Juro encontrarte.

-Cuatro-

Me retire de ahí con miles de dudas en mi mente. De regreso a casa mi padre noto mi preocupacion, pero no me pregunto nada. Cuando entramos a nuestra casa, ya eran las 7, debería estar arreglandome ya.

-Papa.-Le llame una vez dentro, el me miro dedicadome toda su atencion.-¿Podria salir un rato hoy?

-¿Salir? ¿A donde?

-Em..., yo conocí a Dylan, bueno practicamente ya lo conocia, y pues habia quedado en...

-¿Dylan? ¿Un chico? Perdona Laila, pero creo que mi respuesta sera no, y no deberias estar ahi conociendo chicos sin mi permiso.

-Pero, no, papa el solo es un amigo, no tardaremos mucho...

-¡Que no! Laila ¡No!.

Grito molesto. Me quede callada, no esperaba ese comportamiento tan...agresivo.

-No tienes permiso de salir. Fin del tema, y ahora vuelve a tu habitación.

-¡¿Pero porque?!¿Que estas ocultandome? ¿¡Porque no puedo salir!? ¿¡Porque no he vuelto al instituto!?.

Grite desesperadamente.

-¡PORQUE NO! ENTIENDELO LAILA, TU NO SALDRÁS SOLA HASTA QUE TODO SE ARREGLE.

Sigo mirandolo sin comprender

-¿Que se arregle...que?

Cuestione un poco mas tranquila, ya que era lo que mas me había impresionado.

-Nada, ya deberías irte a dormir.-Expreso con mucha mas calma, pero su rostro no mostraba ningún sentimiento, estaba totalmente serio.

Me quede completamente sola en la cocina, estaba totalmente enojada, todo se estaba volviendo mas complicado.

-¡Maldita sea!-. Grite molesta, de lo estresada que estaba. En cuanto hice eso, las luces de la casa apagaron de golpe.-¿Que esta pasando?-Intente prenderlas pero al parecer la luz se habia ido.

-¡LO QUE FALTABA!...-Volví a hablar molesta. Pero ahora en lugar de apagarse las luces escuche como si un vaso de vidrio se quebrara. Tome un cerillo y encendi una vela, mientras intentaba caminar cautelosamente para no cortarme.

Y si, efectivamente el vaso de vidrio que estaba en la mesa se había roto.

¿Como podria haber pasado eso?

En cuanto me relaje, las luces volvieron a su normalidad.
Que extraño.

Subí a mi habitación y me encerre en ella, ya eran las 7:30 asi que me arregle lo mas rápido que podía. Ya dada la hora me asome por mi ventana para ver si Dylan se encontraba ahi.

Ahi estaba Dylan, parado, al parecer esperándome.

-¿Ya vienes?-Hablo en cuanto me vio, le hice una seña para que bajara la voz.

Tenia miedo, pero algo me decía que debía ir a esa lugar.

Baje cuidadosamente, Dylan me ayudo a hacerlo con cuidado.

-¿Y bien? ¿Nos vamos?.

Pregunte y el sonrió mientras nos dirigiamos hacia el lugar.

-¿A donde vamos exactamente?.

-A ver alguna pelea.

-Eso...¿es legal?

-No, pero no te preocupes, un amigo del internado de militar nos dejara pasar, el es el encargado.

Suspire, ¿enserio lo mejor era ir a observar peleas?.

Luego de caminar como por media hora; hasta un lugar muy apartado de mi hogar, nos detuvimos.

-Es aqui.

Dijo mi amigo justo cuando nos encontrábamos en un lugar, que incluso podría parecer abandonado.

-¿Aqui?...

El me tomo del la mano para adentrarnos a el lugar. Un guardia nos detuvo antes, pero nos dejo entrar cuando lo reconoció.

Este lugar me provocaba, escalofríos.

-Bien, creo que hemos llegado a tiempo.

Nos quedamos de pie observando como la pelea estaba por empezar. Un chico empezó a hablar por el micrófono.

-Bien damas y caballeros. La pelea mas esperada ha llegado, he aquí "El tigre", contra "La bestia".

Los dos chicos se colocan en el ring. Uno de ellos lo reconozco. Es Raul, pero a el otro no logro apreciar su rostro.

-¡Bueno, que inicie la pelea!

Raul se fue contra aquel chico que fácilmente esquivo sus golpes. Parecía que sabia a la perfección lo que hacia. Luego de un momento, el chico le propinó un gran golpe lo cual hizo que Raul girará completamente su cabeza hacia atras y que de su nariz cayera un poco de sangre.

Este acto le enfureció ya que sin pensarlo dos veces le regreso el golpe con la misma intensidad. El chico no se lo esperaba. Debido a que su rostro no estaba totalmente frente a mi, no lograba verlo del todo, pero estaba casi segura que le había lastimado la cara. Este mismo, paso su mano por su boca, supuse que estaba sangrando, miro su brazo, como si observará la sangre que se habia limpiado y se quedo quieto un par de segundos.

Desde ese momento todo se convirtió en algo fatal.

El chico enloqueció y empezó a golpear a Raul con tanta brutalidad que por un momento creí que lo mataría. Quizás era una idea descabellada, pero era tanto el coraje que Raul nisiquiera tenia tiempo de defenderse. Sentí lastima por el, debía estarla pasando horrible.
Hubo un pequeño segundo donde Raul pudo deperdido tomar un respiro, pero fue una fracción muy pequeña, ya que los golpes de este chico siguieron siendo demasiado constantes.

Sin siquiera darle mas que un golpe Raul cayó al suelo sin fuerza alguna. Lo que significaba que el chico había ganado.

El muchacho que anteriormente hablaba por el micrófono se acerco y lo tomo del brazo
girándolo hacia nuestra dirección.
Todos aplaudian, y escuche a muchos decir "Ves, te dije que el ganaria".
Trague saliva, pues lo que acababa de ver era demasiado violento. Talvez, esto no era lo mejor para mi cumpleaños.

-Y el ganador es...-Levanta la mano del chico.-"La bestia".

Dicho ganador levanta su cabeza por completo. Su cabello cae hacia atras, permitiendo que su rostro se vea completamente.

-No puede ser.

Murmure mientras intentaba enfocar mi vista para observarlo.

-¿Laila estas bien?-Cuestiono Dylan al ver mi estado.

-Esto no es posible...

Mi respiración se agito, y senti como mi cuerpo se tambaleaba un poco del impacto.

-¿Noah?