NORMAL LIFE [EN EDICIÓN]

Capítulo Treinta y siete

Capítulo especial: Un día después.

Mi padre era mi orgullo.

Es decir,desde que mi madre murió, él había sido mi inspiración así como mi abuela y mi prima Mei.

Desde que tengo memoria,toda mi familia se ha preocupado por mí,ya saben,mi condición del corazón y demás. Pero me sentía culpable.

Siempre,por alguna razón,yo siempre era el motivo por el cuál la familia no tenía dinero.

Mis tratamientos,mis clases personalizadas,mis trabajos para la escuela,los libros que necesitaba, útiles y demás.

Y ahora de nuevo es mi culpa.

-Pasaré por tí a las cinco,antes del atardecer,¿Está bien?.- Preguntó papá estacionando el auto.

Solo asentí. Miraba por la ventana para después abrir la puerta.

-Samantha. -Me detuve. -Se que es difícil,una vez más pasamos por la misma situación,pero es por tú bien amor,está vez es diferente.

-¿En qué sentido es diferente?.- Pregunté.- Para mí es igual,siento como todo nunca avanzo y nunca la hará.

-Te entiendo hija,pero estamos avanzando,poco a poco,el tiempo que llevamos aquí será muy valioso para todos y así será siempre,al menos hasta que mejores y podamos avanzar pero esta vez... Juntos. -Mi padre me observó.- Avanzaremos juntos Sam.

Apenas y sonreí.

Pero decidí que no dejaría que la familia se preocupara por mí más, así que sonreí con mayor fuerza,salí del auto y asentí.

-Te veo más tarde.- Leí en sus labios.

Después ví como se iba alejando por la calle, suspiré,sujete mi pecho ya que sentí una punzada.

Sam, relájate,tranquila,respira.

-Espero me dejen entrar. Por favor.

Tome aire antes de entrar a las instalaciones del orfanato. Extrañamente no habían niños fuera jugando o algo por el estilo.

Continúe hasta llegar a una puerta y tocar el timbre,minutos después abrió un guardia de seguro del orfanato con la cara más que amargada.

-¿Quién eres tú?.- Pregunto. -¿Tienes cita?.

-Me temo que no,yo solo...

-Sin cita no pasas,ahora vete.- Tomo la puerta para cerrarla pero la detuve con mi mano a tiempo.

Aquel esfuerzo hizo que mi corazón doliera.

Hice una mueca antes de decir;

-Escuche,solo vengo de visita, será pronto pero por favor, permítame pasar.

-¿Que parte de no puedes pasar no entiendes niña?.

-Shagati,hazte un lado.- Hablo una voz.- No trates así a las personas,dirán que es un orfanato corriente.

El guardia se hizo a un lado. Para dejar ver a lo que yo identifique como el dueño del orfanato. O el director.

Alto,delgado,traje y corbata, cabello castaño claro.

-Si señor Tekai.- Se disculpó el guardia.

-Una disculpa señorita Uley.- Me dijo.

-¿Cómo sabe mi nombre?. - Pregunté.

-Todos la conocen desde su incidente en la reserva,y desde su participación en aquel torneo,debo decir que me asombra verla aquí.

Le mire fijamente.