas a Lan Zhan. Sabía que si alguien más lo había visto sin ropa estaría más que furico. Por lo que él y Jiang Cheng decidieron decirle que el doctor había determinado su estado con una medicina especial.

Se cambió la ropa, vio la mancha oscura en su ropa negra y dio gracias a que esta fuera de ese color y no del blanco inmaculado de los Lan o su mancha roja se hubiera notado al instante. Quito la compresa de algodón y la vio teñida de rojo suspiro y la puso en la basura. Coloco una nueva compresa y termino de vestirse.

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--¿Por eso estabas tan enojado?

--Si, pero al ver esto creo que me equivoque.

--Eso que hiciste estuvo muy mal, No fue la mejor forma de hacer las cosas. Mira por todo lo que has pasado en un solo día.

--También es mi culpa por no hablar con él. Aunque no sé si esa sangre es de él o no.

--Bueno yo hablare con Jiang Cheng para ver qué me dice al respecto y tu trata de hablar con A-Xian.

Lanzahan asentó. Y salió de la biblioteca y se fue directo a sus habitaciones ahí le esperaba Wei Ying quien estaba recostado en la cama. Sosteniendo aquellas mariposas de colores que habían comprado en el mercado. Lan Zhan al ver aquella escena recordó a aquellos juguetes que le había comprado a Lan Sizhui ya hacía tiempo cuando era muy pequeño.

Wei Ying estaba tan embobado con aquellos juguetes que no se percató de la presencia de su esposo. Hasta que sintió su mano sobre la suya. Wei Ying lo observo y de la nada lo abrazo. Lan Zhan sintio un golpe enorme en su nariz Wei Ying olía a jazmines y a lotos. No pudo resistir aquel delicioso aroma y lo estrujo entre sus brazos. Wei Ying dejo caer al suelo las pequeñas mariposas. Y comenzó a llorar.

--Lan ...Ergege..Yo lo siento mucho.

Al escuchar esa pequeña voz angustiada sintió que se le encogía el corazón, acaricio la cabeza de Wie Ying y lo recostó en la cama. Cuando estuvo a punto de preguntarle sobre si estaba enfermo o no sus labios fueron silenciados por los carnosos labios de Wei wuxian. Aquel beso gentil se convirtió en un beso feroz y demandante. Wei Ying dejo que aquella lengua invadiera su interior y recorriera todo su paladar, Lan Zhan desajusto el cinturón de su esposo y dejo expuesto sus pectorales, los pezones se-mi rosáceos de Wei Ying se erizaron en el acto y Lazhan comenzó a lamerlos y a mordisquearlos suave mente, arrancando sus piros de la boca de Wei Ying.

--Ah..am.. Wangji...

Lanzhan continuo con aquel jugueteo, las caderas de Wei Ying se movieron en automático al igual que sus manos las cuales rodearon el cuello de su esposo, este lo de volvió a la cama para recorrer su esbelto cuerpo con pequeños besos y ligeras mordidas descendiendo hasta los huesos de la pelvis para mordisquearlos ligeramente.

--Ah...Lan...Erge-ge...

Wei Ying sintió como Lan Zhan aflojaba sus pantalones recordó que tenía puesta la compresa de algodón y quiso detener a las manos de Lan Zhan pero no pudo su esposo toco aquel bulto que estaba en su trasero y lo removió en el acto. La cara de Wei Ying se puso roja como un tomate quería quitarle aquello de la mano a su esposo. Pero no se atrevió a moverse.

--We Ying. ¿Acaso tu estas enfermo?

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bien quetal la historia..pobre Lanzhan.. 

nos leemos en el siguiente