Episodio 23: La casa de los secretos

1.4K 16 0
                                    

N: ¿Sucrette? ¿Qué haces ahí?

S: ¡Pues, vengo a dormir!

N: ¿V-Vienes a dormir aquí? ¿Cómo es posible?

S: ¿Ámber no te ha dicho nada? Hemos decidido hacer las paces... Me ha invitado ella.

N: Lo siento mucho...

S: (Ámber ha interrumpido nuestra conversación mientras empujaba a su hermano para ponerse delante)

---

S: (He llamado a la puerta esperando no equivocarme de habitación)

N: ¡Adelante!

S: Hola... (Nunca habría creído que fuese a entrar en la habitación de Nathaniel...)

N: ¿Lo estás pasando bien?

S: Sí... Algo así.

N: No pareces muy convencida.

S: ...

N: ¿Piensas decirme qué haces aquí?

S: Quizás quería pasar algo de tiempo contigo...

N: ¡O quizás no!

S: ¡Me conoces, sabes que no tengo malas intenciones!

N: Es cierto... Pero no me hagas lamentar haber confiado en ti.

S: ¡Gracias!

---

S: (Finalmente he llamado a su puerta suavemente)

N: ¿Quién es?

(Entrar en la habitación)

S: ¡Shhhh!

N: ¡Sucrette! ¿Pero qué haces aquí?

S: Yo... tenemos que hablar. Y esta vez no salgas corriendo. (Ups, acabo de darme cuenta de que duerme en BOXERS... ¡EN BOXERS!)

N: ¿Y no has encontrado un momento mejor que en mitad de la noche?

S: Tenía que... (concéntrate, deja de mirarle de arriba a bajo...)

N:... ¿sí?

S: T-Tenía que tener pruebas antes de hablarte de ello.

N: ¿Pruebas?

S: Pruebas... de que tu padre te pega.

N: ¡Ya te he dicho que dejases de inmiscuirte en esa historia! No es asunto tuyo, ¿¡no puedes entenderlo por una vez!?

S: Por favor, no grites. Si tus padres nos oyesen...

N: Sal de aquí ahora mismo.

S: ¡No, no me iré! Es un asunto muy grave. No puedo hacer como si no ocurriese nada, está fuera de lugar.

N: E-Es más complicado de lo que parece, ¿sabes?

S: Entonces, cuenta. Puedes confiar en mí... (Le he tomado la mano. Pero parecía tan afectado que ni siquiera parecía haberse dado cuenta) Creo que te vendrá bien hablar de ello.

N: No quiero crearle polémica a mi padre... Está pasando momentos muy duros, ¿sabes? Por eso no le hablo a nadie de... de lo que me hace.

S: ¡Perdona, pero de vosotros dos, creo que tu eres quien vive los momentos más difíciles!

N: No sabes de que hablas. Mi padre ha llevado un ritmo de vida excepcional mientras subía peldaños en su multinacional. Siempre nos ha colmado de todo, a mi madre, a mi hermana y a mí, antes de...

Corazón de Melón en el Instituto. Ruta NathanielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora