Episodio 24: Bolitas de pelo

1.5K 22 0
                                    

Rosalya: Sucrette... Hay alguien que quiere hablar contigo.

S: (Mi corazón late tan rápido que tengo la impresión de que va a explotar. Creo saber de qué habla...)

N: ...

Rosalya: Os dejo, ¡intentad no mataros esta vez!

(Se ha ido con una sonrisa)

N: Rosalya tiene mucho aplomo... Es difícil ponerse en su contra.

S: Puedo deducir que... ¿ella te obligó a venir a verme?

N: Podemos decir que me ha animado enérgicamente.

S: No quiero que te sientas obligado a hablar conmigo.

N: Hubiese terminado por hacerlo por mi mismo. Creo que te debo... una disculpa.

S: (No estoy muy convencida... Llegué a pensar que no me perdonaría nunca)

N: Lo que hiciste no debió ser fácil. Ese acto precisa de mucho valor y... amistad. Y yo rechacé aceptarlo. Lo siento...

S: (Le he mirado sin decir nada)

N: ¿Aún estás enfadada?

S: Yo...

N: Entendería si tardases un tiempo en perdonarme después de todas las barbaridades que te dije... Pero, por favor, prométeme que pensarás en ello...

S: Claro que te perdono.

N: ¿A-Ah, si?

S: ¡Si! Si he hecho todo esto es porque... me importas. Sería una idiota si me enfadase contigo ahora si las cosas se han arreglado.

N: Eso me alivia... Me asustaba que no quisieses volver a hablar conmigo después de... todo esto.

S: ¿¡Cómo se te ocurre eso!? Bueno y ahora... ¿qué vas a hacer? Tu padre...

N: Ya no vivo en casa de mis padres. Castiel me aconsejó que me independizase. Odio decir esto, pero... su idea es excelente.

S: ¡Pues claro que sí! Se me debió ocurrir a mi...

N: La verdad es que es bastante lógico que la solución venga de él. Incluso si.. aún me cuesta comprender por qué me ha ayudado.

S: Creo que ni siquiera él lo sabe.

N: Si, es posible.

S: En cualquier caso, ha hecho lo que debía. Por cierto, ¿Cómo funciona una emancipación?

N: Mis padres han debido aceptarlo ante un juez.

S: ¿¡No me digas que han aceptado sin protestar!?

N: Realmente no les he dejado alternativa. Si no aceptaban, se lo contaría todo a los servicios sociales. Al final todo el mundo sale ganando...

S: Si... de alguna manera es un buen compromiso.

N: Ese es el acuerdo. Ellos me pagan el alquiler y los gastos. También he advertido a mi padre que más le valía no descargar su ira en Ámber. Porque eso no podría tolerarlo e intervendría con todos mis medios.

S: Si, está claro... (Sin llegar a la violencia, esto podría servir para que sus padres fuesen un poco más estrictos con ella...)

N: En fin... Nunca hubiera pensado en llegar a amenazar un día a mis propios padres. Y ahora vivo solo.

S: ¿Has encontrado un piso en el centro?

N: Si. Es sencillo pero bastante acogedor.

S: Me alegra que estés contento.

Corazón de Melón en el Instituto. Ruta NathanielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora