Capítulo 34.

6.3K 619 58
                                    

Jeremy y yo subimos al ascensor de la empresa. Miraba a mi alrededor, recordando lo que meses atrás, había ocurrido aquí. La pasión que se desató entre estas paredes frías de hierro que para aquel entonces, todo el ambiente parecía estar envuelto en llamas, llamas que provenían del deseo ardiente de nuestras almas.

Sentí un hueco en el corazón, y un dolor profundo que hacia que mis ojos se humedezcan con lágrimas no podía asumir la idea de nunca volver a estar en sus brazos, de jamás poder escuchar de sus labios un "te amo".

—Justin no has querido hablar. Si te sientes tan mal, te hubieras quedado en casa —respiré hondo, intentando reprimir las lágrimas que se querían escapar— hijo, ¿me escuchas?

—Papá estoy bien —dije en voz baja.

—Tal vez sea mejor que despejes la mente... digo, no creo que Miley vuelva. Sería muy doloroso para ella tener que....

Jeremy se calla al abrirse las puertas del ascensor.Tanto él como yo miramos asombrados a Miley, quien se encontraba muy sonriente platicando con un empresario.

—Se le nota que esta sufriendo ¿no? —negué con la cabeza agachando la mirada tristemente, mientras me alejaba hacia mi oficina.

No One's POV

—Miley —ella voltea hacia Jeremy, luego le hace seña al hombre de que la dejara sola— ¿qué haces? Pensé que...

—¿Qué? ¿Qué me iba quedar en la casa encerrada como una idiota llorando mis penas?

—No, solo que dado las circunstancias....

—Jeremy, hay que saber separar los problemas personales con el trabajo, además, yo estoy bien, créeme —dice con la voz firme y mirándolo fijamente.

—Miley, ¿a quien quieres convencer? ¿a mi o a ti misma? —ella se queda callada por unos segundos, luego empieza a alejarse— ¿qué ganas con esta actitud? ¿qué no decías que estabas muy enamorada? —ella voltea y lo mira con coraje.

—Eso creía. Pero lo único que estaba era ciega, ¿sabes? porque tu hijo es igual de patán que todo los hombres.

—El jamás te engañó. Por mas trabajo que me cueste aceptarlo, Justin te ama y la felicidad de mi hijo es lo mas importante para mi.

Miley le sonríe sínicamente.

—¡Que lindo! Pues ahora que sea feliz con la perra de Caitlin —Miley voltea nuevamente para irse.

—¡Miley, espera!

—Adiós —gritó sin voltearse.

Jeremy la siguió con la mirada, observando como ella caminaba por el pasillo sonriéndole coquetamente a los hombres que estaban a su alrededor. El sabía que esa actitud de indiferencia que ella había tomado era para protegerse....protegerse de seguir sufriendo y de ser lastimada. Pero él teme el día en que Miley por fin reaccione, que llore verdaderamente el dolor del desengaño que ella esta guardando en el alma.

«—Hola, ¿eres Jeremy Bieber? —pregunta una voz de hombre.

—Si.

El hombre joven sonríe, extendiendo su mano hacia Jeremy.

—Josh Hudson.

—Ah! Perdón, se me había olvidado. Es que tengo tantas cosas.

—No te preocupes. Entiendo, debes ser un hombre muy ocupado.

Jeremy sonríe.

—Acompáñame, te voy a presentar a mi hijo, Justin. Vas a quedarte con él por un tiempo hasta que te sientas cómodo.

—Bien.

—Solo te advierto que tal vez no sea muy amigable. Es que tuvo una pequeña discusión con su novia. Ya sabes como son esas cosas.

Miley POV

Había pasado todo el dia intentando evadir a Justin pero por mas que quiera disimular mis sentimientos, no puedo evitar acercarme a su oficina. Tal vez sea nada más por verlo o para ver si Caitlin por casualidad estuviera ahí. Miré por la ventanilla y la primera persona que veo, es a George.

¡El padre de esa ofrecida, perra, maldita!

«—Con permiso.

Me sobresalté, girándome rápidamente.

—¿Que te pasa? ¿me quieres matar? —el chico me mira fijamente y ronríe.

—Perdón, no era mi intención.

Me quedé mirándolo por unos segundos. Aunque pensar en un hombre de esa manera era lo mas lejano en mi mente, no podía negar lo guapo que estaba. Su manera de mirar y su sonrisa eran verdaderamente cautivadoras. La mirada de él era distinta no había esa lujuria en sus ojos como estaba tan acostumbrada a ver, hasta con Justin, si no, sinceridad y ternura.

—No te preocupes. Eres nuevo ¿verdad?

—Si. Josh Hudson —dice extendiendo su mano hacia mí. Sonreí coquetamente, tomando su mano, pero sin desviar la mirada de la suya.

—Miley Cyrus.

—¡Ah! Eres la famosa Miley ¿no?

—Me imagino que ya conociste a Jeremy.

—Si, pero él no me ha hablado de ti —sonreí.

—¿Ah no? Entonces ¿quién?

—Sólo te digo que no eres famosa por ser precisamente la hija del jefe —me guiña un ojo, mientras abría la puerta de la oficina de Justin. Pero antes de entrar, me susurró muy cerca de mi oído—: pensaba que exageraban, pero ya veo que se quedaron cortos.

El termina de entrar, dejando la puerta abierta. Me quedé muy sonriente. Tal vez le pueda sacar uso a Josh. Entré mas atrás de él. La mirada de Justin se enfoca sobre mí casi de inmediato.

—Hola —caminé sensualmente hacia el escritorio de Justin, sentándome sobre él con las piernas cruzadas, asegurándome de que el corte de mi falda quede abierto, dejando al descubierto mi muslo.

—Miley creí que ya te habías ido —dice Jeremy.

—Pues ya ves que no.

—Hola, que gusto verte de nuevo —saluda George. Lo miré seriamente por unos segundos, luego sonreí hipócritamente.

—Si. Me imagino que debes estar muy feliz ¿no? con eso de que vas a ser abuelo —George me mira un poco extrañado.

—Miley, que te parece si.... —interrumpe Justin.

—Josh, espero que te agrade este lugar —dije parándome y acercándose a él. Justin nada mas me seguía con la mirada seria.

—Estoy seguro de que si.

El me sonríe. Una sonrisa capaz de derretir a cualquier mujer pero por mas guapo que sea, mi corazón ya tenia dueño. Y aunque muy a su pesar, amaba a Justin con toda mi alma y sería incapaz de enamorarme nuevamente. Pero era un sentimiento que batallaba y que había decidido arrancar de mi corazón, cueste lo que cueste. Estaba dispuesta hacerlo.

—Tal vez pueda ayudarte a sentirte mas a gusto —tomé su mano y con un bolígrafo, escribí mi número de móvil en su palma. De reojo miré hacia Justin, quien parecía que estaba a punto de reventar, pero tambien ví tristeza en su rostro.

—Miley por favor, ¿puedo hablar contigo? —levanté la mirada hacia Justin y por un instante sentí debilidad ante su mirada de suplica y tristeza. Pero rápidamente reaccioné con la presencia de George.

—Tengo muchas cosas que hacer Biebs. Así que tal vez podemos hablar mañana o pasado...o nunca....no sé —volteé hacia Josh nuevamente— Mucho gusto en conocerte Josh —dije sonriendo y mirándolo fijamente.

Dulce Sabor a ti (Miley Cyrus & Justin Bieber) Jiley |HOT|Where stories live. Discover now