S T R A Y : 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒆𝒔

•.°|XXXII. Incómodo |°.•

El tacto suave de sus labios desapareció, puesto que Changbin se había desmayado, siendo atrapado por los brazos de Felix, el cual se quedó por unos momentos helado, literal y figurativamente. ¿Había sido real? . . . Después de todo, recibió un beso de la persona que tanto había pensado que detestaba. Después de todo, no era a Changbin a quien odiaba, era lo que le hacía sentir. Y debía admitir que le había gustado el momento, que le había gustado sentir la pequeña boca del peli negro sobre la suya, y debía confesar que la sensación extraña en el estómago había dejado de ser molesta.

A los segundos reaccionó, y con mucho esfuerzo logró subir al mayor a su espalda. Una vez equilibrado, empezó a correr con dirección al lugar donde se encontraban los demás.

Pudo divisar a Chan y Hyunjin en la puerta, esperando por él y Changbin, con un rostro lleno de preocupación. Una vez dentro, la puerta fue cerrada fuertemente debido a la tempestad que había en el exterior. Felix acostó al peli negro en un sillón, estaba cansado, pero sabía que había valido la pena. Soltó un suspiro aún mirándolo y pensando en lo que había pasado minutos atrás, todo parecía un sueño.

— Te juro que no fue Seungmin. — habló rápidamente Hyunjin, como si estuviera a la defensiva.

— A veces la naturaleza actúa por si sola. — lo apoyó Chan.

— Sí fue él. — informó Jeongin, apareciendo de repente en la pequeña sala — Ahora mismo está en su habitación, le dio su ataque de ansiedad.

Hyunjin le disparó con la mirada, se le hacía imprudente, pero de alguna forma entendió que su mentira no iría a ningún lado. Yang sólo lo ignoró.

— Hay que subirlo a su habitación. — avisó Chan, acercándose al cuerpo que reposaba sobre el sofá.

— Yo lo haré. — dijo Felix. Tomó a Changbin de un brazo y poco a poco logró subirlo a su espalda — Está bien. — aclaró, ante la cara descontenta del líder.

Cuando Changbin ya se encontraba en su habitación, durmiendo en su cama sin las prendas mojadas, Felix decidió quedarse a su lado. Tenía un sentimiento de culpa en su interior y un sentimiento de cariño que lo hacía actuar así.

— No te entiendo. — comentó Woojin, mientras se sentaba a su lado — Pensé que no te caía Bin, es más, hasta llegué a pensar que realmente lo detestabas.

Felix suspiró.

— Del odio al amor hay un solo paso. — se metió en la conversación Jeongin, quien se encontraba en la parte de atrás observando a sus compañeros.

— Es cierto. — se unió Seungmin, quien estaba entre Jeongin y Han — Cuando estaba en la escuela . . . — todos prestaron más atención — . . . Había una niña que me molestaba mucho, demasiado diría yo, luego, al finalizar el año escolar, me confesó que yo le gustaba, después de eso me dijo que sólo me molestaba para poder llamar mi atención. Intentó besarme, pero yo lo evite, ya que yo realmente la detestaba y pensaba que ella a mí, pero no era así, después me llegó a agradar y pasábamos mucho tiempo juntos, por lo que también concluyo que del odio al amor hay un solo paso.

«¿Seguro que no te gusto?» había pasado tiempo desde que no la recordaba.

Todos se quedaron pensando en la pequeña historia narrada, en especial Jisung, quien inmediatamente pensó en Minho, en sus constantes juegos absurdos y molestos comentarios para él, luego recordó su confesión, uniendo los cabos pudo darse cuenta que Seungmin quizá tenía razón.